Jennifer Clarck es una exitosa abogada en un pequeño pueblo en el gran Estados unidos que espera algo más en su vida, se siente insatisfecha a pesar de tenerlo casi todo. En este juego es en donde entra Amelia Simmons, una mujer con un carácter atra...
Somos la imperfección vuelta perfección en sueños, seres débiles que evolucionaron volviéndose una amenaza pero por lo visto aún muy idiotas, ¿algún día veremos la verdad?.
Era realmente un día muy bonito, el cielo estaba despejado, el sol no pegaba tan fuerte, es un día excelente para sacar a panamá. Acaricie la pequeña cabeza de mi fiel compañero, el mejor amigo que pude tener. Solía decir que los animales no eran mi estilo, solo eran un problema más en una pila de problemas que seguramente tendría, pero es totalmente lo contrario, se volvió parte de mi vida y ahora es mi familia. Eran aproximadamente las 09:05 A.M cuando decidimos salir un rato al parque, no necesite correa para llevarlo, no se escapa y mucho menos lo intenta. Mi telefono comenzo a vibrar, realmente no tenía ganas de atender pero debo.
-Jennifer Clark, ¿con quién hablo?-
-Buenos días señorita, me dieron su número si es que necesitaba un abogado de buena categoría-
Que pesadilla...
[...]
Esta vez decidí dejar a panamá acompañarme al trabajo, realmente no causaba molestias y los guardias del edificio no se oponían ya que los acompañaba en su guardia por algunas horas. Le deje una fuente con comida y agua en la sala de descanso de los guardias para luego dirigirme hacía el último piso que es donde está mi oficina. Antes de que pudiera avanzar más mi cuerpo había chocado con algo y caí al suelo, una vez más, humillada.
-¡Disculpe señorita, no era mi intención lastimarla!-
Levante la mirada aún molesta, un chico realmente atractivo me había hecho caer, pero no entiendo porque no le estoy gritando.
-No hay problema, solo espero conservar la figura de mi trasero-
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Tome mis cosas y camine hacia el ascensor antes de ser detenida por Miss Guapo.
-Sería una lástima que ese trasero se deformara-
Soltó mi muñeca para luego largarse a pasos lentos pero decididos hacia la salida, perdiéndose de mi vista. ¿Que acaba de pasar?.
-¿Soy yo o ese galán te echo el ojo, jenn?-
-¡ANDREA JODER!- Cerré los ojos irritada, hoy es el día de joder la existencia de Jennifer- Me pudiste haber causado un ataque cardiaco-
-Si tuvieras problemas de ello, aunque para ser sincera si tuvieras ese problema seguiría asustandote así- Presiono el botón para solicitar el ascensor, en poco tiempo había llegado-
-Tan agradable como siempre-
Subimos al ascensor, la charla no faltó por supuesto, le conté de mi fin de semana y ella sobre aquel galán, mejor conocido como el galán policía. Al llegar a la planta más alta la plática ya había cesado, debía concentrarme en mis casos, pero hasta este punto llegue a tener un favorito. Michelle Adams, una mujer llegada a sus 60 que en uno de sus ataques de ira apuñaló repetidas veces en la piernas a su marido, de pura suerte el hombre podrá caminar en unas cuantas semanas. Antes de que pudiéramos llegar a los acuerdos un disparo hizo eco por todo el edificio.
