— Eres un tipo con suerte.
Tanjiro miro sorprendido al demonio.
— Bueno, al parecer, no tienes más que suerte de tu lado. Que triste viejo. Los otros a diferencia de ti y la chica, ya no sirven para nada. —Tanjiro volteo a mi dirección al escuchar las palabras de Gyuutaro.
— ¡Hmmhm hmm! —traté de decirle a Tanjiro que huyera, pero por obvias razones no podía.
— Al cerdo le atravesé su corazón. El rubiecito está revolcándose del dolor después de recibir el derrumbe en su espalda, lo deje ahí para que muera.
— ¡Hmmm! —tenía que ayudarlos a todos, por lo que comencé a patalear y a moverme desesperadamente para almenos hacer algo.
— ¡Callate! —la demonio apretó más sus fajas, haciendo que mis órganos y huesos se comprimíeran lo suficiente como para que saliera sangre de mi boca.
— ¡Hmmmmm! —di un grito ahogado por la faja que tenía en la boca.
— Se retuerce como un insecto, que patético —continuó hablando—. Y el pilar de ahí, era un debilucho... Si bien el viejo era fuerte y logró aguantar todo el veneno que había en el, pero su corazón se detuvo por este y se murió... Está perdido. Al igual que la otra Pilar, trató de defenderse y protegerlos a todos ustedes, pero al final fue derrotada de la forma más patética posible.
— ¿¡Hmmhm?! —"hable" ofendida.
— Patético, patético. Todos ustedes son asquerosamente patéticos. Particularmente tú, chico. ¿Así que tu familiar fue atrapado en esa caja que llevas? Ya veo. Su parentesco los junta, aún si se está convirtiendo en demonio. ¿Dime, es mayor o menor?
—.... —Tanjiro guardo silencio—... Menor. —respondió.
— ¡Hehehehe! ¡Lo suponía, Sii, lo suponía. Patético viejo. Ni siquiera pudiste proteger a tu hermanita! —se burló, a lo que Tanjiro soltó un jadeo por sus palabras— Bueno, da igual. Tu eres humano y ella un demonio. Y por supuesto eres más débil que tu hermanita demonio ¡¡Como sea, eres patético!! Eres el hermano mayor, así que deberías ser quien protege a su hermanita, no el protegido. —se agachó a la altura de Tanjiro y tomó su mano— ¡¡Hee hee!! —exclamó rompiendo los dedos de Tanjiro.
— ¡¡HMMHM!! —exclame moviendome bruscamente mi cabeza, logrando que la faja de mi boca cayera— ¡¡TANJI... AHG!! —sentí como algunas de mis cosillas se rompían por lo apretadas que se estaban volviendo las fajas.
— Hey viejo, ¿Sientes eso?. Estas vivo, patético y solo. Tu último rayo de esperanza recaía en la fuerza de ella —agarro del cabello a Tanjiro—. Hey, larva. Tonto. Cobarde entre los tontos. Inservible —comenzó a sacudirlo mientras se burlaba— ¡Ahora cortarme la cabeza! ¡Aquí aquí! ¡¡Hazlo!!
Logre ver como Tanjiro tomaba su espada con su mano lastimada mientras se agachaba.
— Pff... —escuche a la demonio a un lado de mi.
— Hehehehe ¡¡Siiii siiiiii!! Tu mente se rindió en el último momento. ¡¡Que patético viejo, eres taaaan patético!!
— ¡D-deja de burlarte! —grité como pude.
— Patético, pero no te odio. Yo solía amar cosas miserables, sucias y patéticas —señaló la frente de Tanjiro— ¡¡Obtuviste una herida asquerosa en tu frente!! Bien ahí, viejo, me gusta un poco. ¡¡Ya se!! ¡¡Que tal si te conviertes en demonio!! ¡¡Por tu hermana!!
— ¿Q-que? —pregunté para mi misma mientras más sangre salía de mi boca— Resiste. Mantente consciente. No te rindas. —mentalmente me daba ánimos a mi misma.
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Daughter of evil (Kimetsu no yaiba y tu)
Fiksi PenggemarConvertirte en cazadora de demonios para salvar a las personas de aquel hombre. Cambiarte la identidad para no ser reconocida por aquel ser. Salvar vidas. Asesinar demonios. Todo eso era parte de tu vida cotidiana para no ser encontrada por Kibutsuj...