Cuando nos volvimos asi de cercanos?

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Nos empezamos a instalar, yo tomé la habitación de la derecha y Na-kyum el de la izquierda, la habitación era bastante elegante, abrí el armario y había ropa nueva, seguían siendo kimonos, pero de mejor calidad. Decidí tomar un baño en el jacuzzi para aprovechar lo que tenía, así que fui al baño, me quité la ropa y entré al agua caliente, era bastante relajante, hasta que.

          ~Pintor Nocturno & Tú~

*knok knok*
Alguien tocó la puerta del baño
Na-Kyum: Estas ahí dentro? Toque la puerta de tu cuarto pero no contestaste así que decidí entrar.
T/N: Si estoy aquí, estoy tomando una baño de agua caliente.
Na-kyum: Enserio? Puedo unirme?
Me sorprendió confianza con la que me preguntó eso.
T/N: De que hablar? Estaremos desnudos, ¿como puedes preguntar eso?
Na-Kyum: Bueno, por mi eso no sería un problema, no veo la desnudez de manera morbosa, pero si no quieres, todo bien.
Lo pensé un momento y tiene razón, podríamos tan solo ser como niños, niños pequeños que se divierten sin importar nada, sin hacer daño, o mirar la desnudes de mala manera, así que, lo dejé entrar.
T/N: Bien, puedes pasar.
Na-Kyum: Yaay! *entra, cierra la puerta, se quita la ropa y entra delicadamente*
Na-Kyum: Está un poco MUY caliente ¿No crees?
T/N: Jajaj, si, pensé lo mismo, pero luego me acostumbré
Na-Kyum y to empezamos a hablar y pasarla bien, justo como niños inocentes que no miran la desnudes de una mala manera, hasta que me surgió una pregunta, ¿Será este el momento exacto para contarle lo que le noble me hizo? No lo sé, ¿Y si al contarle eso le dan ganas de hacerme eso el también? No creo, se ve un joven muy dulce y amable, así que agarré impulso y le conté.
T/N: Oye Na-Kyum, hay algo que siento que debería contarte, pero la verdad me da miedo lo que pueda pasar o como los demás puedan reaccionar.
Na-Kyum: Dime, puedes confiar en mi.
T/N: ¿Seguro? ¿No pensarás mal de mi?
Na-Kyum: Estoy más que seguro.
T/N: Bueno, aquí va, ¿recuerdas cuando el noble nos guió hasta aquí y que iba detrás de nosotros?
Na-Kyum: Pues claro, fue hace nada que eso sucedió
T/N: Bueno, la cosa es que él me venia tocando por detrás.
Cuando dije eso, la expresión de Na-Kyum cambio de parecer estar tranquilo a estar preocupado.
Na-Kyum: ¿A que te refieres? ¿De que manera te tocó?
T/N: Bueno, pues al principio el puso su mano en mi cintura y luego fue bajando hasta estrujar con fuerza mi nalga, y así sucedió en todo el camino.
Na-Kyum: Entonces con que a ti también te tocó...
Me quedé sorprendid@ al escuchar eso, así que le pregunté
T/N: Te tocó también? Como? Fue en el mismo momento?
Na-Kyum: Si, solo que el puso su mano en mi cintura y luego la rodeó con su brazo y con su mano empezó a acariciar, bueno, ya sabes, empezó a acariciar mi pene *agacha la mirada para evitar contacto visual por vergüenza*
T/N: Dios mío, ¿Deberíamos de decir algo? *Se sienta junto Na-Kyum y lo abraza*
Na-Kyum: A quien rayos le diremos? No hay nadie aquí que pueda hacer algo, la única persona de poder que hay es quien nos tocó.
T/N: Y si tan solo pedimos retirarnos del lugar?
Na-Kyum: Eso es buena idea, pero considerándolo, no tengo hogar, si llueve me mojaré y a lo mejor muera de frío.
T/N: Cierto, no estoy muy lejos de acabar como acabarías tu si te vas, yo vivo en otro pueblo, es muy lejos y no me sé el camino y mi madre no me vendrá a recoger ya que él noble le envió una carta donde decía que yo empezaría a vivir aquí y que no me venga a recoger ya que había ganado, por lo que si me voy, moriré de frío o hambre.
Na-Kyum: Pero si lo cancelas, le enviará a tu mamá una carta que dice que estás devuelta a a casa ¿verdad?
T/N: Cierto, pero la entrega de cartas dura un poco de tiempo, por lo que según mis cálculos, la carta de la que te hablo aún no ha llegado a casa y si vamos a irnos por este motivo, no podemos esperar mucho ya que estamos en peligro.
Na-Kyum: Cierto *sus ojos empiezan a lagrimear por el miedo y angustia*

Nos quedamos un rato consolándonos y abrazándonos para sentirnos mejor, hasta que se hizo de tarde y ya era hora de comer, salimos del jacuzzi, nos pusimos ropa y fuimos a comer, Na-Kyum y yo sentíamos un ambiente tenso cuando estábamos junto al noble, pero por suerte no eran momentos muy largos, luego de comer, nos lavamos los dientes y fuimos a dormir, estaba en mi habitación, en mi cama, justo a punto de dormir, hasta que escucho que alguien llama a la puerta de mi cuarto.
T/N: *Abre la puerta*
Na-Kyum: *vuelve a ver a T/N con una mirada tierna y tímida*
T/N: Que te trae por aquí tan tarde?
Na-Kyum: N-no puedo dormir, t-tengo miedo, siento que t-tengo ansiedad, p-puedo dormir junto a ti?
Me dio ternura ver a Na-Kyum así, no le podía decir que no.
T/N: Claro, pasa
Na-Kyum: Gracias! *corre a la cama y se escabulle entre las cobijas*
Cerré la puerta y me acosté del otro lado, cuando estaba a punto de dormirme, sentí que algo me abrazó, abrí los ojos y era Na-Kyum, abrazándome y acurrucándose en mi pecho, sentí mariposas en el estómago, y me empezé a preguntar ¿en que momento nos volvimos así de cercanos? La verdad ninguno de los dos nos sentíamos incómodos al ser así de cercanos con el otro, pero ¿en que momento empezamos a sentir tanto aprecio por el otro? ¿Será que es por que ambos estamos en peligro? No lo sé. Le devolví el abrazo a Na-Kyum, para poder crear más calor, era una noche fría, deje de hacerme tantas preguntas y decidí dormir ya, puesto que mañana será nuestro primer día de trabajo, no se lo que nos espera...

~Pintor Nocturno & Tú~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora