¥Omega¥

•||Capitulo #29||•

Al despertar, el omega abrió los ojos con molestia, pues los rayos de sol que entraban por su ventana daban directamente a su cara. Después de un par de minutos recordó lo que había pasado en los cincos dias de su celo, se sintió muy avergonzado e incomodo.

Intento levantarse de la cama, pero el brazo del alfa se lo impedía. No podía culpar a Dante por lo que paso, pues el sabia lo que ocasionaba el olor a celo de un omega en un alfa. De echo se culpaba a el mismo por olvidar que Dante era un alfa y reaccionaria a su olor.

Se levanto con cuidado, moviendo el brazo del alfa lentamente, no quería despertarlo, ya que si lo hacia tendrían que hablar sobre lo que paso, y el no quería eso.

—Ah!!! —Un dolor inmenso le llego al pararse. El grito despertó a alfa quien lo miro preocupado.

—¿Estas bien? —Dijo el alfa levantándose de la cama para ir ayudar al omega.

—S-si, solo fue un poco de dolor —Mintió, pues el dolor que sentía el omega era mucho.

Dante cargo al omega y lo volvió a echar en la cama. Jaime miro el espejo y vio su reflejo con el del alfa, este era robusto y alto, mientras que el era delgado y un poco bajo.

—Tu olor de celo esta disminuyendo... Seguro ya paso —Dijo Dante mientras se sentaba en la cama.

—Si... —Contesto Jaime con la cabeza agachada.

Dante miraba a Jaime, este tenia muchas mordidas y chupetones en casi todo el cuerpo, mientras que el alfa no tenia ni un solo rasguño, este solo traía puestos unos boxers negros.

—Oye... Olvidemos que esto paso ¿Si? —Hablo Jaime.

—Lo siento... —Jaime lo miro confundido —Te obligue hacerlo... Puedes denunciarme si quieres... Me lo merezco...

—No, se que fue mi olor quien te atrajo, no te puedo culpar solo por actuar por tus instintos...

—¿Seguro?

—Si, ademas si te denuncio no tendría donde vivir... —Dijo alzando un poco los ojos.

—¿Entonces no me denuncias por conveniencia? —Pregunto Dante alzando una ceja.

—Puede ser... —Contesto Jaime y ambos rieron.

Jaime no podía creer que no sintiera ni una pizca de molestia por lo que paso con Dante.

—¿Entonces lo olvidamos?

—Creo que a ti te costara olvidarlo —Dijo señalando las marcas que Dante le había echo.

—Cierto —Jaime acaricio una, haciendo que el alfa se sintiera feliz de eso.

Por alguna razón Jaime quería preguntarle muchas cosas a Dante. Cosas sobre el sexo que tuvieron.

—¿Como sobreviví sin agua y comida cincos dias? —Jaime aun no podía caminar, asi que se quedaría un rato en la cama de Dante.

—¿No lo recuerdas? Yo te traía comida después de cada orgasmo.

—Lo había olvidado...

—¿Tan duro te di como para que lo olvides? —Pregunto riendo.

—Ja ja Que gracioso —Se cruzó de brazos —Pero sabes, te felicito hiciste un gran trabajo, por poco y me dejas cojo

—Soy bueno en lo que hago —Sonrió al escuchar el comentario del omega.

Se puso al borde de la cama, con la mirada del Alfa en el, se levanto poco a poco sin separar las piernas, y al hacerlo sintió el semen del alfa bajar hasta las rodillas.