DOMINANTE ATRACCIÓN ||AMOS OSCUROS #2||

CAPÍTULO 11. UNA TENTACIÓN PROHIBIDA

Kenneth cierra la puerta con el cerrojo. Ahora ambos estamos en una habitación con instrumentos sexuales a nuestro alrededor. Sus ojos grises me ven con enfado y su mandíbula se contaría con cada respiración acelerada que pasaba por su pecho. Todo indicaba que no le ha gustado que Dean me besara en frente de todas aquellas personas.

No puedo permitir que el arruine mi fiesta y que arme un escándalo. Mi novio ha visto como Kenneth me tomo de la mano y me llevo a rastras hasta esta habitación. Me aventuro a dar un paso para llegar a su lado, pero un leve sonido sale de sus labios y eso me hace detenerme por completo.

Tomo una gran bocanada de aire para calmar la ira que está invadiéndome. Kenneth se mantiene en el mismo lugar. Si no actúo con rapidez todo esto se va a ir al carajo. Puede ser que Kenneth y yo no seamos nada, pero sé que dentro de él sigue siendo el hombre que alguna vez prometió no hacerme daño.

-Debemos salir ahora, Kenneth. Tu prometida y mi esposo van a estar preocupados por ambos -menciono mientras doy otro paso hacia él.

Estar en este lugar me trae un recuerdo de mi derrota en esa apuesta con Domenik y me obligo a ser una sumisa. Kenneth termino por llevarme a su departamento para jugar al póker y terminamos follando en su cama.

-No me arrepiento de llevarte a mi casa en vez de obligarte a cumplir con esa apuesta -agrega como si pudiera leer mis pensamientos. Sus ojos reflejan una tormenta que está apunto de desatarse. Levanto el rostro con arrogancia. Kenneth da un paso al frente para estar un poco más cerca de mí-. Pero sin duda también me hubiera encantado demostrarte cuando placer se puede obtener con todo lo que hay en este lugar. Estos dos años me han cambiado mucho, Amunett. Y al parecer a ti también.

Él tiene mucha razón. Ambos somos diferentes ahora. Kenneth es frío y distante. Yo simplemente tuve que madurar y no dejar que mis emociones ganaran a la razón.

-Lo puedo ver, Kenneth, pero eso es algo que no me interesa. Lo nuestro es historia pasada. A la única que debe importarle es a Grace -respondo mientras me giro para inspeccionar que hay en la habitación.

De pronto siento los brazos de Kenneth tomando los míos para aprisionarlos a mi espalda. Me tenso al instante al sentirlo tan cerca de mí, pero no puedo perimirle saber que aun mi cuerpo reacciona ante su presencia. Me obligo a relajarme y a tomar una gran bocanada de aire para oxigenar mis pulmones. Kenneth me obliga a caminar hasta la pared más cercana. Puedo sentir entre mi culo como una gran erección se asoma desde sus pantalones. Aun me desea y por más que no deseo admitirlo, mi cuerpo también lo hace.

-No me lleves a los límites que no deseas ver, Amunett. No te va a gustar las consecuencias -amenaza. Me muerdo el labio inferior para evitar soltar un gemido-. ¿Crees que puedes venir y dejar que otro hombre te bese frente a todo el mundo? ¿Y qué además no es en realidad tu esposo como me lo haces pensar?

Frunzo el entrecejo. Desconozco al hombre que tengo detrás de mí. Realmente algo terrible debe de estar pasando Kenneth. Algo que lo atormenta.

-Claro que pudo hacerlo, Kenneth. Dean tiene todo el derecho de besarme cuando quiera y donde le plazca porque es mi novio -replico seria revelando la verdad sobre la relación entre Dean y yo. Kenneth impacta contra la pared y su cuerpo me cubre como una manta. Mi cuerpo reacciona de manera instantánea. Los pezones se me ponen duros y los senos comienzan a pesarme-. Tú estás comprometido con Grace. No puedes simplemente a decirme o prohibirme algo como eso. Libérame, Kenneth. Todos en la fiesta van a preguntar por mí y por ti.

Estar en esta posición me puede parecer incomoda con alguien más, pero con Kenneth no siento lo mismo.

-Me importa una mierda si vienen y nos encuentran en esta posición, pero antes de que ellos se den cuenta que no estamos, voy a demostrarte que aun tu cuerpo reacciona ante su único Amo -Kenneth dice con determinación. Me retuerzo entre su cuerpo para tratar de librarme de él. Si Kenneth vuelve a tocarme voy a perder el control y el poder que tengo sobre él. Necesito pensar lo más rápido posible-. Sé que ningún otro hombre ha hecho que puedas someterte a su dominio. Amunett no trates de engañarme. Ambos sabemos que cuando un Domine se deja someter por otro es porque le ha dado su confianza y su corazón. Al igual cuando un Amo se entrega con exclusividad a su Sumiso es porque ya se entrega por completo.