Llegamos al hospital y Louis entró corriendo a pedir una camilla para llevar a Vicky. Me sorprendió que lo hiciera. No por el hecho de haber salido corriendo solo por una camilla, si no porque lo hizo sin importarle que lo reconocieran, sin importarle su privacidad sabiendo que en Argentina cualquiera sabe quien es el, y eso lo valoro mucho.
Llegó con un par de enfermeros y una camilla. Pusieron a Vicky sobre ella y corrieron puertas adentro, con Louis y yo atras de ellos. Entramos y los perdí de vista, por las lágrimas y/o porque iban muy rápido, no se. Louis me abrazó, intentando sostenerme para que no me caiga redonda en ese momento. Lo abrazé tremendamente fuerte, llorando en su hombro y, ¡wow!, se sentía muy bien. Cuando estaba madianamente estable, me separé, lo mire y le agradecí eternamente, literal, por lo que hizo. Fuimos a sentarnos y esperar.
Para intentar distraerme, Louis se puso a hacer sus típicas bromas, que con suerte me hacian reír. ¿Con suerte digo? ME hacian reír. Me hacian olvidar el mal momento que estaba pasando, el es genial.
Estabamos hablando de cosas casuales que pasan, tanto estúpidas como vergonzosas cuando sale un doctor de la habitación donde supongo, estaba mi amiga.
-Amigos o familiares de Victoria Farias -dijo mirando su planilla.
-Nosotros -dije parandome rápidamente- ¿está bien? ¿qué le pasó? -pregunte desesperada mientras sentía que Louis me abrazaba por los hombros.
-Ella esta bien, tranquila señorita. -me dijo- Necesito que me diga que fue exactamente lo que paso -dijo escribiendo algo en su hoja.
-La verdad, no se. Recien nos levantabamos. La mandé arriba a cambiarse mientras yo ordenaba abajo. Tardaba y no bajaba. Subí muy preocupada y ahí la encontré, tirada en el piso. -dije sintiendo como rodaba una lágrima.
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Una noche en Velez (l.t) -EDITANDO-
Fanfiction¿Quien dijo que tu ídolo no podía enamorarse de vos? ¿Ella? Una chica argentina de 17 años, queriendo cumplir su sueño. ¿El? Uno de sus cinco ídolos.