NUNCA ME FUI

PARTE 6 ENCANTADA DE CONOCERTE.

Por fin era viernes y esa tarde ya estábamos listas para viajar a Miami después de unos días ocupados en los que nos dedicamos a empacar las cosas de las chicas y a mis lecciones para aprender a ser una de ellas y donde me enseñaron a maquillarme y a como caminar correctamente con tacones, reconozco que aún faltaba mucho pero según ellas yo era muy buena aprendiz.

Me sentía nerviosa, en casi 3 horas por fin estaría frente a mis dos amores y no sabía si sería capaz de contener la emoción de lanzarme sobre ellos para abrazarlos y besarlos pero tenia que intentarlo para no asustar a Camila además tenia que averiguar si había alguien en su vida después de dos años, mi corazón rogaba porque no fuera cierto pero mi mente sabía que podía existir una mínima posibilidad en eso.

Por fin el avión aterrizó y nos dirigimos al hotel que habíamos reservado, Camila había sugerido que podíamos quedarnos en su casa pero yo le pedí a Dinah que mejor fuéramos a un hotel porque tenía que prepararme un poco para mantenerme tranquila ante ella y no sabía si podía soportarlo teniendola tan cerca.

El plan con las chicas era que estarían conmigo hasta el lunes y después ellas irían de regreso a Washington para hacerse cargo de los pendientes del departamento, de unas cuestiones en el trabajo de Mani, de envíar la mudanza y de que mi padre viajará con ellas al regreso a esta ciudad.

Yo por el contrario me quedaría aquí para buscar alguna casa lo suficientemente grande para que pudieramos vivir las tres teniendo cada una su espacio y evitar que en algún momento quisiéramos matarnos, además de que también comenzaría en mi nuevo empleo como recepcionista de la academia de mi Camz.

Eran las 8:00 p.m. cuando estábamos llegando a casa de Camila, parecía un vecindario tranquilo y muy agradable con grandes casas con bonitas fachadas y la de ella no era la excepción, con su enorme jardín delantero y muy bien cuidado.

Esa noche me había decidido por usar un outfit sencillo, quería lucir algo coqueto pero no muy llamativo así que opte por unos jeans ajustados azul oscuro que moldeaban perfectamente mi trasero y mis piernas y una blusa negra de manga larga con un escote en v que resaltaba mi curvas, me puse un cinturón café y unos botines de tacon alto a juego, mi Cabello perfectamente lacio, un maquillaje tenue solo resaltando mis ojos con un delineado no muy exagerado y mis llamativos labios pintados de rojo.

Según Maní y Dinah me veía espectacular y sin duda llamaría la atención de mi Camz.

Estábamos ya frente a su puerta, yo me encontraba atrás de las chicas que me cubrían totalmente mientas anciosas esperábamos a qué abrieran y nos dejarán pasar a la casa.

Cuando por fin se abrió la puerta sentí que el corazón se me quería salir, aunque no podía verla aún, el sonido de su dulce voz era suficiente para alterarme.

C.- Chicas!! Por fin están aquí, no saben cuanto las he extrañado.- Mi Camz se dejó ir contra las chicas abrazandolas al mismo tiempo dejando que su cara quedará en medio de los cuerpos de las otras dos permitiendo que ella pudiera mirarme.

Me observaba fijamente y yo le sostuve la mirada también, parecía que el tiempo se había detenido en ese momento para nosotras seguía tan hermosa como el primer día que la vi sentada en esa banca y juro que quería besarla igual que lo hice esa primera vez.

Instintivamente las dos comenzamos a sonreírnos dulcemente.

-Oh lo siento!!... olvidaba que tenemos otra invitada.- Camila se separó de las chicas y se dirigió a mi aún con la mirada fija en mis ojos.

D.- Oh sí!! Pero que grosera soy, mira Camila ella es Lauren.- dijo mi amiga señalandome por lo que ahora las tres tenían sus miradas sobre mi.- una de mis muchas primas.- Camila me miró detalladamente y después volvió a ofrecerme una de sus hermosas sonrisas yo solo pude devolverle una igual o más grande que la de ella y estiré mi mano para saludarle y presentarme bien.