31

159K 9.3K 4.7K
                                    

Magnus había tenido que partir de nuevo a Nueva Zelanda luego de dejarme en su casa para recuperarme. Malcolm se había negado rotundamente a dejarme sola a pesar de que le dije que estaría bien y que acompañara a su hermano. Por lo que ahora Magnus tenía que hacer todo solo y sin ayuda. Me sentí mal por el y me enoje con Malcolm por haberle dejado todo el trabajo a Magnus pero este había dicho que podía hacerlo perfectamente solo, igual seguía enojada con Malcolm.

Antes de irse los había sentado a los dos y tuvimos la conversación de la desconfianza la cual fue una pérdida de tiempo
Ellos lo único que dijeron es que me tenían vigilada solo para cerciorarse de que estaba bien y que al momento de nuestra pelea retiraron al hombre que me seguía, desgraciadamente días después fue mi ataque y se sentían idiotas y culpables por haberlo hecho.

Ahora tenía dos gigantes guardaespaldas que estarán conmigo cada vez que salga de Dankworth, no me negué, no les iba a mentir tenía miedo. Jamás me habían golpeado en mi vida y no quería volver a sentir ese dolor más nunca.

Gracias a Dios, aquellos tipos no me rompieron ningún hueso y mi cuerpo solo estaba lleno de hematomas e inflamaciones. Mi rostro solo tenía una cortada en la sien y un pómulo morado. Mis brazos y piernas se llevaron la peor parte ya que fueron mi escudo, tenía grandes hematomas color morado claro en ellos por su ya recuperación. Mi cadera seguía teniendo el dolor de la caída hacia el pavimento, mi cabeza seguía doliendo, pero estaba bien dentro de lo que cabe.

La policía había dicho que las cámaras del edificio no habían captado los rostros de mis agresores y ellos se habían ido corriendo por lo que no había ningún auto implicado. Magnus casi perdía la cabeza y Malcolm estaba frustrado al igual que yo. Trate de detallar a los hombres lo más posible y la policía dijo que si tenían algún tipo de información llamarían, esperaba que lograrán encontrarlos.

De mi madre no tenía noticias y de mi padre tampoco, quería engañarme y decirme que estaban juntos en casa peleando pero sabía que eso era imposible.

Hannah iría a Miami dentro de tres días y se instalaría allí por un largo tiempo para la construcción de la nueva sede del restaurante de John, dejando en manos su restaurante en Nueva York a su padre. Sentía la ansiedad de Hannah por teléfono y la entendía, la última vez que piso Miami fue por lo que me ocurrió hace meses pero de la preocupación y enojo creo que ni siquiera pensó en que estaba allí, pero ahora era diferente. Volvería a vivir en Miami y se que era difícil para ella. Volver a caminar por esas calles, recordar lo vivido, sus errores, su vida pasada, pero al final de cuentas todo eso la hizo ser quien es hoy en día.

Estuve estudiando en mis días de reposo y haciendo las actividades que me habían dejado para reponer los días faltantes, aun no podía creer que Magnus había pedido un trabajo por asignatura. Trabajos que había terminado y entregado también por internet y ahora solo me tocaba estudiar para los exámenes finales que comenzarían dentro de una semana. Se me dificultaba un poco por que no podía quedarme mucho tiempo leyendo algo por que me empezaba a doler la cabeza pero hacia descansos cada media hora para evitar que eso sucediera.

A pesar de que estaba con Malcolm en su casa, el me daba mi espacio toda la tarde para mis estudios y volvía a mi en la noche para cenar, ver alguna película y dormir. Había pasado mucho tiempo desde la última vez que habíamos tenido sexo pero el prometió que hasta que no esté completamente recuperada no me tocaría de manera sexual, cosa que me molestó y enterneció al mismo tiempo. No es que fuera una ninfómana pero tenía ganas de tener sexo, eso es normal. Además que Malcolm no ayudaba a que mis hormonas estuvieran quietas. 

—Malcolm. —Escucho un "Hmm" de su parte.— Quiero cenar pizza.

Ahora mismo estaba leyendo un tema para uno de mis exámenes y Malcolm estaba descansando a mi lado.

Dankworth [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora