Capitulo 73

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Agonía, eso es lo que siento ahora, ya ni se cuantos días han pasado desde que no las tengo a mi lado. Una parte de mi quiere rendirse, pero la otra se aferra a ellas con uñas y dientes y no hace falta decir a cual le estoy haciendo caso. No voy a dejarlas ir, no voy a dejar que me las arrebate de mi vida así, como así. 

Todo lo que soy es gracias a ella, antes de Anastasia mi vida se basaba en trabajos, sumisas y lujos, pero ella llego con su sonrisa, su inocencia y su fortaleza a enseñarme que la vida es mucho mas que eso. Ella me enseño a disfrutar esos pequeños momentos con mi familia y con ella, me hizo entender que hacerle el amor es mil veces mejor que follar a cualquier sumisa en mi cuarto rojo, aunque la idea de llevarla hasta ahí sigue persiguiéndome, la imagen de Anastasia amarrada y a mi merced se calan en mi mente una y otra vez, como una de mis fantasías sexuales mas eróticas.

Y luego esta Maddie, mi pequeña princesa...joder ella llego a terminar de destruir el monstruo que alguna vez fui, sus pequeñas risitas que inundan mi corazón, sus ojitos que iluminan todo a su alrededor y sus pequeñas manitas con las cuales toma mi rostro y mis dedos dándome calidez. No podría soportar la idea de que algo le pasara y mataría a cualquier hijo de puta que se atreva a lastimarla. Así que no crean esos bastardos que me voy a rendir, no si se trata de las dos personas que mas amo en el mundo.

No voy a tener piedad contra ellos, así como no la tengo con el hijo de puta que daño a Ana, la escoria sigue viva, no la quiero mata, no la pienso matar. Quiero torturarlo hasta que me suplique por su muerte, quiero que se sienta humillado, quiero que sienta miedo el mismo miedo que sintió mi pequeña por su maldita culpa.

-Te traje un café, negro y amargo como te gusta - Sara entra a mi despecho, ella se ve cansada y ojerosa, no ha dormido la se sentido llorar en las noches por su pequeña y eso me rompe

-Muchas gracias, ¿como estas? - Se que preguntarlo es estúpido, pero no he tenido el tiempo de hablar con ella con respecto a como se siente.

-No estaré bien, hasta que tenga a Ana y a Maddie aquí - Ella me sonríe o mas bien intenta sonreírme - Siento que le falle a Anastasia. Yo la deje en ese lugar, si yo la hubiera llevado conmigo ese tipo no se le hubiera acercado y no se la hubiera... - Sara rompe en llanto y sin dudarlo la abrazo, sin importar que me toque. Anastasia me sano, ella me sano con su amor

-Escuchame - La aparto un poco de mi y hago que me mire - No es tu culpa, tu no lo sabias, lamentablemente Anastasia donde quiera que vaya va a correr ese riesgo, solo por el hecho de ser mujer, pero te prometo que no voy a permitir que nadie le haga daño. Ademas, si te la hubieras llevado yo no la tendría en mi vida.

-¿De verdad la amas? - Su pregunta me toma por sorpresa, he tenido esta charla con Sara, pero nunca me ha preguntado directamente que es lo que siento

-La amo mas que a mi vida, ella me sano Sara y aunque ella deje de amarme y se aleje de mi, mi corazón le seguira perteneciendo - Jamas eh sido tan sincero en mi vida, nunca me he abierto con mi prima de esta manera y es que ella y yo tenemos algo en común. El amor incondicional, por Anastasia

-Me alegra escuchar eso, pero si la lastimas Grey voy a cortar tus bolas y se las dare a Koda - Me rio por primera vez en mucho tiempo ante las palabras de mi prima, aunque se que ella seria capaz de hacerlo.

La puerta se abre de golpe y por ella entra Sawyer, mis ojos se iluminan al ver una enorme sonrisa en su rostro, el solo asiente con la cabeza incapaz de decir palabra alguna, pero no hace falta lo entiendo perfectamente. Sara grita euforicamente y se lanza a los brazos de Sawyer tomandolo por sorpresa.

-Christian, las encontraron, encontraron a las niñas.

***

La velocidad con la que conduzco es casi irreal, Elliot y Santiago vienen conmigo en el auto, Taylor y Sawyer van en otros atrás nuestro y 4 mas de mis hombres en 2 autos mas, tres patrullas de policía van por delante de nosotros, les entregue un arma a Elliot y a Santiago en caso de que tengan que disparar, no soy fan de estas, si no son para cazar, pero ahora vamos a cazar a las ratas que me arrebataron a mi mujer y a mi hija.

Inocencia #PGreySteele2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora