En la casa del lago [Concluida ✔️]

Agua fría para los dos

Coloca un plato frente a mi, es carne, pero...¿de que?

— no es veneno— dice sentándose a un lado de la mesita, lo miro con desconfianza, no pienso comer eso!

— no tengo apetito —

Pero dicen por ahí, que mas rápido cae el mentiroso que... Olvidé lo demás, como sea, mi estómago me traiciona, exigiendo comida.

Lo veo avergonzada, el sólo me mira con una ceja alzada.

— ok, está bien— me siento a un lado de él, probando su comida y...

¡Santo cielo! Ésto sabe delicioso.

De un momento a otro, mi plato está totalmente vacío.

— quiero más — le extiendo el plato

— vaya y sirvase usted misma— dice sin voltear a verme, lo veo enojada, pero el ni se inmuta

¡Ok! Me siento humillada, ya hasta se me quitó el apetito.

— no, gracias— me levanto, con la intención de volver al cuarto y no ver mas a éste...robot

— el plato se lava luego de cenar— me detiene

Tomo el plato y bajo su atenta mirada, abro la puerta del patio, y lo lanzo, dirijo mi mirada de nuevo hacía mi compañero, tiene cerrados los ojos, y la mandíbula apretada, como aguantándose la furia.

¡Pues me vale gorro!, al fin mostro una reacción, en realidad comenzaba a creer que era un robot.

Me dirijo de nuevo a mi cuarto, dejándolo con sus demonios, no quiero verlo.

Luego de un rato de reflexion, comienzo a sentir el llamado de morfeo.

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Siento una deliciosa sensación, como si estuviera volando, el sol empieza a colarse dándome directo en el rostro.

No quisiera abrir los ojos, ésto está.... ¡FRÍO!

Abro los ojos de golpe, sintiendo como mi corazón está a punto de salirse de mi pecho, y el agua parece estar a punto de congelarse.

¡El muy idiota me lanzó al lago!

Lo busco con la mirada,  y al verlo comienzo a despotricar en su contra, con la misma expresión de siempre se agacha por el muelle viéndome.

— son las 8:00am y aquí la hora para despertar es máximo a las 5:30am— dice frío

Pero ésto no se quedará así..no señor. 

Cuando está a punto de levantarse, lo agarro del brazo, tirándolo al agua junto a mi.

— ¡¿está loca o qué?!— grita fuerte y con rabia impregnada apenas se reincorpora, doy un pequeño sobresalto por su tono.

Su semblante se ablanda por un momento

— lo siento— dice más relajado.

Salgo del agua sin voltear a verlo, me dirijo a mi cuarto, buscando ropa seca, elijo un conjunto que trata de unos vaqueros y una camisa de tirantes celeste.

Me quito la ropa mojada

¡rayos! Ese tonto y su estúpida idea de lanzarme al lago, seguro y es su venganza por el plato de ayer.

¡Qué frío hace!

Totalmente desnuda me dirijo al baño en busca de una toalla, y ¡vaya sorpresa!

No hay.

Salgo del baño, pero mis ojos se desorbitan al verlo parado cerca de mi cama, observándome detalladamente.

Se acerca y por instinto retrocedo, pero la pared del baño me detiene, lo veo asustada, y cuando está cerca,  cierro los ojos, esperando lo que sea que está planeando.

al no sentir nada, abro nuevamente los ojos, viendo como desdobla una toalla y me cubre con ella.

Se acerca pegando su boca a mi oído.

— enserio lo siento— susurra y se aleja, sale del cuarto, dejándome totalmente descolocada.

Y eso... ¿qué fue?