3. Capítulo

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- Bueno hasta luego - me despido rápidamente de Nate sacudiendo mi brazo en el aire y justo cuando me voy a dar la vuelta huyendo del playboy, BAM, me estampo contra algo, o más bien alguien y en vez de caer al suelo me sujeta el Playboy.

¡Mi día definitivamente no podría ir mejor!

- ¡Sam! - gritaN Catlyn y nnuestro nuevo acompañante mienstras que yo me repongo rápidamente del golpe alejándome de los brazos del playboy y acercándome notablemente hacia Catlyn, esto debe de ser un territorio neutro.

Mi día definitivamente no puede empeorar mas. ¿O si? Claro que si, soy Sam, si algo malo puede pasar, de seguro que si pasará.

- ¡Nate, colega! - dice el rubio a mi izquierda y Nate corresponde a su saludo con un abrazo de esos de hombres en los que se terminan dando dolorosas palmadas en la espalda.

- Harry! - responde Nate con una falsa sonrisa iluminando su cara, creo que es la hora de la verdad, Nate ya debe de estarse preguntando que es lo que hace este aqui, poricerto, ¿Qué esta haciendo Harry aqui? su vuelo es dentro de cinco dias. Lo que me deja con la siguient conclusión, Harry tiene celos y ha venido a marcar territorio.

- ¿Qué haces aqui? - pregunto directamente cuando los saludos falsos han terminado. soy directa, con Harry no necesito filtros ni una gran seleccion de palaras, solo digo lo que pienso.

- Te he traido la cartera, ta la habias dejado en casa - dice muy tranquilo, es su manera de marcar territotio. Damas y caballeros demos comienzo al concurso de quien tiene el pene mas grande - Estoy convencido de que el plan de Cat es llevaros a tomar copas y luego tendras que conducir tu - que gran verdad, cada vez que Catlyn bebe tengo que terminar yo conduciendo que aun que bebeo bastante de alguna manera u otra nunca termino de pasar el limite de la tasa.

- No tenía pensado unirme a su grupo de alcohólicos anónimos, yo tengo que ir a trabajar - continuo con mi vil mentira que tiene pinta de ser descubierta en cualquier momento. Harry sabe perfectamente que no tengo que trabajar hasta la semana que viene.

- Esta bien - dice notablemente sorprendido, pero par mi suerte no pone ninguna pega sabe que algo esta mal - Yo te llevo, asi no necesitas cojer un taxi - continua hablando tranquilamente. Agradezco tanto la parte comprensiva de harry, me pregunto que habria pasado si las posicines estuviesen invertidas, si en estos momentos Nate fuese Harry.

- ¡Nos vemos luego! - me despido con una gran sonrisa de la morena y del castaño para darme media vuelta y empezar a correr por mi vida.

En un rapido gesto Harry pasa su mano por mi cadera para atraerme mas hacia si, lo cual es su manera de mandarle la gran indirecta del siglo a Nate, se que le esta diciendo "es mía asi que manten tus manos alejads de ella o moriras antes de cumplir los 24" pero lo que el no sabe es que soy yo la que no ha podido mantener sus manos alejadas de el. snceramente nunca pense que esto fuera a ser así. En realidad nunca pense en la remota posibilidad de reencontrarme con Nate, en ningun momento de mi vida. Ahora tengo una carrera prometedora y Nate a mi la ¡do solo puede undirme y hacerma tanto daño como la ultima vez, pero tengo que admitirme a mi misma que despes de todo le quiero, pero tambien quiero Harry.

En un par de silenciosos minutos llegamos al coche y yo empiezo a llorar como una posesa. Ok, puede que este en mi semana del mes y eso tambien ayude a que estoy como una loca. Rapidamente Harry me toma en sus brazos y yo sigo llorando en su pecho, intentando tapar mi cara de verguenza. Le he puesto los cuernos a mi novio.

- Ey, ya esta - susurra Harry en mi oido mientras me abraza - No dejare que esta vez te haga daño, te lo prometo Sam, no se lo permitire. - Susurra mientras pasa su mano de arriba abajo por mi espalda produciendo que el vello en mi nuca se erice.

Cambiando al Playboy [EPEMMA 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora