Capítulo 19

711 68 15
                                    

Narra Yaku

– Pero qué día tan agotador – me dije a mí mismo mientras estiraba ambos brazos – O bueno... ¡Quién sabe! – volví a poner mis manos en los bolsillo.

Estaba caminando directo a casa con paso lento. No tenía ninguna prisa porque ¿qué iba a hacer yo en mi habitación?. Sólo desperdiciaría mi  tiempo con el celular.

Cerca de mí había un parque muy pequeño. Pensaba descansar un poco ahí y tal vez dormir al aire libre o sólo quedarme pensando. Pero antes de decidir, vi la hora para saber si no era demasiado tarde... Bueno, eran las 7:00 p.m y mi casa quedaba como dos cuadras.

* Creo que descansaré abajo de aquel árbol. Me iré cuando salgan los mosquitos. *

Caminé hacia el árbol. Me senté y me recargué en el tronco. Saqué unos audiculares de mi mochila y puse en modo aleatorio las canciones que tenía descargadas en mi celular.

Me hubiera gustado tener un balón de vóleibol en ese momento, pero no iba a ir hasta mi casa por mi balón y regresar aquí con los mosquitos esperándome. Me tenía que conformar con lo que tenía.

Metí el traje de mucama en mi mochila. Después, puse mi mochila en mi regazo para luego abrazar mis rodillas. De esta forma ocuparía mi mochila para recargar mi barbilla y perderme en mis pensamientos.

A lado de mí iba pasando una familia de tres integrantes, viviendo sus vidas tan normales.

Ahora que lo pensaba con claridad, jamás había pensado en formar una familia con alguien. Desde siempre pensaba que sería ridículo cuidar niños pero, a veces no me fastidiaba la idea.

Aunque, si quisiera formar una familia, ¿con quien lo tendría?. Kuroo es un hombre, yo también lo soy y biológicamente sería imposible tener un bebé. 

Aparte... ¿Quién lo tendría si eso se pudiera hacer?

– Oh, Dios... ¿Qué tanto estoy pensando? – me quité mis audiculares y los guardé en mi mochila – ¿Está mal fantasear sobre eso? – me dije a mí mismo.

Me quité la mochila de mi regazo y lo puse en el suelo para poder apoyar mi cabeza ahí mismo. Después, me acosté boca arriba para observar las nubes rosadas que pasaban ante mis ojos.

* ¿Cómo se vería Kuroo embarazado? *

Al imaginarmelo, no pude parar de reír por un buen rato. Creo que había sido el pensamiento más loco que se me haya ocurrido en toda mi vida. Kuroo se vería muy gracioso.

* No habría duda que mataría al bebé en menos de dos días. Osea, si no pudo cuidar a Kumo... ¿Cómo se le ocurriría cuidar a un bebé real? *

Después, se me vino en la mente un yo embarazado. Rápidamente quité esa imagen de mi mente, ruborizandome por la vergüenza en imaginarme en tener un gran estómago.

¡Sería horrible! ¡No podría soportarlo!

Dejé de fantasear sobre ambos en versión embarazados. Ahora estaba pensando en otra cosa, una pregunta que pienso yo que cada madre o padre fantasea antes de tener una familia.

* ¿Niño o niña? ¿Uno de cada uno? ¿Gemelos? ¿Trillizos? ¡Sería imposible controlar tres bebés! ¡No! ¡Aún peor! ¿¡Qué tal si salen con los genes de Kuroo!? ¡Sería un caos total! *

Cerré los ojos para imaginarme un gran caos en la casa si eso sucediera. Los niños son difíciles de controlar pero las niñas. Tal vez, ellas también sean un caos total pero son más comprensibles. Más tranquilas al principio.

Una niña. Una niña no sería mala idea.

* ¿Con qué rasgos saldría? ¿Con los ojos de Kuroo? ¿Con mis cejas o mi nariz? ¿Podría ser con el color de cabello de Kuroo? ¿O tal vez tendría mis mejillas? ¡Uff! ¡Ya sería una maldición si heredara mi estatura! *

Sólo entre gatos (Kuroo x Yaku)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora