Amortentia (Draco Malfoy y tu)

45. Funeral.

Narra _________ Winchester

Todo el colegio estaba reunido en un oscuro día. El cielo estaba totalmente tapado por nubes blancas grisáceas que daban indicios a que pronto iba a llover.
Hacía frío, la temperatura no era normal dado que ya casi era verano.

Poco a poco empezaban a caer las primeras gotas, mientras terminaba el funeral de nuestro director.

Toda la escuela estaba impactada, había algún que otro llanto, lágrimas rebeldes queriendo salir, y rostros completamente tristes y sombríos.

Todos estábamos con la cabeza agachada intentando procesar todo lo que había ocurrido.

Harry, Hermione, Ron y yo estábamos al lado de Hagrid, quien intentaba pronunciar un discurso sin que le temblara la voz.

Yo por el contrario, no había Sido consciente hasta ese momento que Dumbledore había fallecido, que yo lo había visto, y que me sentía más desprotegida que nunca.

En frente mío, estaban los de la casa de slytherin, que sin duda eran los que menos afectados estaban, hasta diría que escuche alguna que otra carcajada.
Todos tenían un rostro tranquilo, menos Draco, que se encontraba Justo en frente de mi, con la cara completamente tensa y firme. Tenía el ceño fruncido, y no era capaz de mirar al sitio donde se encontraba Dumbledore.

La lluvia empezó a caer con más fuerza, y en pocos minutos nos encontrábamos empapados, pero nadie se movió de allí hasta que la ceremonia terminó.

Poco a poco fuimos introduciéndonos en el castillo, en completo silencio. Solo se escuchaba la lluvia caer y los pasos de los alumnos que chocaban contra los charcos.

-Y ahora qué va a pasar?.- preguntó Hermione
-Dumbledore ya no está, y voldemort puede atacar.-

-Nos iremos.- sentenció Harry.

-Que? A donde?- preguntó Ron.

-Dumbledore me dijo que era lo que teníamos que hacer.-

-Todos nosotros?.- pregunté

-Si, todos nosotros.- Respondió.
-Me temo que no podremos cursar nuestro último año en Hogwarts.- prosiguió Harry.-

-QUE? Harry, estás loco?.- Espetó Hermione desquiciada.

-Ya os lo explicaré mejor cuando estemos dentro del castillo, aquí pueden oírnos.-

Siguieron hablando un rato más, aunque yo no les hice caso. Estaba dándole vueltas a una cosa todo el tiempo, y me tenía descolocada.

-Chicos os veo en la cena.- Digo antes de separarme de ellos.-

-A donde vas? .- Preguntó Ron.

-Tengo que comprobar una cosa.- Digo mientras me desvío a la Torre Norte.

Me doy algo de prisa, ya que no quiero perderme la cena.
Subo todas las escaleras De la Torre hasta que llego a la trampilla del techo, la abro y entro a la sala de adivinación.

El Aula está más cálida de lo normal, aún que igual que siempre a simple vista.

Busco a la profesora Trelawney, la cual encuentro sentada en su mesa revisando unos  libros.

Por un momento, creí que ir a ver a Firenze era la mejor opción, pero recordé que ellos no creen en que los humanos seamos capaces de ciertas cosas, así que por muy fraude que pueda llegar a ser, la profesora me pareció mejor opción.

-Disculpe profesora Trelawney.- digo intentando captar su atención.
-Tiene un momento? Me gustaría comentarle una cosa.-

La profesora Trelawney levanta la vista y deposita sus ojos en mi. Rápidamente su cara cambia a una de angustia y de sorpresa.