Capitulo 29

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Pov Samuel

Mateo: por favor llevame a un internado o abandoname en un orfanato buaaaaaaaaaaaaaaaa

Siento que mi corazón se detiene y me falta el aire para respirar...

-El sueño, el sueño era una premonición, lo vas a perder, o quizás ya lo perdiste...

Mateo: por favor haslo Sam, no quiero vivir mas aquí, duele demasiado...

-Ayyy mi pequeño y su alma rota, cuanto daño le hemos hecho...

-No dejes que se vaya, no lo permitas...

Samuel: mi renacuajo, lo siento tanto, si supiese como borrar el dolor que sientes, lo haría...

Mateo: llevame a un lugar lejos de ustedes, por favor buaaaaaaaaaaaaaaaa

Su llanto se hace mas intenso y siento que el solo oírlo me rompe en mil pedazos...

Daría todo para que el sea feliz pero separarlo de mi lado no creo que sea la solución...

-Eres un egoísta e hipócrita, dices y dices pero no eres capaz de sacrificarte porque el sea feliz

-Me niego a perderlo, no puedo hacerlo...

Samuel: mi vida danos una oportunidad, una sola, si lo arruinamos haré lo que me pidas, pero antes dejanos intentarlo, prometo no fallarte mi chiquito, si tu te vas te extrañaría demasiado, no te imaginas cuanto cielo...

Mateo: snif en serio me extrañarias? -pregunta en un susurro que entre sus sollozos apenas logro descifrar.

Samuel: mucho mi vida, me harías tanta falta, quedate con nosotros renacuajo, por favor cariño.

Siento como su abrazo se vuelve mas fuerte...

Mateo: snif snif, yo... yo no me quiero ir, snif pero no soy parte de ustedes, jamas lo seré, yo... snif yo soy un arrimado buaaaaaaaaaaaaaaa

Tanto poder tiene una palabra, tanto daño es el que causa, tanto lo he herido que sanarlo parece imposible...

Samuel: tu eres parte de nosotros, lo eres renacuajo, eres mi hijo, escuchalo bien mi hijo y te amo, te amo pequeño, dejamelo demostrartelo...

Mateo: no, no soy tu hijo, no lo soy buaaaaaaaaaaaaaaaaaa

Su llanto es con tanto sentimiento, transmite lo rota que esta su alma y me siento miserable por dañarlo tanto...

No hay palabras que lo alivien, así que lo dejo llorar en silencio mientras acaricio su espalda y cada tanto beso su pelo.

Un rato después se calma, se separa un poquito de mi y me ve con duda y tristeza, sus ojos me pregunta lo que sus labios no se atreven y mas que una respuesta, recibe una suplica.

Samuel: quedate mi vida, perdonanos renacuajo, por favor danos una oportunidad una sola.

Mateo: me quedo pero aun no puedo perdonarlos -dice intentando hacerse el fuerte, mientras veo como mi chiquito vulnerable se esconde para darle paso al adolescente que aparenta ser duro y frió.

-Tu eres el culpable de que se comporte así...

Samuel: con eso basta renacuajo, gracias peque.

Quiero decirle tantas cosas, pero un nudo se apodera de mi garganta, no quiero que se sienta presionado con mis palabras, ni insistirle con mis disculpas, así que trato de cambiar el tema.

Samuel: Porque no te duchas y en un rato vamos a la piscina...

Mateo: vayan ustedes, yo me quedo aquí.

Amor contra relojDonde viven las historias. Descúbrelo ahora