Algo más que amigos❤ Wooho❤️ -P A U S A D A-

Rosadamente

-¡Chicos!- los agudos chillidos de Hyojong resonaban por toda la habitación, despertando de un brinco a los 9 compañeros del mismo, que de un salto ya estaban en pie.
-¿Qué pasa?- dijeron en conjunto los muchachos, tratando de orientarse y encontrar a Hyojong en su cama, más el rubio no estaba en ella; inmersos en la confusión se miraban con una expresión de no captar que estaba sucediendo.
-Vengan, vengan rápido- los chicos trataban de llegar hasta la voz de E'dawn que sonaba ya fuera de la habitación, -¿Dónde estás?- dijo en voz alta Yuto, dirigiéndose hacía la puerta.
-Aquí en la cocina- Hyojong se había alejado de la habitación y se había ido hasta la cocina, pero ellos no sabían porque.
-¿Y ahora?- dijo Kino siendo seguido por los demás; -¿Qué bicho te pico?- preguntó una vez más.
-Hyuna, ella va a venir- apenas Hyojong terminó de decirlo y sus compañeros ya tenían los ojos en blanco, -¿Venir a qué?, ¿Cuando?- ahora fue E'dawn quién puso los ojos en blanco, suspirando a la vez.
-Hola, holaaaa- dijo una alegre Hyuna entrando por la puerta principal de la enorme mansión de Cube, como era de esperarse los chicos quedaron más blancos de lo que ya estaban.
-Mi amor..- se acercó corriendo Dawn hacía los brazos de Hyuna; -¿Amor?- preguntó ingenuamente Jinho mientras hacía una "o" con su boca. -Son novios idiota- dijo Shinwon golpeando delicadamente la cabeza de Jin.
-Esperen, ¿esto es legal?- Jinho estaba estupefacto, no sabía nada del romance de Hyuna y el rubio, de hecho no todos lo sabían, pero se limitaban a preguntar.
-Bien.. nos vas a meter en problemas Hyojong- resongo por lo bajo Hui a la vez que miraba hacía todas direcciones, como si buscase a alguien que no debería estar ahí.
-Si soy un problema para ustedes yo puedo..- ¡No!, ni lo pienses Hyuna- interrumpió Dawn a la pelirroja que apenas podía ver a los chicos a los ojos debido a la vergüenza que estaba sintiendo.

Las horas de la tarde transcurrieron como de costumbre, todos dispersos por la mansión, algunos en el salón de ensayos, otros en la cocina, un par en la sala de juegos; Hyuna y Hyojong en los cuartos, seguramente haciendo cosas que los chicos no querrían averiguar, por ende les dieron su espacio y se alejaron de los cuartos, pero un curioso Jinho se acercó más de lo debido y juro haber visto a Dawn vestido con ropa de cuero.
-¿Para que sirven esas bolas de metal?- Yuto se sonrojo como un tomate, Jinho no debería preguntar esas cosas, era demasiado inocente.
-Masajes..- se limitó a responder Yuto, claramente le había mentido al pelirrosa, ese era el objetivo.
-Genial, tal vez Dawn quiera hacerme masajes con esas cosas, no sabes cuánto duelen mis hombros- Yuto arqueo una ceja mientras hacía una media sonrisa, -Oh no, tú no quieres que Hyojong te haga masajes con eso...- soltó una risita por lo bajo a la par que acariciaba la rosa cabellera del menor, Yuto sabía que Jinho lo decía con la inocencia que tanto lo caracterizaba, pero ahora no podría borrar esas imágenes de su mente.

✨✨✨✨

-Debes estar bromeando..- Hongseok levantó ambas cejas mientras sonreía dejando al descubierto sus blancos dientes.
-¿No me veo bien?- un ahora pelirrosa fucsia Wooseok se puso de pie, haciendo pequeño a Seok que lo miraba boquiabierto, -Te ves... bien- Wooseok hizo una mueca y cerró suavemente la boca del pelinegro, tomándolo desde la barbilla.
-¿Una toallita?- dijo entre risas el pelirrosa, un musculoso Hongseok revoleo sus ojos y salió de la habitación, dejando solo a Jung.
-Te ves bien bebé, te ves sexy..- decía frente al espejo el chico de metro noventa, esperaba una buena reacción de sus compañeros, específicamente de Jinho, aunque el pobre Wooseok ya no sabía que sentía por él.
Saliendo de la sala principal pudo ver a Kino, Yeo One, Shinwon y Hui que jugaban videojuegos, el primero en darse cuenta de la presencia de el alto fue Hui, su rostro se iluminó y una sonrisa de oreja a oreja fue formándose tímidamente.
-Pero..- Hui estaba demasiado sonriente como para articular palabra alguna; Jung se tornó color carmesí y sentía que sus mofletes quemaban, ¿esto de sentirse así gracias a los chicos le iba a pasar siempre?
-¿Por qué no estás viendo?- preguntó Yeo One sin entusiasmó, por el rabillo del ojo pudo divisar esa silueta alta y particularmente rosa que estaba parada en la puerta, se giro como si hubiese visto un fantasma; Wooseok se acerco por fin para evitar observar cada reacción individualmente de sus compañeros.
-¿Qué opinan?- preguntó tímidamente el de cabellos rosas con tonos rojizos, los cuatro amigos estaban sonriendo, ninguno se veía disgustado.
-Jamás pensé que te quedaría tan bien..- Kino miraba de arriba a abajo a Jung, mientras su sonrisa se hacía cada vez más grande, realmente le había gustado el nuevo look de el alto.
-Gracias... iré a ver a los demás- Wooseok les regaló una cálida sonrisa para así abandonar la sala de juegos, dejando a cuatro chicos en shock y gay panic.

Wooseok camino pesadamente sin esperar que el próximo que fuese a ver su cambio de imagen fuese Jinho, el menor estaba sentado jugando con Yuto a las cartas.
La carita de Jinho comenzó a levantarse lentamente para así posar su mirada en el chico alto que estaba detrás de Yuto; Wooseok sintió que se moría por dentro, ¿Y si no le gustaba?, ¿Y si lo hacía ver feo, o mayor?, la mente de Wooseok daba mil vueltas y el menor apenas estaba por decir algo.
-Wow..- soltó livianamente el pelirrosa pastel, Yuto lo miró y se giró rápidamente para encontrarse a Wooseok casi temblando detrás suya.
-¿Y tú quién eres?- dijo entre risas Yuto para levantarse y ver de cerca el pelo del más alto, Wooseok se tornó carmesí una vez más, sobre todo cuando vió a Jinho pegar un salto de su silla y acercarse a pasitos cortos hacía él.
-Me copiaste- dijo cruzándose de brazos Jinho a la vez que hacía trompita, Wooseok se derritió al ver a su Jinhonie reaccionando así, no había nada más tierno.
-¿Te gusta?- preguntó dirigiéndose a Jinho, el menor asintió rápidamente y sonrió con una notoria timidez, Yuto se dedicaba a oler el cabello del pelirrosa recién teñido.
-Deja de olerme- empujó juguetonamente a Yuto. Los tres chicos se sentaron a jugar a las cartas, el chico de metro noventa observaba disimuladamente a Jinho, el menor parecía no percibir la pesada mirada de Wooseok sobre él, después de todo, no podría verlo con ojos de deseo, ¿Verdad?