After Game • Peter Parker ✓

20 | Nuevo miembro

Heather frunció el ceño al ver la imagen frente a ella. Ya no la tenían amarrada a una cama, pues sus gritos y locuras se habían reducido. Su cabello había crecido, siendo ahora mitad rubio-mitad rosa. Miró de reojo al doctor, quien la miraba expectante por alguna reacción.

—¿Recuerdas ese día?—preguntó, señalando la foto en la pantalla.

Ella ladeó la cabeza.—Ese es... Nico.—señaló.—Esa es Pepper.

—Esta foto fue tomada después de una obra escolar en la que participaste.—explicó el señor.

—La Gallina.—recordó con una media sonrisa.—Nico y yo nos esforzamos, pero Tony Stark nos humilló públicamente.

El señor frunció el ceño.—Cuéntame más lo que recuerdas.

—Nico se lastimó el pie por mi pala, le pedimos ayuda a Tony Stark y se río, burlándose. Luego, nos dijo lo inútiles que eramos y...

—Eso no sucedió, Heather.—interrumpió.—Tu tío los felicitó e incluso ayudó a tu amigo con su pie...

Heather se levantó de su cama, corriendo hasta el psicólogo.—¡Él no es mi tío!

Rápidamente, cuatro doctores entraron por la puerta y, entre gritos y mordidas de parte de la chica, la durmieron con anestesia.

Peter, quien se encontraba tras el espejo espía, retrocedió asustado al ver lo que sucedía.

—¿Ningún cambio?—susurró.

Pepper negó, cabizbaja. Había pasado casi un mes desde que rescataron a su sobrina.

—¿Dónde está el Sr. Stark?

—Está realizando la mudanza. Heather será transferida a la enfermería de la mansión y Tony se mudará en el Complejo.—explicó la rubia pelirroja.

Peter asintió, recordándolo. Ambos se quedaron en silencio, observando a Heather dormir. Se veía tan inocente y pacífica.

—Oh, por cierto, traje mis apuntes de las clases de la semana para que Heather se ponga al día.—Peter abrió su maleta, sacando algunos cuadernos.

Pepper sonrió de lado.—Gracias, pero Heather no regresará a la escuela.

La sonrisa de Peter se borró y su corazón sintió un leve dolor.—Cierto, casi lo olvido.

No volver a ver a la chica por los pasillos o en la cafetería de la escuela lo desanimaba mucho. Ahí la esperaban MJ, Ned... Si no recuperaba su memoria, Peter no podría volver a ser su amigo ni podría confesarle sus sentimientos. Peter giró, dispuesto a irse, pero se detuvo.

—Yo... l-lo siento por todo. Si tan sólo hubiera...

—No, no.—Pepper lo interrumpió.—No es tu culpa, Pete. Yo lo sé y Tony también, sólo que él es muy orgulloso para admitirlo.

—P-pero ahora no e-estaría...

Pepper agarró sus hombros.—Heather esta con vida, eso es lo que importa.

La mujer lo abrazó y Peter cerró sus ojos para evitar llorar. Pepper le acarició la espalda de manera tranquilizadora.

—Además, me enteré que ibas a revelar tu identidad para salvarla.—susurró Pepper.—Gracias.

Peter no pudo más y empezó a llorar en el hombro de la esposa de Stark.

—La extraño.—sollozó.—La extraño mucho.