Ｎｏ Ｍｅ Ｏｌｖｉｄｅｓ// Suga & Tu

𝑷𝒆𝒍𝒆𝒂

Era jueves por la noche, y Yoongi iba de salida para ir a comprar algo que cenar. Saliendo de su casa se topo con cierta persona que no le agradaba mucho verla.

— Yoongi, que bueno que te encuentro- saludo Dori con un ademán.

— ¿Que haces aquí Dori?- alzó la ceja.

— Vengo a hablar contigo, quiero que aclaremos las cosa.

— Yo no tengo nada que hablar contigo- dijo para luego avanzar pero Dori lo detuvo.

— Vamos será rápido, solo te pido unos minutos- junto sus manos a modo súplica.

— Bien- Yoongi se cruzó de brazos- habla.

— En primera, ¿Por qué me detestas tanto?- lo miró con extrañeza.

— Tu lo debes saber.

— Si lo supiera no te lo hubiera preguntado, no crees Yoongi- lo miró serio.

— Tú- lo señaló- me quitaste a las personas que más quería.

— De que ha...-pauso cuando recordó a lo que se refería- lo de Sorin, es un malentendido...

— Ahora resulta que es un malentendido- dijo sínico- no me salgas con esa idiotez.

— Es la verdad, lo siento mucho- bajo la cabeza triste.

— ¿No crees que es muy tarde como para pedirme perdón?- pregunto con enojo viendo hacia la calle.

— Lo sé...- alzó la cabeza mirando a su menor- pero tarde mucho por tratar de comprender tu estúpido odio hacia a mí-  frunció el entrecejo- ¿Por qué nuestra relación no es como cuando éramos niños?

— La vida cambia al igual que la gente...

— Pero no es algo normal que alguien odie tanto a su hermano- se señaló.

— Tu no eres y ni serás mi hermano Sakurada- dijo fríamente.

— Créeme que lo sé- lo miró enojado- se perfectamente que nunca me verás como tú hermano, pero no lo vengo a arreglar esa situación, vengo solo a aclarar las cosas del pasado.

— Pues que lástima porque no lo lograrás, hoy ni mañana ni nunca- intento avanzar pero de nuevo Dori lo detuvo.

— ¡Ya basta! ¡Deja de comportarte como un puto adolescente Min Yoongi!- grito enojado.

— ¿Puto adolescente?

— ¡Si! Pareces un mocoso, porque no podemos hablar si tener que mencionar que no somos hermanos- lo miró furioso- uno que quiere hablar contigo por las buenas y tú no dejas hacerlo.

— Y créeme que ni quería hablar contigo por las buenas o por las malas- lo empujó, haciendo que Dori lo tomara del cuello de la camisa- ¡Oh! No me digas que me pegaras.

— Si no me dejas hablar tranquilamente, créeme que lo haré.

— ¿Me estás amenazando Sa-ku-ra-da?- lo miró con una sonrisa burlona.

— Si te quieres tomar así, pues si.

— Por favor Dori, ya dejate bromas y vete mejor a casa- dijo el azabache zafandosé del agarre.

— No hasta que aceptes mis disculpas y podamos aclarar las cosas de una vez.

— Mira, por más que intentes aclaras, el único que terminara en buenos términos serás tú, no yo.

— Si esto es por lo de Sorin, te lo repito te nuevo es un puto malentendido, ella fue la que ocasionó todo esto.

— Pues yo no vi eso- lo tomo del cuello de la camisa- yo recuerdo que tú fuiste quien me quitó a mi novia. ¡Tu eres el que me trajo la desgracia a mi vida desde que mis papás te trajeron a casa!- grito soltandole un puñetazo en la mejilla haciendo que Dori cayera al suelo.