𝐊𝐍𝐎𝐂𝐊 𝐎𝐍 ღ【MarkHyuck】ღ

ღ【11】ღ

— Me alegra que no estén muertos. — Mark sonrió aligerando el ambiente.

— Mark, eres nuestro hijo y te amamos. — JeNo suspiró— Pero esto...

Miró la cara de preocupación de ambos y apretó el pantalón entre sus dedos largos... Era de madrugada y seguían conversando del tema.

Tan pronto como los mayores recuperaron la calma se sentaron en la sala a charlar de lo sucedido.

Tenía que aceptar que le dolía verlos de ese modo... No merecían esa pena.

— JeNo, basta. — Lo frenó JaeMin.

Había rastros de lágrimas en sus mejillas y tenía la naricita roja de lo mucho que sollozó en silencio. Honestamente, Mark sí se lo esperaba... Si bien JeNo lograba controlar las emociones un poco a JaeMin se le hacía imposible hacerlo. Se desbordó como una cascada escuchando la historia completa, pero no dijo palabra alguna.

— Es nuestro deber decirle lo que está haciendo, JaeMin. — Refutó el alfa— ¿Tienes idea de lo loco que se pondrá JiSung? Porque no lo sabe, ¿Verdad?

— No papá, no lo sabe. — Aceptó serio, odiando el tono que usó con el omega.

— Ellos se quieren, ¿Qué podemos hacer? — Musitó bajito, sin mirarlos.

— ¡JaeMin eso no es correcto! — Gritó exaltado.

— ¡No tienes derecho a gritarle así a papá Nana! — Mark se puso de pie, enfrentándolo— Tal vez no sea lo esperado, pero así se nos dio y punto.

— ¡Solamente no quiero que te hagan daño! — Continuó gritando— ¡Eres nuestro niño! ¡¿Crees que queremos que algo malo te pase?!

— ¡No soy un mocoso! — Bramó con rabia— ¡Y DongHyuck tampoco lo es!

— ¡Explícale eso a JiSung!

— ¡Estoy intentando explicártelo a ti y eres igual de dramático y estúpido!

— ¡Mark Lee, no le hables así a tu padre! — JeNo elevó la mano, amagando para golpearlo.

El pelinegro cerró los párpados con fuerza, haciéndose pequeñito. Podría hacer cualquier tontería, menos golpear a sus padres. No sería capaz ni en un millón de años.

— ¡Suficiente! — Demandó JaeMin, haciéndose en medio, frenando la cachetada— ¡Los dos se sientan, ya!

Hicieron caso, aplastándose en los cómodos sillones codeándose de vez en cuando.

El omega daba vueltas de un lado a otro, luciendo un bonito pijama que era suavecito, junto a sus pantuflas de osito.

— Gritar no hará que se arreglen las cosas. Ni culpar a Makku. — Frunció el ceño— Se enamoró de DongHyuck y son predestinados, ¿Qué se hace en contra?

— Nada... — Contestó JeNo, arrepentido.

— Exacto, no podemos obligarlo a no sentir, ni a JiSung a no enojarse. Pasará luego del embarazo de ChenLe para que sus rabietas no estresen a Lele y si no está listo pues lo siento.

— Perdón... — Susurró Mark, apenado— Si no hubiera...

— No, tú no debes pedir perdón por absolutamente nada. — JeNo lo abrazó— Perdóname tú a mí por explotar y no saber comportarme.

— Es que... Él realmente me gusta.

— Lo sé, no harías una locura así por impulsivo. — Besó sus cabellos negros— ¿Lo has llevado a varias citas?