NARRA HUGO
Salí de allí casi corriendo, lo necesitaba, sentía que me ahogaba. Muchas cosas juntas en tan poco tiempo. Recuerdos que creía haber superado y poder llevarlos conmigo de repente volvían a atormentarme. Los malos recuerdos, como lo de mi ultima relación creía haberlos borrado, ya que todo era malo, y volvieron. Tenia miedo, mucho. Estaba cagado, de repente conozco a una chica a la cual no puedo parar de ver, no sale de mi cabeza, me gusta, me gusta un montón la idea de poder tener algo con Eva, es como yo. Quizá juntos, nosotros, hagamos las cosas bien. Pero había algo que me echaba para atrás, el miedo. Miedo al rechazo, a no ser correspondido, miedo a que si me abro con ella le de pena y haga lo mismo que mi ex. No veía a Eva así, claro que no. Pero ese miedo atormentaba mi cabeza. Independientemente de eso, por otro lado, estaba mis recuerdos, esos que hacia ya que no venían como malos, sino como buenos. Hablo de mi padre. Si, siempre que me acordaba de lo que pasó me ponía mal, triste, agobiado, pero poco a poco superé eso y cuando lo recordaba todo sabia relajarme. Pero ayer todo pudo conmigo, todo se echó en mí y no podía quitármelo de encima. También Sam se pensaba que había consumido drogas. Soy propenso a desmayarme y con sustancias fuertes mi cuerpo se desvanece, ya sean drogas, alcohol puro y duro, por eso no bebo chupitos, e incluso comidas que era olerlas y caía redondo. Cuando mi padre murió durante un año me eché a la mala vida, consumía drogas y demás. Una vez casi me da una sobredosis, entre que no lo tolero y que encima fue después de una situación parecida a la de hoy, caí redondo al suelo partiéndome la ceja. Desde entonces la ceja con cualquier golpe, puede llegar a partirse, por eso cuando el hombre me dio el puñetazo sangré tanto. Estaba claro que no iba a probar nada de drogas ahora, eso ya había pasado. Eso si, fumar, fumé desde que me subí al coche hasta que llegué a mi casa e hice lo que creía que tenia que hacer.
En casa teníamos una habitación Sam y yo, a la que le llamábamos la habitación de llorar. Tenia ese nombre porque ahí teníamos todo tipo de recuerdos, fotos antiguas, juguetes muy significativos, cosas de nuestra casa de Córdoba. Mi manta de ranas, y sobre todo, cosas de mi padre. Entré a la habitación y lo primero que hice fue irme a las cosas de mi padre. Revisé cosa por cosa, recuerdo por recuerdo. Cogí mi manta de ranitas, tenia super bien conservada a pesar de que la tuviera desde los 6 años. Me senté en el suelo viendo todas cosas, mis lagrimas caían como cataratas de mis ojos, apenas veía las cosas.
Mi padre era amante de las motos y tenia una colección montada por él. Mi moto favorita era una roja y negra. Así que la cogí junto con una camiseta de él, que a pesar de los años, nunca perdía su olor. Tenia rabia, dolor y agobio en mi cuerpo. Dejé las cosas a un lado para que no se manchasen ni nada. Me levanté y empecé a pegar puñetazos a la pared de la habitación, no me hacia daño, mi rabia y todo lo que habitaba en mi hablaba por si solo. Cuando apenas tenia fuerzas para seguir, paré. Tenia la mano llena de sangre y seguramente me habría partido algún nudillo, pero en ese momento me daba todo igual. La pared no se quedó mucho mejor que yo, habría que llamar a un obrero o arreglarla yo que he sido el que me la he cargado.
Estaba mareado, cogí las cosas y me senté en el suelo. Se me vino una imagen a la cabeza. Eva.
NARRA EVA
Estaba desubicada, de verdad que no entendía nada de lo que había ocurrido estas ultimas horas. El cambio de humor de Hugo, su pesadilla, el enfado con Sam.
Mai: titi no tendrías que haber dicho nada de eso, han vuelto sus pesadillas, no está bien -Sam miró a Mai mientras se le caía una lagrima, ahora si que no entendía nada
Sam: crees que habrá entrado? -entrar a donde por dios, quiero entender las cosas
Mai: seguro que si titi, sabes como es -Fla se acercó a Sam y la consoló, ósea, él por lo que parecía si sabia de que hablaban, era la única que no tenia ni puta idea
Eva: chicas veo que no es momento, pero me podéis explicar que ha pasado, porque de verdad que no entiendo absolutamente nada
Sam: Evi te lo contaríamos, pero Hugo nos mataría, no quiere romper su coraza nunca, y si se rompe tiene que ser él. Nosotras no podemos -la miré confundida, iba a hablar pero le sonó el móvil. Durante la llamada se le caían algunas lagrimas mientras iba levantándose de la silla- chicos tenemos que irnos, es Hugo
Eva: cómo? -íbamos todos detrás de Sam en dirección a su coche y nos montamos- Sam me puedes decir que le ha pasado a Hugo
Sam: me han llamado los vecinos, dicen que han escuchado muchos golpes en casa que vengamos corriendo -que no le haya pasado nada a Hugo, solo pedía eso
Llegamos a casa de los hermanos y Sam bajó corriendo, abrió la puerta y fue en una dirección corriendo, nosotros la seguíamos preocupados. Abrió la puerta de una habitación que estaba antes de subir a la azotea. No me podía creer. Hugo estaba tumbado en el suelo, abrazado a la manta que antes me dijo Mai y a una camiseta, también tenia una moto de colección al lado. Espera, había sangre? Era de la mano de Hugo, por dios la tendría partida.
Sam se acercó corriendo y nosotros nos quedamos en la puerta. Hugo no reaccionaba.
Sam: Hugo amor, venga despierta por fa -decía Sam entre lagrimas- cariño venga que te vas a tomar ahora tus cosas y ya veras como te encuentras mejor. Hugo por favor..
Hugo empezó a moverse, pero no despertaba. Parecía como cuando tuvo esta mañana la pesadilla, quizá era otra vez.
Hugo: no! Papá no!!!!!- eran las mismas palabras de esta mañana, yo ya era un mar de lagrimas, no soportaba que estuviera así
Sam estaba casi tumbada a su lado y no paraba de llorar. Hugo no despertaba. Mai se acercó a Sam
Mai: titi vamos a hacer una cosa cariño, te vas a levantar y vas a dejar que venga Eva, ella lo ha despertado esta mañana, deja que lo intente -Sam no dijo nada, solo se levantó dándome paso a que yo fuera.
Me acerqué a él. Buf desde más cerca menos soporto que esté así. Me senté a su lado y poco a poco empecé a hacerle caricias, le daba besos en la cara y en el cuello, sabia a agua salada. Había estado llorando, y no poco. Estaba temblando
Eva: Huguito por fa, despierta cariño, tenemos que seguir jugando. Por favor... -susurré en su oído mientras seguía acariciándole, poco a poco dejaba de temblar y parecía que se movía. No le quitaba ojo y vi como se le iban abriendo los ojos, acostumbrándose a la luz. Los tenis rojísimos, pobrecito.
Hugo: ¿Eva?
Eva: si, aquí estoy rubito -se le cayó una lágrima y se abrazó fuerte a mi, yo solo lo sujetaba e intentaba calmarlo. Parecía que se ahogaba -Hugo ven por fa, incorpórate para que puedas respirar mejor -me hizo caso pero no me soltó, tampoco quería que lo hiciese- muy bien, así es
Sam: hermanito toma -le tendió una pastilla- tómala, sabes que llevas mucho sin ellas -él la aceptó
Pasó un rato cuando Hugo ya estaba mejor, estaba recuperando el color poco a poco y ya respiraba más tranquilo. Él seguía aferrado a mi, me sentía bien siendo yo la que pueda calmarlo. Su mano no paraba de sangrar, mi camiseta llena de sangre pero la verdad es que me dio completamente igual.
De repente oímos como Sam gritaba, parecía discutir con alguien cuando entra a la habitación
Sam: Hugo es mamá, cógelo -le tendió el móvil el cual dejó en el suelo ya que estaba en altavoz
Madre H: Hugo cariño como estas
Hugo: bien no te preocupes
Madre h: no hijo, no me puedes pedir eso. Estoy a muchos kilómetros de vosotros, y no puedo ayudar en momentos como este -dijo con un hilo de voz- así que por favor hazme caso -hugo tenia la mirada pedida, no contestaba- Hugo por favor contéstame, no me hagas sentir peor
Hugo: DEJA DE DECIR ESO, NO ESTAS AQUÍ, NO PASA NADA, PERO PARA DE CULPARTE MUCHO HICISTE CUANDO NOS SACASTE ADELANTE DESPUES DE PERDER A PAPÁ -ahora entendía muchas cosas.. Hugo volvió a temblar, yo lo apretaba con fuerza hacia mi, él me miró con una cara de disculpa, yo no sabia nada, así que no importa. Sam cogió el móvil del suelo y se fue para tranquilizar a su madre.
Al cabo de unas horas salimos de esa habitación. Le dije a Hugo que subiéramos a su habitación para que se duchase y luego ir al hospital a que le vieran esa mano.
Ya estábamos arriba, le cogí ropa y se la di para que se metiera a ducharse, yo me senté en la cama a esperar. Llevaba como 5 minutos y la puerta del baño se abrió, ya? Era imposible
Hugo: no puedo mover la mano y no puedo desabrocharme el pantalón -en otro momento le diría que con el cuento a otra, pero es que no sonrió ni cuando me lo dijo. Entré al baño con él, le desabroche el pantalón y dejé un beso en su mejilla, iba a irme pero me detuvo- puedes ayudarme?
Eva: si venga, vamos -lo terminé de desnudar y le ayudé a ducharse. Era un poco raro, pero a su vez no -pues ya estaría ´
Salió de la ducha y lo ayudé a secarse y a vestirse. Le traje un chándal cualquiera la verdad. Salimos de la habitación y nos dirigimos hacia el coche.
Hugo: Eva, gracias -sonreí y le acaricié la mejilla
Eva: déjame las llaves por fa, que lo llevo yo -accedió, obviamente aunque fuese automático, no era aconsejable que condujera
Llegamos al hospital, le pidieron los datos y a los poco minutos lo metieron a una sal. Llevábamos esperando 2 horas, Fla estaba inquieto y Sam con la mirada perdida. Mai en ese momento estaba en la calle fumando. Poco después entró y se sentó a mi lado. Yo estaba un poco saturada, me enteré que su padre murió, entendía y no, porque le ha ocurrido esto, tan grave, no se supongo que ya hablaremos.
Pasó otra hora hasta que la puerta se abrió. Salió un doctor
Doctor: familiares de Hugo Cobo?
Todos: nosotros
Doctor: vale a ver, está bien pero hemos tenido que operarlo, se ha partido 2 nudillos y desplazado 1. Acaba de despertar de la anestesia, lo primero que ha dicho ha sido Papá, hemos supuesto que ha sido una pesadilla -buf no, otra vez no, Hugo no pienses más por dios- y lo segundo ha sido Eva, está aquí?
Eva: si claro soy yo, puedo pasar -mi nombre? asintió y lo acompañé hacia la sala
El doctor me llevó a donde estaba Hugo, estaba conectado a una máquina, llevaba una vía para la medicación y tenia una venda en la mano.
Hugo: Eva, gracias por venir -me dijo casi llorando, me acerqué a él y con cuidado lo abracé
Eva: cómo te encuentras
Hugo: pues ahora algo mejor, aunque no te voy a mentir, no siento apenas nada estoy atontado de los medicamentos
Doctor: bueno Hugo, te contamos. La operación ha ido bien, pero cuando estábamos cosiéndote los puntos después de intervenir, has tenido un episodio, creemos que tenias una pesadilla durante la operación y has despertado antes de que la anestesia se terminase. Has tenido algún problema o algo por el estilo?
Hugo: em bueno doctor, tuve una crisis de ansiedad y agobio, y si, las pesadillas en mi son algo normal, desde hace mucho tiempo. Aprendí a convivir con ellas -yo no le soltaba la mano a Hugo, estaba realmente preocupada
Doctor: vaya Hugo, lo siento. Deberías de haberlo dicho antes. Enseguida mando a algunas enfermeras para que te hagan un chequeo rápido, puede que adivinemos a que se debe todo ese agobio y te podamos ayudar de forma médica
Hugo: gracias doctor
Mientras le decía todo eso, él apretaba mi mano, podía notar su miedo con estar simplemente a su lado. Esta situación era rara, para que voy a mentir. Pero creo que cada vez tengo más ganas de saber de él y de apoyarlo, aunque no lo diga, lo está pasando bastante mal.
Vinieron a hacerle un chequeo y nos dijeron que en una hora tendrían los resultados, que descasara. Se fueron y al poco entraron las chicas y mi hermano
Sam: Hugo cariño como estás -estaba super preocupada por su hermano
Hugo: bien Sam no te preocupes, en un rato iremos a casa -suspiró y nos miró a los 4- creo que os debo unas disculpas. Me fui de vuestra casa casi corriendo, no de muy buenas maneras y bueno después.. lo que habéis visto no se, que lo siento. No era mi intención preocupaos ni mucho menos llamar la atención, no soy así. Gracias de verdad por venir
Estuvimos allí, los 5 juntos esperando a que llegasen los resultados de Hugo. Él se quedó dormido cogiendo mi mano, me parecía tan tierno en ese momento. Vale que el Hugo que me ha querido mostrar es una parte de él y me gusta, bastante. Pero el Hugo que está dentro y el que de verdad tiene sentimientos, me llena a la vez de gustarme. Que te está pasando Eva
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Tenía que haber un poco de drama jajajaja. Cuesta escribir algo donde hay alguien que lo pasa mal, pero bueno, lo mejor es la ayuda que recibe.
Espero que leáis y os guste. Se vienen curvas!!!!
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Intenta Olvidarme
RandomCoinciden, se parecen mucho, pero ¿podrán olvidarse? O ¿se enamorarán perdidamente el uno del otro? Es mi primera historia, espero que os guste mucho!!