¿Porque contigo?

Capítulo IV

"- Lo necesito a él, Emiko... - Ella solo acariciaba mi cabello, hasta que volví a cerrar los ojos cayendo profundamente en el descanso..."

Cuando desperté, podía recordar completamente el sueño... era aquel momento en el que él se fue...

Hace 4 años, el equipo se enfrentaba al "Puño del demonio", quienes fueron mandados por Talía, la madre de Damián, en un intento de traer a casa a su hijo.

Nuestro equipo fue llevado con engaños a una fábrica, de que en ese lugar se encontraba " Hermano sangre", pero al llegar fuimos emboscados por poco más de 100 asesinos junto al equipo rival, Damián dió ordenes, Emiko tenia que ir a un punto alto alejada de nosotros para cubrirnos, Kori se mantendría en vuelo para ayudarnos igual desde las alturas, mientras que Nightwing, Chico bestia, Jaime, Damián y yo, nos enfrentaríamos al "Puño del demonio".

Chico bestia mantenía un duelo de cambio de formas contra Blank, Jaime en contra de Stone, Nightwing luchaba a distancia contra Plague, yo enfrentaba a Nightstorm y Damián se encontraba impactando su katana contra Mara.

Después de unos minutos Emiko y Kori habían acabado con los asesinos.

Emiko quedo con pocas flechas, aún así decidió ayudar a Gar, quien estaba teniendo más problemas, Kori por su parte fue rápido a la ayuda con Dick, el combate a distancia no era lo suyo, por eso portaba un par de bastones, así que Kori le podía ayudar en eso.

Minutos después Jaime tocó el piso, Damián me cubrió dándome señal de que sacara del lugar a Jaime, se mostraba grave, así que era urgente sacarlo de ahí.

En un descuido Mara pudo rosar su katana en el costado derecho de Damián, este solo por reflejos pudo esquivar el ataque pero fue un poco tarde, como pude, con mi magia atrape a Stone, deteniéndolo por breves segundos, suficientes como para sacar de ahí a Jaime y llevarlo a la nave.

De nuevo Damián fue herido, ahora una katana se había incrustado en su muslo izquierdo, su grito se escuchó por toda la fabrica, era el momento de irse del lugar.

Él miro a Emiko, quien con una señal entendió que tendría que explotar la fábrica, esta pudo visualizar unos bidones que tenían una descripción de liquido inflamable, lamentablemente 2 de sus compañeros se encontraban cerca de ahí.

Damián me busco con la mirada y dijo que me cubriera, después ordenó a Emiko, y ella disparó una flecha explosiva, derrumbando una parte del lugar.

Fue tan rápido que yo no pude crear una protección, Stone no me había dejado, pero Damián se había lanzado hacia mi y ambos quedamos en el suelo, él quedo arriba para protegerme, aún así no fue suficiente, una varilla había atravesado el costado izquierdo de mi cuerpo, a solo 2 dedos por debajo de las costillas, era grave, por su parte, Damián tenía la cabeza escurriendo de sangre, un pequeño pedazo de concreto le había caído, en verdad no era su día para luchar y no estaba en condiciones.

Los demás estaban un poco lejos, así que salieron del lugar corriendo, toda la fábrica se veía en llamas, yo quise curar las heridas de Damián, pero él se negó, me dijo que yo necesitaba curar mis heridas y tenia que ser rápido, pero si me atendía no lo podría ayudar a él, Damián me aseguro que él estaría bien, sacando de su mágico cinturón una tira de tela para hacer presión en la herida de la pierna, yo utilice la poco energia para sanarme, de la nada, se escuchó un ruido, ahí estaban... "El puño del demonio", Damián me miró, sabía que no podía levantarme, ya no podía seguir más, así que me abrazo... eso me desconcentro, no me molestó... me sentí alegre... Damián me había abrazado... pero no era el momento para abrazos.

- Da... Damián, ¿Porque me abrazas?... - Al terminar mi pregunta, sentí un gran sueño, me había desvanecido... solo le escuché decir.

- No es un abrazo...-

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Escuchó que golpearon la puerta de su habitación.

- ¿Si?... -

Era Emiko, quien le preguntó como se encontraba, Rachel solo dijo que "bien", con una voz  seria, pero demostrando tristeza... Emiko le dijo que ese día solo iban a entrenar los demás, que ella descansara, sin mas, acepto, si necesitaba el reposo...

Cuando Emiko salió, ella continuo recordando lo que había sucedido al día siguiente de la explosión.

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Despertó, se encontraba en el área médica de la torre, a su lado izquierdo estaba Jaime, rodeado de demasiados aparatos monitoreando su estado, realmente era grabe... su cuerpo estaba lleno de moretones y heridas.

Escuchó una voz decirle que su compañero estaría bien, era Dick, él también se encontraba recostado igual que ella, en una camilla del lado derecho.

- ¿Que te paso? - Pregunto ella con gran duda, él mayor solo respondió

- Tu novio fue lo que me paso. - No tomó en cuenta su respuesta, su mente se preguntó dónde es que estaba Damián, él estaba herido también.

- ¿Donde esta Damián? - Dick la miro y dió un gran suspiro, eso le preocupo, su ritmo cardíaco se aceleró, sabía que algo malo pasó.

- Damián se fue Rachel... - Justo en ese momento acorto la respiracion, no lo creía, como se había ido sin decir nada, y mucho menos en pleno ataque, el equipo lo necesitaba por si las cosas empeoraban contra "Hermano sangre".

Damián jamas los dejaría si estaban en riesgo, él era parte del equipo, lo necesitaban... ella lo necesitaba... Dick la saco de sus pensamientos continuando la plática.

- Dijo que tenía que regresar a la liga de asesinos... solo así, su madre dejaría de interrumpir en nuestras misiones... Rachel, yo... yo lo quise detener... pero, cuando me acerque a él... me golpeó dejándome inconsciente... Kori fue quien nos trajo a la torre y con ayuda de Gar nos pudo traer al área médica. -

"Maldito" pensó, la había tranquilizado sometiéndola, sabía que si ella estaba consciente jamás lo dejaría tomar esa decisión.