[Lior el comandante]
Aia:
- Espera ¿Qué te parece sí antes de que vayamos con ellos vamos a divertirnos un rato?- su petición se me hizo completamente absurda y egoísta acaso no se daba cuenta que teníamos más cosas importantes que hacer
- ¡Pero no tenemos tiempo!, debemos conseguir un medio de transporte esas personas nos necesitan si no quien irá a salvarlas, ¡Sabes que están se...
- ¡Baja tu tono morena!- Me dijo Lior molesto tomando mi cabeza enterrándola en su pecho- levantaremos sospechas- me soltó sigilosamente- Escucha debemos actuar normal, de cualquier modo las cosas a veces llegan casuales- su voz era callada y se suavizaba con el pasar de los segundos- Escucha nunca antes salí del cuartel, he perdido lunas allí adentro no quiero sólo vivir para morir- sus ojos parecieron brillar, como el agua que brilla con el amanecer de la mañana me hizo sentir mal
- Esta bien- le sonreí - yo tampoco, vamos a divertirnos- caminamos a una carpa de juego llamado el arco de la mala negra
- Hey chicos quieren jugar- nos llamo un hombre a nuestro costado, volteamos para mostrar nuestra atención- escuchen este es el juego, ustedes empeñan algo, hacen el juego del recorrido pasando las pruebas sí lo pasan pueden tomar un premio que otra gente a empeñado, ¿Qué opinan?
Lior:
Me pareció ridículo la forma en que lo dijo, lo hizo parecer completamente genial, pero ni siquiera explico de que se trata, si tiene reglas o no y lo más importante si gano yo eligo mi premio o no, ¿Quién en sus cinco sentidos jugaría sólo con saber eso?
- ¡Me parece genial!, pongo mis espadas- gritó Aia encimando sus espadas en la mesa, a lo que yo suspire cansado y sorprendido
- ¿Y quien va a jugar?
- Mi compañero- me empujo hacía el vendedor, ¿pero qué?- comento Lior de manera imprecisa él creía que la morena no actuaba por mero capricho.
- ¿Y bien que es lo que tiene de premios empeñados?- pregunto la morena
- Tengo esta moneda de bronce
- Ñe eso no vale mucho
- Te alcanza para una comida completa en la fonda de doña Gertrudis créeme no probaras otra comida como esa
- ¿otra cosa?
- Un ungüento contra venenos corrosivos, una bruja me estafo con el le había pedido una posión de amor - se quejo el vendedor sonrojado
- O sí un boleto para el concurso del viaje de la Honada, ese lo apostaron y perdieron es muy valioso a menos que me den otra cosa más valiosa , que no creo, ¡O sólo estoy perdiendo mi tiempo con unos imbéciles pobres como ustedes!
- ¡Como nos ha llamado!- Aia le sujeto del cuello gritándole
- ¡Cálmate esclava deja que arregle esto!- le grite a la morena prepotente, tome con fuerza al vendedor y poniéndole la daga en el cuello le grite
- ¡Escuche anciano!, ve estás bellezas- le mostré las espadas doble de Aia- un par de espadas dobles, con fibra de oro y empañadura
- No me lo creo eso... eso es tallado de la Elite acelopolli - miro la fibra dorada de la empeñadura
- No tan rápido sólo sí acepta dándome todos los premios
- ¡Echo muchacho!
- Aia se quedara con las espadas, no se las daremos hasta el final
Sharik:
Caminaba con Yui cuando de repente choque con otro tipo
- ¡Mira por donde caminas!- era un idiota con un turbante
- una disculpa su señoría- interrumpió Yui agachándose
- ¿Qué haces?- le susurre caminando adelante
- Acaso no es obvio debemos actuar como la ama y el esclavo-
- Cambiando de tema ¿no es genial esto?- le sonrío Sharik mirando las luces de una fuente frente a ellos adornada con faroles y listones.
- lo es- Me sonrió la pelinegra, su mirada siempre me ha gustado tanto tan oscura pero no da miedo.
Lior:
- ¡Qué he echo!- susurre asustado mirando la escalera donde estaba en el borde
- ¡Damas y caballeros tenemos un participante aventurero que ha decido hacer el recorrido de la muerte!- grito el hombre mientras había una multitud enloquecida por ver el espectáculo.
- ¡Escucha chico, todo lo que debes de hacer es llevar este pollo al nido con su mamá! como no tengo idea pero vivo - me dio en un golpe un pequeño pollo en su pecho el cuál empezó a llorar asustado - cálmate no llores- susurre haciéndole piojito en su cabeza, escuchaba a la gente reírse de mí, sabía que tenía que ser inteligente estos juegos suelen tener una especie de trampa, así que tengo que ser más inteligente que ese vendedor- veamos- mire el recorrido, primero había una especie de red un lago abajo, después una estructura de madera con lianas de seguro debía pasar dicha estructura y por último una rampa con el corral donde estaba una gallina adulta y más pollitos.
- ¡Bien ahora!, ¡Ya chico avanza!- echo esto abri mi abrigo y meti al pequeño pollo en mi pecho, tome mi bufanda y enrede mi cuello para que no pudiese salirse debo admitir que duele un poco las uñas de sus pies, corrí por la estructura de red
- ¡Cuidado que hay pirañas!- unos pequeños peces de dientes afilados se abalanzaban contra mi cuerpo en movimiento mientras yo recorría la red, así que tomando la daga filosa de mi bolsillo izquierdo me saque sangre y esta callo en agua alocándolas pero al mismo tiempo haciendo que se pelearan entre ellas por dicha sangre eso me hizo ganar tiempo y atravesé la red, llegue a la segunda parte - esto sí que es pasarse- había muchas serpientes - así que esta debe ser la trampa, agarre la liana pero no me trepe a ella, la jale con todas mis fuerzas esta se desprendía, así que la jale por completo una vez la tenía en mi mano me amarre a ella y la utiliza como cuerda para subir la estructura de madera de un costado y mire que una madera sostenía todo el cuero del estanque de agua anterior hacía que acomodándome con la liana de una estructura pate la madera y de una patada revente el lago, el agua salió desbocada hacía las serpientes , comenzó una guerra entre serpientes y pirañas
- ¡Qué eso es trampa mocoso idiota!
- ¡No tuve opción la cuerda estaba floja!, se callo- grite al estúpido vendedor a quien todos empezaban a mirar mal, la gente gritaba de emoción coraje, contra él o sólo se burlaba yo avance hacía la parte del corral donde metí el pollo con su madre pero no sin antes ponerle de tapa con una madera, para que el pollito no se saliera y yo perdiera
- ¡Maldición, maldición, Haaaaaa!- soltó un grito desgarrador el hombre , pero la gente del publico comenzó a aventarle dinero a lo que el hombre reacciono quedándose perplejo
- ¡Willy creíamos que tus juegos eran aburridos pero es lo mejor que hemos visto en la vida!- comento un hombre rico
- Y tu muchacho que agallas- me miro haciendo un brindis, a lo que yo sonreí victorioso, no sin desviar mi mirada de Aia que gritaba mi nombre con el pueblo.
- ¡Oh vaya muchacho sin rencores toma tus premios!- me sonrió avergonzado el anfitrión dándome mi ungüento, mi pase de comida y el boleto para el viaje de la honada
- Ibas a querer matarme
- Sí muchacho pero cosa del pasado- acompaño su risa con una palmada en la espalda.
ESTÁS LEYENDO
Salvando identidades (Crónica Uno)
Ciencia FicciónSalvando Identidades Primera parte: Narra la historia de cuatro chicos que buscan terminar la guerra en donde el mundo empezó la "Atlántida" (la unión de todas las culturas según el Filósofo Platón). En su vida han sufrido mucho pero una gran amis...