Cap 6: Hagamoslo.

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Stiles llegó a su casa aún con el corazón acelerado, había puesto la fotografía de la manchita blanca cerca del volante y la había observado durante todo el viaje. Su padre llegaría en unos minutos par seguir su conversación por lo que decidió calmarse un poco ordenando su habitación.

Se sintió confundido al notar que Scott no lo había llamado ni había aparecido por su casa por lo que le marcó pero no hubo respuesta así que envió un texto y estaba por marcarle a Liam cuando sintió el auto de su padre llegar a la entrada olvidándose del asunto.

-Hola.- Dijo desde su escritorio cuando se padre se apoyó en el pórtico de su habitación.

-Escucha Stiles, que seas papá a los diecisiete no es lo que uno espera para su hijo y además imaginarte como un padre es muy complicado para mí es por eso que hace un rato reaccioné de esa manera.- Noah avanzó hasta sentarse en la silla junto a su hijo.- Pero eres un buen chico, haz salvado a tus amigos en incontables situaciones por lo que estoy muy seguro que salvarás tu paternidad con este bebé.

-¿Tengo que salvar la paternidad?.

-Bueno hijo, con los niños Stilinksi siempre se debe "salvar" la paternidad.- Habló palmeando su espalda dándole una mirada indicando que tal cual había sido su situación con él.

-Quiero que sea niña.- Confesó mirando a su ventana y el sheriff río.

-Para que se parezca lo mínimo a ti ¿no?.

-¿Cómo lo supiste?.

-Porque sentí exactamente lo mismo cuando tú naciste hijo, tu madre decidió esperar hasta que nacieras para saber por lo que fueron treinta y siete semanas de pedir que fueras niña.

-No salió como esperabas.

-A medida que fuiste creciendo vi en ti muchas cosas mías pero todo lo que ayudaba a que no fueras un completo desastre venía de tu madre.- Noah rio ante el rostro de confusión que Stiles mantenía y palmeo su espalda.- Eras muy impulsivo pero inteligente e inseguro como tu madre lo que te mantuvo lejos de peligros en muchas ocasiones. 

-¿Crees que pase lo mismo con mi hijo?.

-Creo que así como yo tenía a Claudia tú tienes a Lydia, ellas son nuestras anclas por decirlo de alguna manera y también lo son de nuestros bebés. 

-Me siento más tranquilo ahora.

-Hay algo más de lo que me gustaría hablarte.

La conversación entre ambos se vio pausada ya que el timbre de la casa sonó con insistencia a la vez que el teléfono de Stiles comenzaba a sonar. Miró la pantalla y luego miró a su padre para finalmente avanzar con rapidez a la puerta encontrándose con Lydia con lagrimas en su rostro y los ojos inflamados de seguro por haber llorado un tanto más antes de llegar ahí.

-¿Que pasa? ¿Te pasó algo? ¿Estás bien?.- Dijo mientras la hacia entrar tomando sus brazos. Lydia tomó algunos segundos para responder cuando el Sheriff se hizo presente en el corredor. 

-Lydia, ¿Qué está pasando?.

-Estoy bien, el bebé está bien...solo que se lo dije a mi madre.- Dijo Lydia mientras intentaba sonreír sin éxito. Noah hizo una mueca y luego apuntó la cocina caminando hasta ella dejándoles el espacio para conversar.

-Ven, vamos a mi habitación.

-Ni siquiera sé porque reaccionó de esa manera, le expliqué todo un plan sobre como abordaría la situación a partir de hoy. 

-Lo entiendo, ¿pero que pasó?.

-Me gritó la vida.- Dijo escondiendo su rostro entre sus manos, frustrada.- Dijo que había soportado de todo en mi vida, que había hecho muchas estupideces pero esta era la más grande de todas. 

Pequeños ojos miel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora