Bullets ; L.S

Capítulo uno.

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Louis se despertaba para empezar el día de trabajo, sus pensamientos iban directamente a sus pendientes y trámites por hacer. Se sirvió un café, encendió la calefacción y comenzó a revisar documentos y archivos de uno de los casos activos en los que trabajaba. Era totalmente ajeno al ensordecedor silencio, el único ruido venía desde el pasillo del edificio en el que vivía, asumió que eran sus vecinos y siguió revisando los documentos mientras bebía de su café.

Luego de casi una hora, se acercaba su horario formal de oficina, así que debía ir a ella. Se duchó, comió un pan del día anterior, y ya con todos los documentos que necesitaba se dirigió a su trabajo.

Bajó al subterráneo de su edificio, saludando de paso al conserje en la entrada y luego yendo rápidamente por su auto.

Al llegar al gran edificio ingresó imponente y serio, unas de sus notables características.

—Buenos días, ¿hay novedades?— preguntó a Maira, que se encontraba detrás del escritorio en la recepción del departamento —hola Louis, sí, ve a la oficina de Flynn, convocó una reunión a la hora que llegaras, debe ser importante.

Louis asintió y se dirigió a su despacho para dejar sus cosas e irse rápidamente a la oficina de su jefe.

—¿Qué tal Flynn? ¿pasó algo? Maira me dijo que programaste una reunión— dijo entrando y saludando con su mano —estamos cerca de Brown, sabrás todo con mayor detalle ahora, vamos saliendo a terreno, lo ubicamos en Rotherham y está metido en su casa de infancia, por ahora se encuentra abandonada y la usó de escondite, un agente nos informó hace un rato.

—Está muerto de miedo, su grupo se disolvió y está solo, será muy fácil atraparlo.

—En cinco voy a juntar a un equipo para dar sus características e ir a buscarlo, tú vas a cargo de tu grupo, como siempre.

Louis asintió mientras se disponía a retirarse, pero Flynn llamó su atención nuevamente.

—También hay noticias de Blake, sabemos porqué hace... bueno, lo que hace.

Louis se giró sobre sus talones, sentándose frente al escritorio de su jefe —llevamos muchísimo tiempo tras él, no podemos darnos el lujo de darle tiempo para seguir matando a ése hijo de puta, dime lo que averiguaron.

—Hay una reunión nuevamente luego de que vuelvan de Rotherham, básicamente él tuvo una hija hace diecinueve años, ella nació con una malformación congénita en su corazón, nadie se dio cuenta hasta aproximadamente los dieciséis, porque no la afectó hasta ese entonces que fue cuando la internaron por un accidente, ahí descubrieron que tenía un problema al corazón, estuvo esperando donantes por casi dos años pero no resistió, y el patrón que encontraste coincide con eso, que ha estado matando gente que no es donante—. Louis asintió —claro, y tuvo acceso a esas listas cuando trabajó en el hospital y el ayuntamiento, probablemente robó las listas de donantes y robó el registro de personas.

—Louis, es demasiado planeado para no tener experiencia haciendo esto, mi hipótesis es que lo de la hija fue un simple detonante.

—Sí, voy a investigar sus años de adolescencia, debe haber algo más que pueda ayudarnos, un padre devastado sería torpe, se dejaría llevar por sus sentimientos, debe haber algo que no estamos viendo si es así.

—Sí, pero eso lo conversamos luego, deben ir por Brown.

Louis asintió caminando junto a Flynn para dirigirse a una de las salas de reunión. Al llegar ya se encontraba el equipo completo en sus respectivos lugares, mientras que Flynn se subió a la tarima y comenzó a dictar órdenes y organizar los equipos para ir por Brown mientras compartía la ubicación donde sería atrapado.