[Sorpresas y libertades]
Narrador:
Un hombre de enorme capa blanca estaba parado debajo de un sauce llorón, su cabello era de un sedoso color lila y debajo de los labios tenía una perforación circular, respiraba con calma mientras las ramas del sauce soplaban en el viento
- ¿Qué te pasa nunca sales a la superficie?- pregunto una mujer de capa negra con bordados de hojas marchitas - estamos preocupados por tí- dijo con una voz fría
- no me pasa nada, no le digas a nadie pero algo grande se aproxima
- no sabía que tenías otra habilidad
- no me hables de tú, no soy tu compañero o algo así
- lo siento sólo preguntaba
- bueno sólo es un presentimiento- el hombre se dio la vuelta y se adentro en el tronco del sauce llorón.
Narra Yui:
Abro la puerta lentamente, el castillo es enorme, bueno no, era aún más grande en el que yo vivía junto a Sharik, acabo de quitarle una daga a la mujer, se que es muy malo robar, a me iré a...a.... Dónde vallan los malos no es así, creo, nunca quise ser mala y mírame soy una rebelde niña que anda por ahí dejando inconscientes a las personas, ¡Pero qué demonios estoy pensando debo apurarme a rescatar a Sharik!, Dicho esto me levanto y continuó corriendo, freno en el muro del pasillo, que extraño los guardias no están.
¡No me digas!, Trato de ir a la puerta, espera, ahora que recuerdo a Aia y Sharik la mujer les quitó sus armas y lo que llevaban de buena ropa, debo traer eso primero en especial las armas de Aia, creo que la mujer las dejo en su cuarto, dicho esto me quito mis botas de cuero no puedo hacer ruido o sería el fin.
Paso por las habitaciones y en una escucha voces, hablaban dos personas Isabella su hija y un hombre.- entonces de cuanto estamos hablando
- dos bolsas de oro por persona
- me está chantajeando todos aquí sabemos cuánto valen
- más que usted sí
- bueno tal vez más que yo sí, pero por ahora están bajo mi resguardo
- ¿Y yo también tengo amigos?
- ¿Amigos? serán mafiosos
- usted me está artando
- miré, miré usted compra personas de características especiales y yo tengo material para darle
- no por nada me llaman el coleccionador
- miré tengo dos personas, quiero dos bolsas de oro por cada una no es tan seguro que sean kallanos pero puede comprobar si tienen joya
- si mientras ya le pagué ¿no?
- está bien deme eso solo por el cabello de color - habla de Sharik
- bien trato hecho.
Narra Lior:
Caminábamos para salir del basurero cuando uno de sus guardias subía a la torre
- ¡Hay que detenerlo!- grita Sharik dicho esto ambos tomamos un costal y lo lanzamos, es ágil, le lanzamos a sus pies infinidad de costales pero fue en vano.
Narrador:
Yui escuchaba la conversación detrás de la puerta cuando se escuchan pasos apresurados ella corre a la otra habitación, era la cómoda de la mujer, ahí estaban las cosas que buscaba, las toma y se sale por la ventana la cual caía a un árbol, un guardia la vio pero siguio corriendo hasta casi llegar al basurero donde se encontró con sus amigos.
Lior y Sharik corren apresuradamente después de lo ocurrido para entrar a la parte del campo antes de el castillo, vemos un campo de batalla, esclavos contra guardias.- ¡Hay que ayudar pero cómo!- se pregunta el pelinegro de ojos mieles
- ¡Con ésto!- grita Yui aventandole a Sharik las espadas de Aia
- ¡Yui!- grita el ojiazul
- ¡Y yo qué!- grita Sharik molesto
- ¡toma! - grito aventandole su espada
- ¿No vienes?- el de piel oscura y ojos azules le pregunta a la pelinegra
- no tengo algo que hacer- dice la de ojos rasgados - ¡Pero Lior necesito tu ayuda!- dijo Yui jalando de la chaqueta al pelinegro de ojos ámbar
- está bien- dicho esto ambos comenzaron a correr hacía dentro del castillo.
Narrador:
La hija hacia tranquilamente sus negocios cuando su guardia comenzó a gritar que estaba ocurriendo un motín.
Isabella solicito a todos sus guardias que trabajaban pero Sharik ya llevaba la delantera, él ya había alborotado a los esclavos para que quemarán a las carrozas de transporte, ahora todos altos mandos estaban encerrados.- Mi señora hay un grave problema - dijo un guardia incándose
- ¿Cuál?- dijo Isabella asustada con las manos temblorosas
- 6 soldados nos traicionaron y bueno por desgracia quemaron todas las carrozas incluyendo las de usted coleccionador- dijo el guardia llorando
- ¡Eres un estorbo!- gritó el coleccionador tirando a Isabella, la joven hermosa se puso a llorar inconsolablemente y le gritó
- ¡Coleccionador si le salvó la vida usted anula mi deuda!- grito la chica, el otro volteo con una sonrisa, dicho esto ambos corrieron por el tejado, mientras tanto Yui y Lior entraban al castillo con los 6 guardias traidores, Lior y Yui suben a la habitación donde los otros hablaban pero no hay nadie
- No puede ser dónde están - dice Yui atormentada
- ¿Dónde pueden estar?- de pronto escuchan un crujido en el techo
- están arriba- dice Lior
- ¿Qué hacemos?- pregunta la pelinegra desesperada, Lior mira el suelo tocándose la barbilla y piensa "diablos porque no puedo tener el cerebro de la morena".
- ¡Oigan no van a creer esto!- llega Sharik sudado - vengan conmigo- dicho esto comienza a correr los otros bajan con él y los tres llegan al establo donde la multitud ya tenía atado al coleccionador y a Isabella
- ¿Pero quién los detuvo?- pregunta la pelinegra de kimono y de repente detrás de las maderas de el establo trata de levantarse una chica, Aia la que siempre tiene una estrategia
- ¡Aia!- gritan los chicos sorprendidos mientras tratan de levantarla
- ¿Pero cómo?- pregunto Yui desconcertada
- bueno al ver las carretas quemadas pensé que tomarían otro medio de transporte, así que saque a todos los animales del establo principal- dice la morena sonriendo - y así fue ellos bajaron del colado y ahí los atraparon, los jornaleros yo no, a duras penas puedo caminar, pero aún así puedo hacer algo - Aia ya no aguanta y sus rodillas se caen, Lior y Sharik la sostienen antes de que cayera.
- ¡Vivan los....Ellos!- grito un hombre de color de piel morena mientras levantaba su puño al cielo
- ¡Vivan!
Los cuatro se quedaron atónitos
- ¡Nuestra esclavitud a acabado!,¡Libertad!
- ¡Libertad!- en ese instante melancólico, todos recordaron su infancia y a sus padres, excepto uno, el de cabello color crema y ojos azules, Sharik fue el único que no recordaba nada de su pasado y se preguntaba porque solo recordaba desde que su hermana murió, ¿Por qué?, Se supone que tenía padres, y no sabía que era de ellos se sentía extraño y rabioso por no ser capaz de recordar algo.
Una mujer se acercó y les dijo- Quédense hasta que su hermana se recupere les haremos un banquete chicos - dijo aquella mujer mirándolos
- claro- dijeron Sharik y Yui al unísono, después de esto nada será como antes.
ESTÁS LEYENDO
Salvando identidades (Crónica Uno)
Bilim KurguSalvando Identidades Primera parte: Narra la historia de cuatro chicos que buscan terminar la guerra en donde el mundo empezó la "Atlántida" (la unión de todas las culturas según el Filósofo Platón). En su vida han sufrido mucho pero una gran amis...