Estaré Aquí Para Ti (Tododeku)

12.

Después de terminar de comer, Inko se dio cuenta de que le faltaban algunos alimentos, por lo que salió esa noche a comprar más para no tener que salir mañana temprano en la mañana. Era la primera vez de Todoroki probar una comida tan deliciosa como la que le preparó la señora Midoriya, estaba encantado.

Ambos veían tranquilamente televisión en la sala recostados en el mueble. Izuku feliz de tener a su acompañante con él, pero Shoto preocupado, porque sabía que no podía estar con él para siempre, por más que se negara y le doliera. Todo por culpa de su viejo...

No, él haría todo lo posible para permanecer al lado del niño que le a dado la felicidad que le faltó al principio. La vida era larga, aún quedaban muchas cosas por conocer, y prefería pasar ese tiempo con su Héroe.

—Midoriya —el llamado lo miró—, no quiero volver a casa.

—¿Pero y tu familia?

Lo pensó un poco. Su viejo se molestaría, pero a él no le importaba. Sus hermanos estarían preocupados y buscándolo como locos, no sentía nada. Su madre siempre se preocupaba por él, y en ese momento lo estaría -si es que no lo odiaba-. Todo era muy confuso, pero llegó a una conclusión: Fuyumi, Natsu y su madre siempre han deseado su felicidad, y él era feliz con Izuku, no en casa.

Listo, problema resuelto.

—Estarán bien sin mi, pero para eso necesito que me ayudes en algo.

—Lo que sea.

Shoto le contó el plan: con el teléfono de la casa, llamaría a su hermana. Midoriya tenía que preguntar si era Fuyumi Todoroki, y si respondía que si, Shoto le explicaría lo que pasa. Si, como todo hermano sobreprotector y chismoso, agarraba Natsu, el plan sería el mismo, solamente había que estar pendiente de la voz. En cambio, si resultaba ser el viejo, Izuku tenía que responder que era el hermano menor de uno de los compañeros de clase de su hija y que le agradecía por prestarle la tarea.

—¿A-aló?

—¿Aló? ¿Quién habla?

¡Era una voz de mujer!

—¿Usted es Fuyumi Todoroki?

—¿Quién pregunta?

Shoto hizo la señal de que le diera el teléfono.

—Fuyumi.

—¡¿S-Shoto?! ¡¿Dónde estás? Natsu y yo te hemos buscado por todas partes!

—Lo sé, y quiero que dejen de hacerlo. Estoy en un lugar dónde realmente soy feliz. Quiero vivir aquí para siempre.

—¿Q-qué? ¿Dónde estás?

—¡Mocoso! —era la voz de su hermano, al parecer estaba en alta voz— ¡Tienes que regresar! ¡Te van a meter una paliza entre más te tardes!

—Por eso no voy a regresar. Que el viejo se las ingenie.

—¡¿Qué? Se te metieron muchas tonterías a la cabeza! ¡No puedes dejarnos! —al bicolor le pareció escucharlo triste, pero no le tomó mucha importancia.

—Touya lo hizo, y no ha vuelto. Él es feliz donde sea que esté. Yo también lo haré.

—Hermanito, no nos hagas esto tú también. ¿Dónde estás? ¿Quién era ese niño?

—Dejen de preguntar, ¡no les diré nada! —su paciencia se estaba acabando. Izuku lo miraba con pena.

—¿No te preocupas por mamá? Se pondrá muy mal si se entera.

—¡Ella no me quiere! ¡Ella me odia! —a el bicolor se le salían lágrimas de odio—... Si fueran buenos hermanos, respetarían mi desición y no le dirían a nadie.

—¡Espe-!

Colgó la llamada.

558 palabras. Gózenlo x2

Estoy triste por lo que escribí ;-;

¿Quieren que Todoroki conozca a Bakugo? Díganme la respuesta para saberlo, aún no estoy muy segura c":

Se les quiere.