No tenían la intención, pero se conocieron.
No lo pensaron, pero se preocuparon del uno por el otro.
No lo soñaron, pero se alejaron hasta volverse un recuerdo difuso.
Y no se les ocurrió, pero se reencontraron.
◇Tododeku.
◇Yaoi.
◇Historia Corta.
◇N...
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La U.A. les dio dos días a los estudiantes para visitar a sus familias y contarles sobre su salud, porque, con la Liga de Villanos suelta todos están preocupados por la seguridad de sus hijos.
Midoriya logró convencer a Shoto para que su madre lo volviera a ver, ella lo quiso mucho ese montón todos esos meses que pasaron juntos. Era como un hijo para ella.
Después de la caminata llena de risas y tonterías por parte del más bajo, llegaron a la casa. Todoroki no estaba para nada nervioso, le caía muy bien la señora Midoriya.
Aunque había alguien a quien si odiaba más que a su propio viejo...
—¡Mamá~! —una bola de pelos apareció de inmediato cuando el peliverde habló, como si a él lo hubieran llamado— ¡Roaf! ¿Cómo estás, pequeño?
El gato, al ver al otro, empezó a gruñir y maullar con desaprobación. El bicolor tenía una mirada de odio puro.
—¿Te-te acuerdas de Roaf, Shochan? —el gato se alzó al oír ese apodo que tanto odiaba— ¡Roaf!
—Cómo olvidar a desgraciada criatura —Midoriya comenzaba a sentirse intimidado por la posible pelea que tendrían esos dos.
—¡Izuku! —se oyó al fondo. La señora Midoriya hizo su aparición desde la cocina, abrazando a su querido hijo—¿Cómo estás? ¡No tienes idea de lo cuanto que me haces feliz con verte!
—Estoy bien, mamá. También me hace feliz verte —se separó muy feliz, mirando a Todoroki—. Mamá, ¿te acuerdas de Shochan?
—¿Sho...? ¡¿Shoto?! —la mujer lo abrazó de inmediato, el chico correspondió— ¡Estaba muy preocupada cuando desapareciste! ¡¡Izuku y yo quedamos muy triste!! ¡¡¡Estoy muy feliz de verte de nuevo, mi niño!!!
—¡Mamá, no llores!
—También estoy muy feliz de verla, señora Midoriya —sonrió levemente. Ella se limpió los ojos.
—Dime mamá, si no te molesta. ¡Ven! —lo jaló del brazo— ¡¡Tienes muchas que contarme, y yo muchas para contarte a ti!!
Los tres se sentaron en el mueble para conversar —en realidad, los únicos que hablaban eran Todoroki e Inko—, Midoriya notó la pequeña felicidad al hablar con su madre, como antes. Eso también le hacía muy feliz.
El felino amenazó con sentarse sobre las piernas de su dueño para marcar territorio, sin embargo, Shoto no lo dejó, cargándolo por la correa, el gato intentó arañarlo.
—Ustedes no cambian —Midoriya soltó una gótica de sudor. Tomó un poco de té, hecho por su madre.
—Siempre han sido así —la mujer rio—. Siempre celoso de los que se acercaban a mi hijo.
—S-sí, celoso de a-amigos —rio nervioso y siguió tomando del té.
—¿Amigos? Ustedes eran pareja de niños —el bicolor se sonrojó fuerte mientras que el pecoso escupió el té, ahogándose en el proceso—. ¡Izuku! —regañó por el desastre.