Action (Leonardo Dicaprio)

Capítulo 10: Conflictos y peleas.

– Desde que te conocí me pareciste una… muchacha completamente hermosa por fuera y a medida que te fui conociendo más me di cuenta que también eres hermosa por dentro. Durante todo este tiempo intenté convencerme de que eras una niña de tan solo 17 años, pero me has demostrado que eres más que eso, eres una mujer madura, cuando estoy contigo la paso tan bien que a veces olvido ese abismo que hay entre nosotros y pienso que tienes como 37 años, pero luego la realidad me golpea nuevamente y… no me hace bien, yo… no puedo conmigo mismo ni con mis sentimientos, se ha vuelto algo inmanejable para mí y se me está saliendo de control, soy un hombre adulto pero tú me tienes como un adolescente que se enamora por primera vez… Te amo Skylar. – Me miró a los ojos y aún sostenía mi mano entre las suyas.

Me dediqué a mirarlo atentamente y a buscar entre sus ojos las palabras que pudieran estar a la altura de formular una respuesta ante tal declaración.

– Yo… no sé muy bien que decirte más que siento lo mismo que tú, cuando estoy contigo siento que podemos hablar de cualquier tema, estoy cómoda, eres un hombre maravilloso y desde que te conocí no hago otra cosa que pensar en ti todo el tiempo, te metiste en mi vida de repente y se que ya no podré sacarte nunca más. La forma en que me tratas, me haces sentir una mujer, cuando me defiendes con altura y elegancia yo… me quedo paralizada, eres lo más cercano a un príncipe que ha aparecido en mi vida, nunca nadie me hizo sentir así, yo… también te amo Leo, y estoy enamorada de ti.

Nuestras miradas nunca dejaron de encontrarse, ambos nos mirábamos atentamente, y sin darnos cuenta nos estábamos acercando uno al otro para terminar en un hermoso beso, el mejor de toda mi vida, el más sincero…

Pero esperen… ¿Qué es ese sonido? Se parece a… ¡Oh no! ¡Es mi despertador! ¿Todo esto fue un sueño? ¿Sólo un maldito sueño? ¡Dios mío! Se sentía tan real…

Me costó unos minutos despertarme, no podía olvidar los labios de Leo sobre los míos, aunque haya sido un sueño los sentí como si fueran reales…

Corrí al baño a lavar mis dientes y a tomar una ducha de agua fría para poder caer en la realidad de una buena vez, eran las 9:30 y debía estar en el estudio a las 10 a.m. para continuar con las grabaciones y los ensayos. Me arreglé rápidamente (http://www.polyvore.com/cgi/set?id=146159176&.locale=es) y me dirigí al estudio.

– ¡Buenos días equipo! – Saludé a los productores que estaban terminando algunos detalles para las grabaciones de hoy.

Me dirigí a mi camarín rápidamente, no quería toparme con nadie y menos con Leo, no sería capaz de mirarlo a la cara luego del sueño que tuve anoche.

Arrojé mi bolso en el sofá y mis lentes en el tocador, me senté en él y comencé a masajear mi cabeza intentando olvidar aquel sueño tan real. En cuanto levanté la mirada vi por el espejo cómo la puesta se cerraba, pero obviamente no se cerraba sola, eso sería escalofriante.

– Ian ¿Ahora qué quieres? – Dije volteando para verlo a la cara.

Ian, quien estaba apoyado sobre la pared se dirigió hacia mí tambaleándose – Te dije que no iba a ser fácil librarte de mí – Dijo agarrándome por los hombros.

– ¡Oh por Dios! ¿Estás ebrio? – Dije mirándolo con asco. – ¡Ian son las 10 de la mañana!

– ¿Y qué? ¿Acaso hay horario para sufrir por una mujer? Tú sabes que estoy así por tu culpa – Dijo con la mirada perdida. – Eres tan jodidamente hermosa y sexy, amo como te quedan esos shorts, pero te los quitaría aquí mismo – Dijo mordiéndose el labio e intentando besarme.

– Basta Ian – Me alejé y cayó en el sofá como una bolsa de papas. – ¿Crees que embriagándote y haciendo esta clase de cosas vas a conseguir algo? Yo prefiero a un hombre, no a un idiota emborrachándose en la mañana.

No sé para qué habré dicho eso, se levantó y se dirigía hacia mí con mirada violenta, me aterrorizó por un momento.

– ¡ENTONCES EL ESTUPIDO DE DICAPRIO ES LO QUE QUIERES! ¿AHORA TE GUSTA CAMBIARLE LOS PAÑALES A LOS ABUELOS SKYLAR? – Gritó Ian.

– Baja la voz o vendrá seguridad a sacarte, y no quiero que por esta estupidez pierdas el trabajo.

– ¡NO PUEDO ENTENDERTE! POR MAS QUE INTENTO NO PUEDO, MILES DE CHICAS MORIRÍAN POR IR A LA CAMA CONMIGO, ¿QUE SUCEDE CONTIGO?

– ¡PUES ENTONCES VETE CON TODAS ESAS CHICAS, YO NO QUIERO A UN IDIOTA COMO TÚ! Y NO… ¿SABES UNA COSA? ESE “ANCIANO” COMO TU LO LLAMAS Y EL TRIPLE DE HOMBRE QUE TÚ.

Me enojé  mucho, no era capaz de escuchar tantas agresiones juntas, aunque no sé por qué me descontrolé tanto, fue para peor, Ian me miró con aún más rabia que antes, si es que eso era posible, y me pegó una bofetada que hizo que me sentara en el sofá con lágrimas en los ojos, mi mano en mi mejilla y la vista fija en el suelo. Hubo unos instantes en los que ninguno dijo nada, junté fuerzas y lo miré, no era el Ian Somerhalder que me traía café en las mañanas, el chico dulce que intentaba acercarse a mí, era otro, un Ian violento bajo los efectos del alcohol que aterrorizaba a cualquiera que lo mirara.

Su mirada encontró la mía y se acercó a mí, me tomó de un brazo y me levantó del sofá.

– Vas a venir conmigo ahora mismo si no quieres que te desfigure la cara.

– Por favor Ian – Dije con lágrimas en los ojos. – Te lo suplico, no me hagas daño. – Estaba al borde del llanto desconsolado.