Mi Padrino | Vicente Zambada | TERMINADA

IX

Vicente

Entre con cuidado a la habitación de Ivanna, desde que llegó no habíamos podido hablar por que estaba dormida, por la anestesia, cerré la puerta y me acerque lentamente hacia ella.

Se comenzó a mover mucho y a quejarse, con mucho cuidado tome su cara y bese su frente, pero se levantó de golpe y muy agitada. — Soy yo, soy yo. — Dije viendo cómo trataba de pelear.

Me acosté a su lado y ella dejó caer su cabeza en mi pecho y comenzó a sollozar. — Perdóname Ivanna, todo fue mi culpa, y nunca me lo voy a perdonar, pero por favor nunca mas te vallas de mi lado. Prometí cuidarte y mira lo qué pasó.

Ivanna

— Todo fue mi culpa, si no hubiera sido tan inmadura, nunca nos hubiéramos peleado. — Dije entre lágrimas.

— No, no, mírame bebé. — Acuno mi rostro en sus grandes manos. — Tu no tienes la culpa de nada ¿Oíste?

— Nunca más me dejes ir. — Dije con lagrimas en los ojos. Me pego más a él y comenzó dejar besos en mi cabeza.

Solté un suspiro, pero luego recordé que todavía no estaba recuperada, ósea si ya estaba mejor pero no para poder hacer el sin respeto.

— Te amo. — Le dile dándole un beso, beso que obviamente me siguió.

— Yo te amo más mi vida, cuando me dijeron que te habían secuestrado casi me muero, por eso vine por mi bebé. — Dijo cuando nos separamos. — Por que te amo. — Volvió a besarme. — Pero no podemos hacerlo por que estás delicada mi amor.

Le di una sonrisa divertida. — ¿Y cuando me recuperé que? — Dije traviesa.

— Sabes que siempre estaré pa' mi princesa, qué ya esta bien grande. — Pasó sus manos hasta mis glúteos y los apretó.

— ¿Me extrañaste? — Dije curiosa.

— Claro que si, como no te iba a extrañar pero necesito que me digas que te hicieron esos hijos de su pinche madre.

Las lagrimas comenzaron a salir de mi como si fueran mares, el simple hecho de recordar lo que me hicieron me hacía sentirme aun peor, creo que nunca volveré a ser la misma, desde esos días, la Ivanna que conocían murió, por que ahora pienso que soy completamente diferente. Ya no me siento protegida, solo con mi papá, por que siento que la historia volverá a repetirse una vez más, y tendré que pasar por esa tirita una vez más, tendré que soportar que alguien toque mi cuerpo sin que yo esté de acuerdo, y solo me hace sentirme aún peor, me hace sentir como si fuera solo un puto objeto sexual.

— Lo hicieron. — Metí mi cabeza en su cuello, mientras que seguía llorando.

— Mija sabes que me tienes para lo que sea, y voy a hacer pagar muy caro a esos cabrones. — Beso mi frente.

(...)

Después de estar un rato más dormida, decidí salirme un rato por que tenía muchas ganas de estar con mi familia, creo que esto de mi secuestró me hizo darme cuenta de cuánto los amo, aunque a veces no me dejen ser y sean muy celosos, pero en fin esa es mi familia y no me queda de otra.

Baje con cuidado las escaleras hasta que llegue a donde estaba mi papá con mis tíos, y Jesús, también estaban mis tías que creo que vinieron desde Paris por mi.

— ¡Ivanna te dije que guardarás reposo! — Rodé los ojos cuando mi papá se la ntp de golpe y se acercó a mi.

— Pero tengo ganas de salir. — Hice pucheros.

— Si pero tienes que guardar reposo. — Dijo tratando de ser paciente. — Y si quieres salir, tiene que ser con cuidado. — Me ayudo a caminar hasta el sillón, donde me recosté y puse mi cabeza sobre las piernas de mi papá.

Cerré los ojos y solamente escuchaba su platica, extrañaba tanto esto, extrañaba que me celaran que simplemente fuera mi familia, así los amo.

— ¿Y si está muy buena esa tal Vanesa? — Abrí los ojos grandes.

— No, no, no. — Negué con la cabeza y mi papá me miraba con una sonrisa burlona.

— Ya se andan apuntando las madrastras. — Se burló mi tío Alfredo, lo mire mal y todos se reían, pero a mi no me hacía mucha gracia.

— ¡No! Ósea mi papá no puede tener novias, por que ¡Trae unas bien culeras! Y luego se sienten la última coca del desierto, si se consigue una buena mujer, bonita, que caiga bien, la acepto pero una de las prepagos ¡Ni madres!

— Ay si tú bien que eres ojo alegre. — Abrí mi boca ofendida, Jesús me miraba mal y ahora si que valí madres. — Si cuando fuimos a Los Cabos bien que andabas viendo a los muchachos. — Mire mal a mi papá, por eso no le cuento nada por que es bien chismoso. — ¿Oye y el que te pidió tu número? — Reí nerviosa.

— Este... ¡Mejor cambiamos de tema! — Dije nerviosa.

— No. — Mi papá me dio un leve golpe en la nariz. — ¿O que ya tengo nuero? — Si supiera que su "nuero" Es su amigo.

— Se dice yerno pendejo. — Mi tio Ovidio hablo haciéndonos reír, menos a Jesús que tenía muy mala cara.

— Si, si, como sea ¿Ya tengo yerno Ivanna?

Bufé nerviosa. — Obvio no papá, mejor me quedo soltera pa' que quiero que lo balanceen como a todos lo que se me han querido acercar. — Sentía la mirada penetrante de él. — Ap...

— Aparte de que no eres de uno solo.. — Mire mal a mi papá.

— Guzmán tenía que ser ¿No? — Dije riéndome, ya que me quedaba.

•••
Holaa, perdón por no subir capítulos pero e estado muy estresada con la escuela, y además estaba en exámenes y si no salía bien, madre me iba a faltar para valer.
Pero bueno el puente me la pase en la calle por que la pinche cuarentena ya me tenía harta (Pero con los cuidados) Y salí con mi papá y el tiene el mismo contacto con gente en el trabajo y en la calle así que no pasa nada.

Lxs Amx mucho y hagan sus tareas❤️

-Bxrbie