𝔐𝔦 𝔊𝔞𝔱𝔬 𝔊𝔯𝔲ñ𝔬𝔫 (𝔄𝔡𝔞𝔭𝔱𝔞𝔠𝔦𝔬𝔫)

Capítulo 43: Problemas

Por supuesto, los gritos y golpes cuando estábamos saliendo de la guardería, Yugi todavía sollozando en mis brazos, y llegó todo el mundo a retirar a sus feos y apestosos hijos.

Entonces, el chico conflicto al que había apodado dulcemente como pretendiente de Yugi al que patear salió del salón, saltando y agitó su mano despidiéndose de mi bebé que respondía vacilante.

Escuché los siseos del resto de demonios, y antes de darnos cuenta, Hyunsik se había lanzado contra el niño. Si los otros demonios no hubieran sido sostenidos por nosotros, de seguro habrían peleado también, pero yo llevaba de la mano a Nora y en mi otro brazo sostenía a Yugi, y Jinyoung arrastraba -sostenía- a Jooheon y Hyunjin.

--¡Dale con la gala! -chilló Nora.

--¡Suelta al niño, Hyunsik! -grito Jinyoung espantado, sin saber qué hacer.

--¡Te colgare de la cola, Sik! -grité enojado.

Ante mi amenaza, el mayor gimoteó en respuesta para luego volver a mi lado, sus manos en su trasero, sosteniendo una cola inexistente.

Jiyong le sacó la lengua a mis bebés para luego lanzarle un besito a Yugi para luego irse corriendo, y sentí mi sangre hervir.

¿Quién se creía ese pendejo?

--Cobalde Sik -le dijo Nora a Hyunsik.

--Tú colbalde, tonta Nora -contestó el tomándole la mano.

Suspire, volviendo a caminar.

El camino a casa fue echo en silencio, conmigo llevando a Yugi adelante mientras sus otros hermanos estaban enfurruñados en el asiento trasero, murmurando groserías que juro yo no les enseñe.

Bueno, tal vez si lo hice.

--No puedo creer que hayan hecho eso -dije entonces Jinyoung mientras conducía con tono lleno de decepción, y vi por el espejo retrovisor que los niños lucían apenados atrás-. Ustedes tienen sus propios amigos y Yugi no los anda golpeando, ¿y ustedes hacen eso con su primer amigo?

Quise decirle a Jinyoung que no fuera tan duro, pero sabía que era necesario porque ellos debían aprender a no reaccionar de esa forma. Vale, si querían golpear a los niños que molestaran a Yugi no les iba a decir nada, ¿pero hacer eso con alguien que quería ser su amigo? ¡Eso no estaba bien!

¡Y ustedes locas no digan que yo hago lo mismo con Jinyoung porque es muy distinto, ¿entendieron, pendejas?!

--Ese pelo no es su amio! -gritó Nora enrojeciendo-. ¡Se quele casa' con Tugi!

--¡Es un pelo tonto! -apoyo Jooheon.

--Yiyo miau -murmuró Yugi contra mi hombro.

Le acaricie el cabello, ronroneando en respuesta para repartir besos por su cabecita, sabiendo que estaba nervioso y alterado por todos los gritos de sus hermanos. A Yugi realmente no le gustan los gritos así que Jinyoung y yo teníamos que controlar nuestro tono de voz cuando discutíamos o debíamos castigar a los niños.

--No lo entienden -siguió regañando Jinyoung con un tono serio, provocando que nuestros hijos se callaran-, han dejado a Yugi solo estos días y ahora por fin alguien quiere estar con él, ¿y reaccionan así? Son unos malcriados -Jinyoung me miró, buscando apoyo, y suspiré para tomar su mano-. Yo no los crie de esa forma -apoyé-, así que van a estar castigados. Nada de televisión y atún por dos semanas.

Los menores chillaron por el horror.

--¡No es juslo! -gritó Hyunsik a punto de llorar.