Estaré Aquí Para Ti (Tododeku)

4.

Midoriya sintió mucho frío al tomar su mano y recordar que corrió descalzo como por tres cuadras. Con su conocimiento de las Singularidades, pensó que el niño que estaba ayudando se congeló un poco. Después le preguntaría cuál era su poder.

Después de correr por segunda vez una cuadra, divisó una figura alta cerca de su casa. Al oír su voz de preocupación al hablar con alguien, supo que era Inko.

—¡Mamáaaa! —alzó su mano para que lo viera.

La mujer se dirigió hacia ellos y se abrazaron en una cuadra y media de su hogar.

—¡Izuku! ¡¿Por qué saliste? ¡Me preocupé mucho! Misaki me llamó para decirme lo del terremoto, y cuando no te vi tuve miedo.

—Lamento preocuparte mamá, estoy bien. No llores, me pone triste verte así —se separó de ella para sonreírle—. Salí porque vi a un niño solo, y fui a ayudarlo —vio al bicolor—. Le dije que se quedara con nosotros, tiene miedo porque alguien lo quiere lastimar.

—Entonces que venga —Inko sonrió.

Los tres entraron a la cómoda casa, asustando un poco al invitado. No parecía estar acostumbrado a la atención. Ambos Midoriya quedaron perplejos al ver el vendaje sobre su ojo izquierdo más algunas heridas en el brazo.

—Mi niño, ¿qué te pasó? —la mayor se arrodilló ante él para acariciarle la mejilla sana. Su cara de preocupación era muy obvia. Él no respondió.

—¿A-acaso fue ese hombre malo? —habló Izuku, y tampoco recibió respuesta.

—Entiendo que estés asustado, pero cuidaremos de ti. No dejaremos que nadie te lastime.

—¿D-de verdad?

—¡De verdad! —sonrió Izuku.

El peliverde no entendía como un niño podía ser tan miedosos e inseguro. ¡Definitivamente lo ayudaría a ser feliz!

Cuando puse que Misaki avisó a Inko sobre el terremoto, me refería a que ella no lo sintió, y Misaki la llamó para saber si estaban bien. Como toda amiga :v

¿Alguna vez les ha pasado que no sienten un terremoto cuando duermen? A mi siempre, pero cuando estoy dormida.

Se les quiere.