CAPITULO 35

84 3 0
                                    


Haces tres meses que la vida ha sido calmada, ya tengo todo organizado, me reúno todos los  días con Suchy en la oficina, poniéndola al tanto de las cosas que llevaba en reglas y con el contador de  la boutique, para que siempre este con ella, en lo que necesite.

Ya tengo organizada mi nueva oficina en Nueva York, y la casa que he comprado, no quiero invadirle el apartamento de Beronica, ya ella es una mujer independiente y que siga así, me llevare a mis hijos menores al nuevo hogar.

Respecto a Gustavo, me entere que se trajo a la mujer a vivir con él a la casa que un día, había sido de nosotros, pero eso no me importa, ya no es mía porque él medio mi parte.

- "Para que triunfe el mal, sólo es que los buenos no hagan nada".

Y si, no hice nada para que esa mujer ganara lo que una vez, me pertenecía. El hombre que había sido mi esposo.

¡Vicky! - dime - ¿en qué piensas mujer? La miro con una  risa – nada a aquí, viendo el cambio maravillo que la vida me espera, - si amiga estoy feliz por ti – aunque triste porque me dejas y te extrañare infinitamente – jajajajjaa por Dios ni que me fuera para otro mundo ¡no! Pero si para otro lugar bien lejos. – pues sí, tienes razón. – pero tranquila en unos cuantos mese tenemos que reunirnos en Francia e Italia, para los próximos desfiles, nos toca trabajar duro,

- siempre estaremos como dos enamoradas - pegadas al celular y viéndonos por el Skype – jajajajjaa Vicky que locura la tuya – bueno, hay te la dejo. Si me lo propones, acepto así no nos divorciaremos la dos – nos miramos y reíamos como dos tontas.

Llego el día de las despedidas, el camión del trasteo recogió temprano las cosas y la casa absolutamente desalojada, ya que viajamos en la noche, nos quedamos en la casa de Suchy, en la tarde nos reunimos en su casa, almorzamos y compartimos con las amistades más cercana incluyendo la familia de mi ex esposo, que siempre me han apoyado en mis decisiones y además sigue siendo la familia de mis hijos

Entonces tía, me vas a dejar solo – me dice Emerson – le agarro sus cacheticos y le doy un beso en su frente – si mi hermoso y guapo sobrino – pero sabes tú y los demás son bien llegados a mi hogar, lo que quiera cambiar de vida y ambiente los esperare a ya – me da un beso en la mejilla – claro tía tu encanto hace que no resista, para irte a ver, - jajajajjaa y todo se ríe y yo como una niña con mis cachetes colorado – como es posible que chico me ponga así.

Todos se fueron retirando, despidiéndose se mí y deseándome suerte en mis nuevos proyectos de vida

- bueno hija que te vaya súper y que ese cambio sea para mejorar y olvidar los amargos momentos que has vivido en estos años con mi hijo. –¿sabes? esta mañana, estuve hablando con mi hijo y me pregunto por ti, le dije que  hoy te ibas y estaba triste.

– lo siento Gloriet, pero tu hijo lo quiso así, – lo se hija no tiene por qué disculparte. Me dio un abrazo y un beso en la frente y se  fueron. – agache la cabeza con ganas de llorar, trate de calmarme para que mama no se diera cuenta y me regañara.

LA DAMA DE WINCHESTERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora