No son animales normales, o personas normales. Es una especie, totalmente distinta, con sus personalidades y necesidades diferentes a las que se conoce. Una especie que se cataloga en dieciséis grupos, casi como en los animales, y una más, que aún es un archivo x.
Mamíferos. Si de mamíferos hablamos, como en el mundo animal, están los salvajes y domésticos. Aunque en su forma humana, si tienen una educación adecuada todos podrían ser sociables, pero sus reacciones ante el mundo y sus ideas son muy diferentes. Aquellos que encuentran o están con su manada, sin importar los principios que como humano pueda tener, los machos en especial tienen una tendencia agresiva al sentir a su destinada y cachorros en peligro. O simplemente al tener un celo sin atender.
-Mami...-
-Tarea, Taehyung.- respondió volteando un poco el libro para que no leyera, aunque no estaba segura de que lo hiciera. Volteo a verlo.-¿Tu sabes leer?
-Si, abuelito me enseño.
-En serio...-Se sorprendió.-¿Que mas te enseño?- cerro el libro volteándose para prestarle atención.
-Mmm, este idioma. También a sumar, restar...dividir...aunque nunca pude con dos numeritos.
-Ah yo tampoco... ¿Este idioma? ¿Que idioma hablas tú?-
-한국어...Coreano.-dijo tierno.
Ella le sonrió
-Esta bien, ¿que mas te enseñó?
-Todo lo que se. Abuelito era profesor en un colegio, él aveces me llevaba. Pero jamás me quedaba con lo niños. Yo aprendía en casita con él. Hasta me dio un papel muy bonito, y lo pego en la sala, decía que era un logro y que ya había terminado de aprender.
-Oh, ósea que te graduaste del colegio!-ella sonrió mientras apoyaba su rostro a su mano atenta a sus palabras.-Entonces, desde cuando estuviste con él?-
-El primer pastelito que él me hizo...el puso así-levantó 7 deditos mostrándoselos a ella.
Tenía 6 añitos entonces... se sintió un poco triste y bastante curiosa de cómo fue que termino al otro lado de mundo, siendo solo un bebe.
-Tae, y ¿por que? ¿Como llegaste a donde él?
Él bajo la mirada y se quedó en silencio unos segundos.
-Yo-yo...solo recuerdo los abrazos de mi Omma y la risa bonita de mi Appa, después de eso...-se quedó mirando a un punto fijo unos segundos cambiando un poco su expresión. Parecía que le dolía.- Después de eso, una luz, mucho frío, señores altos con cosas en sus manos...me dolía...mucho.
Su corazón se hundió, y sin pensarlo le tomó la cabecita y lo abrazo.
Él también la abrazó mientras sus ojitos empezaban a llenarse de lagrimitas. Se dio cuenta de que jamás había hablado eso con alguien, ni siquiera con el mismo.
-Abuelito me salvo de lo que me dolía. Si me acuerdo del primer día en que lo vi. Yo estaba en un cajita dura y me dolía mi pancita...tenía un poquito de sangre ahí. Él me cargo y aunque yo casi no veía porque no me sentía bien, se que me miro a los ojos triste. Después de eso recuerdo despertar en una camita blandita y mi pancita estaba vendada.
La chica sentía un nudo en la garganta mientras lo escuchaba hablar. Entendía que tal vez lo que hacían con él siendo un bebe era experimentos o algo por el estilo.
-Extraño a mi abuelito...-murmuro sacándola de sus pensamientos.-Él...todas las mañanas me despertaba con mi comidita en la cama. Si yo me despertaba antes me quedaba ahí hasta que él entrara cantándome que ya había despertado la luz...pero ese día, lo esperé y nunca entró ...así que salí a buscarlo, y lo vi acostadito en el suelo...
La chica empezó a sollozar mientras seguía abrazándolo fuerte.
-Yo...me quedé con él 8 solecitos y 9 lunitas. Pero nunca despertó y...empezaba a verse extraño. Ahí estuve a su lado, hasta que una personas amigas de él llegaron, yo me escondí como él siempre me lo ordenaba, y vi que después de llorar, llamaron a otras personas y se lo llevaron. Yo traté de ir con él, pero ese carro fue más rápido que yo...
Ella era lagrimas, no podía imaginar el dolor tan terrible que aquel chico tan vulnerable pudo sentir.
Él al escucharla se levantó un poco y la volteó a mirar asustándose ante su expresión. -¿Por que lloras?-
____ solo acarició las mejillas del contrarío y limpió algunas lagrimitas que había en ellas para después suspirar calmándose.
-Olvida todos esos recuerdos triste, ¿si? Vamos a hacer unos más bonitos.
-Ya tengo unos muy lindos...
-¿Si?
-Ujum...cuando mami duerme, y la luz de la luna pinta su piel, cuando despierta y tiene los ojitos chiquitos. Cuando cepilla su cabellito tan largo y bonito...ay huele tan rico...cuando mientras haces mi comidita bailas y cantas. Y los más lindos...cuando me sonríes y me acaricias.-
____ quiso decir algo, sin embargo ninguna palabra diría lo que en su interior sentía. Sus ojos eran quietos en los de él, y se preguntaba si había alguien más puro en el mundo que aquel chico enfrente de ella. Le regalo una sonrisa involuntaria haciendo que él también le diera una. Aunque quería terminar aquellos libros, sabía que Azul no era nada más que un corazón limpio.
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