e p i l o g o

1.2K 50 16
                                    

- ¿Pero confías en mi? -Vuelve a repetirme mi mejor amigo por quinta vez en menos de diez minutos.

-A ver -Me toco la sien cerrando los ojos ya frustrada- Carlos, ¿Cómo te explico yo a ti que no?

Y de lejos se escucha la voz de Otto -Coño, hermano eso me ha dolido a mi y todo y eso que no soy tu.

Carlos se gira sobre su propio eje encarando al portero de nuestro equipo para seguidamente chillar a todo pulmón- ¡A ver cerebro de roedor! ¡Qué es de mala educación meterse en conversaciones ajenas! ¡¿Qué quieres morir?!

Tanto Otto como yo empezamos a reír sin poder controlarlo, para dejar paso a la voz de Edgar -Carlos cálmate, no puedes matarlo porque nos quedamos sin portero ¿Entiendes?

-¡Eso! -Se une a la conversación Paolo que está al otro lado del campo junto a Ares- ¡Espérate al haber ganado a los Japoneses! ¡No podemos deshonrar nuestro nombre!

Carlos levanta una ceja, contemplándolos a todos sin poder creerse del todo la situación surrealismos que se está produciendo- ¡¿Que parte de que os voy a matar si seguís escuchando la conversación con mi mejor amiga no habéis entendido?!

Cuando acabo de reír me seco una lágrima que se me había escapado y hablo para todos- ¡Vale ya chicos!- Al escuchar mi voz todos dejan de pelearse entre si para observar como Otto se pone a mi lado reforzando nuestro argumento.

-Exacto, no podéis hacer el gilipollas durante todo el partido. Recordad que le habéis prometido a nuestra capitana hermosa que vamos a ganar -Puntualiza.

-Eso dalo por echo- Medio escupe Carlos con molestia justo antes de chasquear la lengua y cruzarse de brazos- Me decepcionis, ¿Como vamos nosotros a perder? Si me tenéis a mi -Bromea haciendes el chulito barato.

-No sabia yo que mi mejor amigo se había quedado diez años atrasado con su desarrollo psicológico -Argumento observando a Otto con fingida pesadez.

-Eso explica muchas cosas ciertamente -Me da la razón.

-¡Pero serás animal de agua salada! -Se pone rojo como un tomate provocándome una salida sensación en el pecho.

-Ni te atrevas a decirle animal de agua salada, cerebro de roedor -Le advierto con el dedo meñique.

-¿A quién se supone que vais a ganar en este plan? Pregunto -Escuchamos la voz de Caleb acercarse a nuestro pequeño circulo junto a Jude ya en su uniforme.

-Pues a vosotros creo que eso es bastante obvio ¿No creéis? -Levanta una ceja Carlos.

-No me digas -Replica Caleb provocando una sonrisa nerviosa en Jude y en Otto.

No me lo puedo creer, estos dos son como perro y gato- Pues si, te lo digo. ¿O mejor debo recordarte que jamas habéis conseguido ganarnos?

-Te voy a...

Pero interrumpo llevándome las manos a la cabeza- ¡No sabia que había un espectáculo de peleas de gallos! ¡Pensaba que eso solo pasaba con los niñatos de quince a dieciocho años.

Segundos después de eso Jude, Otto y yo nos encontramos riendo como locos mientras que Carlos y Caleb son incapaces de disimular su sonrojo.

Y para cuando hemos conseguido calmarnos un poco llegan junto a nosotros Mark, Nelly, Celia y Axel, que guapo que es, por dios se ve tan bien sin la necesidad de hacer nada en especifico que me muero. Tanto Axel como Celia hacen el amago de acercarse un poco más a Otto y a mí, pero Carlos y Caleb los interceptan exitosamente.

-No, eso si que no- Niega con la cabeza Caleb- Nada de acercamientos con el enemigo.

Tras eso no puedo evitar volver a reír provocando que el color rojo suba a mis mejillas, por dios, no me acordaba de lo explosivo que era juntarnos todos, hace tanto tiempo ya de eso- ¿Quieres morir? -Escucho la voz de Axel, ¿Que les pasa hoy a todos con las amenazas de muerte? ¿Que están de moda y yo no me había enterado o qué?- Es mi mujer.

Engaño [Axel Blaze]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora