CAPITULO 7

2.1K 43 0
                                    

NARRA HUGO
Me encontraba algo mejor, pero tenia una sensación rara por dentro. Estábamos en la habitación Sam y Flavio que estaban sentados en el sofá que había en la habitación. Mi hermana estaba bastante preocupada, la entiendo, ojalá ser como ella con ese tema y ser capaz de llevarlo tan bien como lo hace. Mai estaba sentada a los pies de la cama acariciándome la pierna, pobre, llegó ayer y hoy tiene que pasar esto. Y por ultimo Eva, estaba a mi lado, cogiendo mi mano y tranquilizándome de la mejor manera posible, simplemente estando allí. Supongo que tendría que explicarle todo, en algún momento, pero esperaría unos días para poder decírselo sin tener una crisis y para concienciarme de lo que supone decírselo. Ir más allá.
Después de un rato largo, el doctor entró en la habitación
Doctor: bueno Hugo hemos revisado el chequeo. En general todo está bien, pero tienes inicios de una enfermedad que se llama transtorno del sueño. La tienes muy poco avanzada así que estamos a tiempo de que no la desarrolles y te lleve a episodios peores. Vas a tomar unas pastillas, una por la mañana y otra por la noche, durante 3 meses. Después tendrás una revisión a ver como vas y vemos entonces que hacemos. También te voy a mandar unas pastillas para la mano por si te duele, los puntos tienes que venir en dos semanas a que te los quitemos. Y poco más, ahora te traemos el alta para que firmes e irte a descansar. Ahora cambiate de ropa si quieres y enseguida venimos.
Hugo: gracias doctor
En realidad estaba asustado, tenia inicios de una enfermedad. Bueno al menos me la han cogido a tiempo antes de que vaya a más, así que con la medicación supongo que las posibilidades de que esta enfermedad siga disminuirán. Me levanté con ayuda de Eva y Mai y me metí en el baño con Eva para que me ayudase
Eva: hay que ver rubio, ahora vas a estar muy mimado, te van a tener hasta que vestir -sonreí, menos mal que ella esta aquí
Hugo: si la verdad, no puedo quejarme -terminamos y me dio un beso en la comisura de los labios, me hacia sentirme realmente bien.
Salimos y el doctor ya vino con el alta. Le volví a dar las gracias y salimos del hospital. Como cuando vinimos, Eva conducía mi coche. Le quedaba tan bien conducir. Todos fuimos a mi casa otra vez. Nada más llegar busqué mi móvil para decirle a mi madre que estaba todo bien y pedirle perdón por como le hablé, no se lo merecía. También avisé a mis productores y demás del estudio para explicarles, me dieron una semana libre para recuperarme, después seguiría todo, tenia mucho trabajo en verdad, pero podía trabajar desde casa. Sam fue a ducharse y Fla la acompañó, no quería estar sola. Mai fue a su casa a sacar a los perros y luego vendría. Y Eva se quedó conmigo abajo en el salón. Yo estaba tumbado con la cabeza en sus piernas y ella haciéndome caricias. Sam tuvo que ir a sus oficinas para terminar unas cosas y Fla tenia que ir a su casa para terminar unas cosas de la academia en la que trabajaba, luego vendrían también. Eva en cambio se quedó conmigo, se que tengo que explicarle muchas cosas, me sorprende que no me pregunte, pero lo agradezco. Ella seguramente espere a que se lo cuente yo, después de todo no me querrá agobiar. Estaba muy cómodo con ella y me hacia sentir realmente bien. Moví un poco mi cabeza para poder verla, se estaba quedando dormida, pobrecita, no habrá descansado casi nada. Le acaricié la cara y abrió los ojos
Eva: Hugo estas bien? -se resaltó
Hugo: si tranquila, te estabas quedando dormida y no quiero que te duermas en esa posición, te vas a levantar con el cuello torcido
Eva: no no te preocupes -me sonrió
Hugo: mira hacemos una cosa, son las 20:00, ve a mi habitación y duérmete un rato y descansa, a las 21:00 te despierto que ya habrán llegado ellos y cenamos, que te parece
Eva: rubio no te voy a dejar solo, duerme conmigo si quieres y sino, no dormimos ninguno
Hugo: Eva yo estoy bien no pasa nada, estas cansada tienes que descansar un poco -me miró asintiendo, se levantó, pero me levantó con ella. Fuimos hacia mi habitación y nos acostamos los dos en mi cama -como te ha gustado lo de dormir conmigo eh
Eva: no te vengas arriba, lo hago por buena persona que soy -reímos. Esta niña era genial
Hugo: claro claro, venga vamos a dormir un rato, he puesto la alarma a las 21:15 -asintió y a los pocos minutos caímos en un sueño profundo.

NARRA EVA
Estaba tan bien con él y tenia tanta necesidad de ayudarle, que no me quería ir de allí. Tenia ganas de que me contase todo, pero por su coraza, tenia que esperar. No quería agobiarlo, si lo quiere hacer que sea cuando esté preparado.
Estábamos en la cama, yo me acababa de despertar, miré la hora y eran las 21:10, que bien me he despertado 5 minutos antes de que suene la alarma. Que rabia daba eso. Hugo seguía dormido, así que cogí su móvil y desactivé la alarma para despertarlo yo ahora. Era tan guapo cuando dormía, me relajaba verlo, se le veía descansar tranquilo y eso me tranquilizaba en parte a mi. Pasaron unos minutos y empecé a acariciarle la cara, el gruñó, que mono
Eva: venga despierta Hugui que tienes que tomarte las pastillas y comer algo
Hugo: mmm 5 minutos más por fa -que gracioso por dios
Eva: no venga, son casi las 12 de la noche -dije de broma y él se sobresaltó
Hugo: como? No he podido dormir tanto, como es posible
Eva: es broma rubito, pero mira como te has despertado -reímos los dos
Hugo: que susto joder, pensaba que había perdido la noción del tiempo
Eva: calla anda, venga vamos abajo que creo que llegaron hace rato
Bajamos y efectivamente. Estaban los 3. Sam y Mai estaban haciendo algo de cenar y Flavio poniendo la mesa.
Hugo: hola, cuando habéis llegado -dijo rascándose los ojos
Sam: hace una hora o así, subimos pero estabais durmiendo tan tranquilos que decidimos dejaros. Íbamos a avisaros cuando estuviese la cena
Eva: si es que tenemos a los mejores -dije mirando a Hugo y él sonrió
Nos dispusimos a cenar, Hugo se tomó la pastilla y fue a ducharse. Como no, me pidió que si podía acompañarlo. A él le daba igual que estuvieran ellos delante, y a mi también. No sabía que éramos exactamente, supongo que ahora mismo nada, pero no me importaría descubrirlo.
Estábamos en la ducha, decidí ducharme con él, así tardábamos menos, o eso creía. Le estaba lavando el pelo a Hugo, cuando él se acercó más a mi.
Hugo: nunca me habían lavado el pelo así de bien, que mano tienes para todo Evita
Eva: lo sé rubio, soy un partidazo
Hugo: y que lo digas -le quité el jabón del pelo y ahora me lo estaba lavando yo, él no paraba de mirarme, no me incomodaba, al contrario, me ponía. Pero no se si es el mejor momento ahora de hacerlo, después de todo lo que ha pasado. Pero a Hugo no parecía pensar en lo que había pasado. Me pasó las manos por la cintura dejando caricias por todo mi cuerpo
Eva: que pasa huguito, alguien se está despertando? -dije al notar un leve roce
Hugo: puede, tener a semejante mujer delante es lo que tiene -dijo en mi cuello
Eva: sino quieres que te caiga jabón apártate un poco que voy a enjuagarme
Hugo: deja que lo haga yo -asentí y así hizo, con la mano buena claro. Él me pasaba el agua de la ducha por el pelo mientras yo con mi mano le ayudaba -pues ya estaría, no te queda jabón -dijo y colocó otra vez la maguera de la ducha en su sitio. Ahora el agua caía desde arriba encima de nosotros
Eva: muy bien rubio, no sabia que eras tan caballero
Hugo: y no lo suelo ser, mira -dijo y con las mismas me besó, con fuerza y pasión, pero yo lo recibí igual. Como pudo me acorraló a la pared, seguíamos besándonos, luchando nuestras lenguas por ver quien ganaba. Poco a poco me cogió con un brazo y yo pasé mis piernas alrededor suyo, hice fuerza para que no la tuviera que hacer él solo con un brazo. Pero la verdad es que estaba bastante fuerte. Al instante se introdujo en mi, provocándome un gran suspiro acompañado de su nombre. Seguíamos esa lucha, ahora siendo uno. Ahogando gemidos a centímetros de nuestras bocas, en el cuello y en el oído. Esto si era disfrutar con él
Eva: Hugo -dije como pude entre gemidos- más rápido -hizo caso e intensificó sus embestidas
Hugo: me voy a correr Eva -dijo en mi oído con una voz ronca que me ponía a mil
Eva: yo también, sigue un poco -siguió como pudo ya que tenia que aguantar un poco, sino se correria él y yo no, pero siguió y consiguió que los llegásemos a un cálido orgasmo.
Follar con él era otro rollo, los tíos solo buscan llegar, correrse y fin, Hugo seguía hasta que yo también llegaba, quería que los dos tuviéramos el mismo placer, y eso me encantaba. Estábamos aun juntos pero yo ya me había bajado, no iba a seguir así, Hugo podría hacerse daño. Nos dimos un agua rápido mientras recuperábamos el aliento y salimos de la ducha.
Eva: me puedes dejar algo de ropa?  No me quiero poner otra vez lo mismo que llevaba
Hugo: si claro, entra al vestidor y coge lo que quieras -así hice, no había entrado todavía, pero era gigante y estaba chulísimo. Tenia también un sillón en medio como el mío, pero más grande. Tenia un espejo enorme en la pared también, que le pasaba a este niño con los espejos grandes. Salí y él estaba delante de sus fotos en toalla aún.
Eva: Hugo, estas bien?
Hugo: eh si, no se solo estaba mirando -dijo y bajó la cabeza
Eva: anda vístete que vas a resfriarte así -asintió y fue al vestidor, me gritó que fuera a ayudarlo y fui. La verdad es que me resultaba raro ponerle los calzoncillos en vez de quitárselos, pero bueno. Terminé de ayudarlo y bajamos abajo. Nos quedamos todos a dormir allí hoy, así si pasaba algo podríamos estar allí. Estaban en el salón de juegos tumbados en el gran sofá viendo una película en la pantalla. Entramos y nos pusimos con ellos. Hugo se tumbó y me hizo un hueco para ir con él. Nos tumbamos quedando yo de espaldas a él mirando hacia la pantalla. Le acariciaba la mano que tenia por mi cintura y él a mi me tocaba el pelo. Dónde había quedado la Eva de antes? Se quedó en el primer polvo con el rubio creo, porque desde ahí, no he querido irme con otro ni un ratito.
La película terminó y yo me había quedado dormida. Me desperté y estaban todos dormidos. Me giré quedando frente a frente con el rubio y empecé a acariciarle la cara. Él se movió y abrió los ojos
Hugo: mm que buen despertar -dijo abrazándome
Eva: si pero es un despertar para irse a la cama, son las 3 de la mañana, nos habíamos quedado dormidos aquí -me miró sonriendo pero no dijo nada- rubito que te quedas embobado
Hugo: nono, estoy aquí -dijo riendo- venga vamos a la cama
Eva: vamos? Te ha gustado la idea de dormir conmigo eh
Hugo: la idea de tenerte en mi cama es algo que no puedo perder, así que si usted quiere, duerma conmigo
Eva: tira anda -le di un palmetazo en el culo. Llegamos a la habitación. Hugo cerró la persiana un poco y nos tumbamos
Hugo: buenas noches Evita
Eva: buenas noches rubio -y caímos en un sueño cómodo y tranquilo

Intenta Olvidarme Donde viven las historias. Descúbrelo ahora