Nunca me contestó el mensaje, al menos no en el tiempo que tarde en llegar a mi casa. Llegamos, deje a Vicky en el living mirando tele y yo subí a cambiarme la ropa, hacía más frío que ayer. Bajé con una frazada para taparnos con Vicky mientras veíamos tele. Me acordé del extraño que me mandó el mensaje y subí a buscar mi celular. Lo prendí y había un mensaje. Lo abrí y decía -What? I don't speak spanish, sorry :( xx- Ok, esto es muy raro. No le di importancia, después le contestaría. Baje y Vicky estaba revisando la heladera.
-Che, para. No vas a llegar a Narnia, es una heladera- bromeé.
-Te odio sabes.- dijo sacando el dulce de leche y buscando pan.
-No hay pan.- dije viendo como se daba vuelta mientras caminaba lento hasta donde estaba yo.
-¿Como que no hay pan? SABES QUE CUANDO VENGO ACA ME GUSTA COMER PAN CON DULCE.- gritó.
-Bueno calmate. Vamos a comprar pan, ¿queres?- pregunté agarrando las llaves de la puerta y algo de plata.
-Dale nena dale- respondió empujándome
-AHORA CAGATE. Anda a buscarte vos el pan- me volví a sentar en el sillón.
-¿Qué? ¡Mira si me secuestran! Dale, por favor- me miró con cara triste exagerando.
-Bueno dale vamos- Me puse la campera y salimos.
Mientras ella compraba, me dediqué a responder el mensaje, ahora en inglés, para que me entienda. Escribí -Who are you?- y lo envié. Llegó Vicky y nos fuimos.
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Una noche en Velez (l.t) -EDITANDO-
Fiksi Penggemar¿Quien dijo que tu ídolo no podía enamorarse de vos? ¿Ella? Una chica argentina de 17 años, queriendo cumplir su sueño. ¿El? Uno de sus cinco ídolos.