Todo iba bien en la vida de Briseida, pasaría tres meses de verano en Madrid con su mejor amiga pero, al parecer, la suerte no estaba de su parte ya que no duró allí ni dos días.
El chico que conoció en la estación, que además era un príncipe de ve...
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-¿Qué hacemos cuando despierte? - preguntó Eider ya en el dormitorio.
-Lo mejor será que no vea a Eric.
-Porque va a intentar matarme de nuevo - rodé los ojos- estoy harto, ¿sabéis? Parece que ella y yo nunca vamos a tener un final feliz con Briana - suspiré sentando me en la cama al lado de mi princesa - siempre hay alguien intentando hacer daño y, encima, lo consigue. Consigue separarnos. Solo hay que verlo ahora, ya no me recuerda y piensa que soy mi padre. Sólo piensa en matarme.
Estaba destruido, después de un año pensando que había muerto en aquella isla, resultó ser un engaño más de Arsuh.
Intentó relajarme, pues si me estreso volverá el Eric que todos odiamos. El manipulador y frío.
-Sigo pensando que lo mejor que podemos hacer es que recuerde quién es. Recordar como os conocisteis.
-Te recuerdo que no me quiere a su lado, me quiere muerto.
-Y cuando sea menos agresiva la llevaremos hacía Briana - siguió Eider ignorandome - todo volverá a la normalidad y podrá venir a la boda - sonrió melancólicamente Eider mientras abrazaba a Marc.
Y es que, después de todo lo que pasó con Briseida formalizaron tanto la relación que el la llevó a París y le pidió matrimonio hace sólo un par de meses.
-Le ataremos las manos - dijo Seúl.
Justo en ese momento Briseida comenzó a quejarse.
-Daos prisa - alentó Eider.
Justo cuando terminaron de atarla despertó.
-Te mataré - dijo mirando sus manos atadas.
No dijo mi nombre, pero sabía que eso fue para mí.
-Vas a ser mi acompañante en la boda - dije firme.
Ella comenzó a reírse, como si estuviera loca.
-¿Ir con la persona que hizo de mí vida un infierno? - comenzó a reír más fuerte - No.
-Yo no hice se tu vida un infierno - me grité- fue mi padre, ¡Humane! Piensa un momento Briseida, ¿crees que su hice de tu vida un infierno te buscaría?
-Claro - comentó sin fuerza-¿de verdad piensas que voy a creerte? Llevadme con Arsuh.
-Ehm- carraspeo Marc - Arsuh te ha entregado a Eric.
En ese momento Briseida empezó a reírse más fuerte cada vez. Como si estuviéramos locos.
-En ese caso, os acompañaré a la boda y luego me dejareis en paz.
-Serás mi acompañante - dije cada vez más distante, esta situación me sobrepasaba.
