𝐊𝐍𝐎𝐂𝐊 𝐎𝐍 ღ【MarkHyuck】ღ

ღ【19】ღ

— DongHyuck, querido, saca las galletas del horno. — JiHyo sonrió al moreno.

Estaba parada sobre una pequeña silla, ordenando las decoraciones que ponía en las paredes, encargándose meticulosamente de que se vieran perfectas.

JiHyo era cálida... Si DongHyuck tuviera que escoger un alma pura y buena en el mundo sin lugar a dudas pensaría en su abuelita. Era hermosa, con esos grandes ojos coquetos que cautivaban a cualquiera y manos diminutas que trabajaban arduamente en la cocina por gusto.

Ella era amor, por donde se viera.

Diciembre había llegado y con ese mes, las vísperas de navidad también. Estaba emocionado como cuando era un niño porque pasaría esas fechas cómodo en los brazos de sus seres queridos.

JiSung y Mark por fin habían establecido contacto y su padre intentaba no matarlo cada vez que lo llamaba por apodos tiernos. Era gracioso ver cómo pasaba saliva y miraba a otro lado para no enloquecer.

El ciclo escolar terminó de la mejor manera y pasó con honores ganándose una beca completa en una buena universidad donde estudiaría lo que quería con ayuda de su papá Lele, el cuál en los últimos años había aprendido de escritura y continuaba publicando artículos en la revista que manejaban.

Se sentía feliz por compartir esas fechas junto a ellos...

— YukHei, no se te olvide acompañar a Roseanne a la escuela. — JiHyo mantuvo esa carita tierna— Te esperaré con galletitas y jugo.

— Sí, abuelo Hyo. — Contestó amablemente.

DongHyuck sabía que, en realidad, él detestaba hacer cosas cotidianas que llamaba aburridas. Pero JiHyo poseía un don con los alfas, omegas y betas. Si ella pedía algo debía hacerse. Jamás vio a alguien llevarle la contraria.

En un inicio se sintió perdido porque KunHang no le hablaba y corrió en brazos de sus abuelos para llorar toda la tarde. Fue su adorada abuela la que lo comprendió.

— Sé que Dery está enojado contigo, así como muchos también lo estarán. — Le dijo— No obstante, tú, ChenLe y yo vemos en absolutamente cualquier ser vivo bondad; sabemos percibirla así sea casi invisible. Yo te apoyo, mi girasol.

Quizá por eso no le sorprendió que recibiera a YukHei con tanto amor y entusiasmo. Daniel prefería guardarse las palabras, aprovechando cuando jugaban para golpearlo. Al parecer era tradición que su abuelo quisiera pegarle a todos los que veía como amenaza para después acabar encariñándose.

Así había sido con JiSung, TaeIl, Mark y ahora... Con YukHei.

Respecto a su amigo... Brotaba felicidad por los poros. ChaeRyeong y él comenzaron a salir y eran una especie de novios en proceso. A DongHyuck le emocionaba verlos juntos, era como si la alegría del resto fuera la suya.

En cuanto JiHyo fue al jardín para buscar en las cajas lo que necesitaba, YukHei se acercó a DongHyuck con un gesto cansado.

— ¿Por qué Rosé debe ir a la escuela? ¿No acabaron ya el ciclo escolar?

— Sí, bobo. — Respondió sacando la bandeja del horno— Es la inscripción para el próximo año, ¿Entiendes? Además, creo que una maestra debe entregarle algo.

El moreno hizo una mueca y tomó las llaves del mesón.

DongHyuck quiso reír cuando Roseanne bajó con un clip para el cabello en la mano.

— YukHei, hazme el favor de ponérmelo.

— No sé usar esas cosas, Rosé.

— ¡Hazlo y ya! — Repuso irritada— Vamos tarde, papá te matará si no llegamos a tiempo para la inscripción.