Renacimiento del Ser Celestial Supremo [II]

Capítulo 229: Cada uno confiando en sus propias habilidades

Shen Rubing abrió la boca y gritó: "Segundo hermano, por fin estás aquí."

Shen Changgeng le dio a Lin Xuanzhi una expresión de disculpa, luego hizo a un lado a Shen Rubing y susurró, "¿Qué está pasando?"

Shen Rubing le contó sucintamente a Shen Changgeng sus experiencias después de entrar en la Tierra Misteriosa del Límite de la Píldora en un tono silencioso.

La expresión de Shen Changgeng se volvió inmediatamente fea. "¿Sabes que la lluvia de fuera es una lluvia medicinal poco común? La entrada a la Tierra Misteriosa del Límite de la Píldora cambiará de lugar cada año. Sólo los afortunados pueden encontrar el aguacero de la lluvia medicinal. Esto es algo que sólo puedes encontrar por casualidad y no buscándola intencionadamente, pero en realidad usaste un paraguas para bloquearla, ¡así de simple!"

Shen Rubing también estaba aturdida. Preguntó ansiosamente, "¿Cómo es que nunca he oído hablar de ello?"

La ira reprimida de Shen Changgeng finalmente estalló y rechinó los dientes, "Todo lo que hice fue decirte unas cuantas frases menos, y ahora has perdido una oportunidad tan buena. Además, ¡¿cómo puedo esperar que seas capaz de obtener un tesoro mágico que pueda bloquear deliberadamente este tipo de lluvia medicinal?!"

Shen Rubing apretó los dientes, "¡Todo es culpa de Lin Xuanzhi!"

Shen Changgeng frunció el ceño. "Lin Xuanzhi no es una cosecha virtuosa. Según tus pensamientos, parece que sabe sobre esta Tierra Misteriosa del Límite de Píldoras y su conexión con nuestra familia Shen."

Shen Rubing asintió. "Estoy seguro de que lo sabe."

Shen Changgeng no pudo evitar sentirse desconcertado: ¿cómo podría este Lin Xuanzhi saber sobre el secreto de la familia Shen? Ni siquiera Shen Rubing, la hija legítima de la rama principal, tiene las calificaciones absolutas para saber sobre los secretos de la Tierra Misteriosa del Límite de la Píldora.

Sin embargo, este no era el momento de seguir con este asunto. Shen Changgeng habló, "Después de un tiempo, abriré la puerta. Tú y yo obtendremos ese artículo juntos."

Shen Rubing frunció el ceño cuando preguntó, "¿Entonces qué pasa con los otros? ¿No nos seguirán dentro?"

"Todos los que ven el tesoro tienen derecho a una parte del mismo. Entremos juntos." Shen Changgeng tampoco pudo hacer nada al respecto. Estaba acostumbrado a comportarse con integridad y no podía perseguir a Lin Xuanzhi y al resto de aquí en este momento.

Aunque Shen Rubing no estaba contenta con ello, no tenía sentido llorar sobre la leche derramada. Ella fue la que trajo a la gente aquí, así que sólo podía soportar estos agravios reprimidos y no expresados.

"Pero puedes estar seguro." Shen Changgeng reveló una sonrisa débil pero decidida. "El Fuego Sagrado Hepta-Brillante ciertamente caerá en nuestras manos."

La expresión de Shen Rubing finalmente se veía mejor después de escuchar esto. "Así es, esta gente miope ya ha agotado gran parte de su Qi mientras desentierra estas plantas espirituales. Naturalmente no podrán luchar contra nosotros."

Shen Changgeng asintió con una leve sonrisa.

Shen Changgeng tomó a Shen Rubing de vuelta y saludó a varias personas que habían regresado después de cosechar las plantas espirituales.

Shen Changgeng era una de las Siete Estrellas del Pico del Cielo, por lo que era naturalmente muy famoso. Cuando la gente vio que era humilde y también amable, todos se llevaron una buena impresión de él.

Shen Changgeng anunció: "Más tarde, abriré la puerta del mayor tesoro de esta Tierra Misteriosa del Límite de la Píldora. No sé muy bien lo que hay dentro. Vamos a tocar de oído."