Mi Padrino | Vicente Zambada | TERMINADA

VI

06 de Febrero del 2017
📍XV años de Ivanna

Saque mi vestido de princesa de su caja, mientras que solo traía puesto una fina bata de seda, con unas bragas de encaje, me mire a le espejo, ya tenía mi maquilla, algo demasiado natural por que si no luego mi papá se enoja, y pa' que quieren y un apenas me había llama alasiado el pelo, tome mis zapatillas y me las puse, después me empecé a desvestir y justo cuando iba a ponerme me vestido, se abrió la puerta de golpe, abrí mis ojos como platos y rápidamente me puse mi bata, con mis iniciales grabadas en letras doradas.

— Padrino. — Sentí mis mejillas ponerse rojas de inmediato, no podía creer que mi padrino Vicente me había visto casi desnuda. — Me.. estaba por cambiar. — Dije avergonzada.

— No pasa nada Ivannita. — Se acercó a mi y levantó mi mandíbula, era extraño las sensaciones que desde hace unos meses Mi Padrino provocaba en mi, demasiado raras e extrañas. — Recuerda que yo te quiero mucho, pero mucho, aunque no sea correspondido. — Fruncí mi ceño.

— ¿Como? — Pregunte curiosa. — No entiendo.

— Por que siempre me mandas a le verga Ivannita. — Lo vi nerviosa. — Por que yo te quiero como algo más que un padrino.

— Pero yo, no se, mi papá se enojaría mucho conmigo, por que ustedes son amigos desde muy chicos. — Dije nerviosa, mirando a el piso, sentía su mirada penetrante hacia mi, y más hacia mis pechos que hace unos meses se habían desarrollado.

— Pero tu papá no tiene por qué enterarse ¿O si? — Me tomó de la cintura y me pego a el, en este momentos sentía como mariposas en el estómago. — Ivanna se que sientes lo mismo que yo, te e visto como me miras. — Mis mejillas se pusieron aún más rojas. — Me gustas mucho, Ivanna. — Acercó nuestras caras, mientras que solo me quedaba inmóvil sin decir nada.

— Yo no se que decir. — Desvíe la mirada.

— Supe que eres especial desde que te tome en brazos. — Me pego más a él. — Siempre te e amado, Ivanna. — Sentí como algo se restregaba en mis zonas íntimas, y un leve cosquilleo en mi, más mi mejillas ruborizadas a más no poder.

— Pero esto está mal ¿No? Es muy mayor que yo, y mi papá no me permitiría nada de nada, además nunca e tenido novio. — Tomó una de mis muñecas e hizo que la pasara por su cuello, y dejara leves caricias.

De un movimiento rápido me beso, mientras que trataba de seguir el ritmo, moviendo mis labios a la par, sabía que estaba mal, pero algo dentro de mi me hacía querer seguir, y volver a besarlo cuando a mi se me antojara, pasó sus grandes manos por mi cintura y me pego aún más a él, siguió besando, mordisqueando y chupando mis labios a su antojo, mientras que solo trataba de disfrutar y seguirlo.

Después de unos minutos nos separamos y el escondió su cabeza en el hueco de mi cuello, dejando besos en mi, sentí como mi piel se erizaba por su tacto.

— Yo se que lo deseas tanto como yo. — Me volteo a ver, y tenía un brillo en sus ojos que jamás había visto en alguna persona.

— Está bien. — Dije agitada, volvió a hundir su cabeza, y luego me cargó haciendo que nuestras intimidades chocaran.

Siguió besando mi cuello y luego nos recostamos en la cama. — Te amo, te amo. — Susurro en mi oído. — Desde ahora solo me perteneces a mi. — Bajo una de sus manos hacia mi zona V, y la metió aún más, pero sin penetrarme, y la comenzó a acariciar levemente.

— Ah. — Dije cuando sentí como con sus manos, e labios recorría todo mi cuerpo.

— Ahora solo me perteneces a mi, y solo yo puedo tocarte. — Quito rápidamente mi bata, quedando casi desnuda, a su vista, bueno era la primera vez que un hombre me miraba desnuda.

Poco a poco, desabotone su camisa, derrepnete se levantó y aventó sus pantalones a un lado de la cama, junto con sus bóxers, abrí mis ojos grandes y sentí como se volvió a subir arriba de mi, comenzó a jugar con el elástico de mis bragas, y luego se llevó uno de mis senos a la boca, haciéndome sentir en las nubes.

Y con su otra mano, la bajo hacia mis nalgas, y las apretó, suavemente. Dejo mis senos y volvió a besarme suavemente, quito mis bragas ahora si quedando como Dios me trajo a el mundo. — Solo yo te puedo ver así. — Me miró y solo asentí nerviosa.

— Si.. — Dije con la voz cortada, fue metiendo su pene lentamente, mientras que solo tomaba su espalda y lo arañaba con mis largas uñas acrílicas.

— Te va a doler, pero luego te va a encantar. — Dijo metiendo un poco más, su ereccion en mi.

Cuando iba a soltar un quejido, mi cayó con un beso, que era diferente a los anteriores pero parecido a el primero, después sentí como el placer de hacía presente. Comencé a gemir sin control y tal como dijo, ya no sentía casi dolor, y solo sentía placer, pasó sus labios por mi mandíbula y luego se me quedó viendo.

— ¿Te gusta? Bebé. — Dijo besando mi cuello una vez más.

— Si.. Ah si. — Gemí de placer.

— Me encantas. — Dijo penetrandome aún más, sentí como se hacía un nudo en mi estómago. — Estas tan mojadita y tan estrecha para mi, solo para mi. — Se aferró a mis caderas y luego a mi cintura. — Nunca vas a olvidar este día. — Sentí como algo corría por mi entrepierna. — Este es mi regalo de cumpleaños. — Beso Mis labios. — Y siempre estaré para ti, siempre para ti. — Se salió de adentro de mi, y me pego más a él, volvió a besar mis labios y parecía como si ya me hubiera hecho adicta a él. — Eres mi bebé. — Me abrazo haciendo que mis pechos se aplastaran contra su pecho. Levanto mi mandíbula y me volvió a besar.

Plebes, si no llegó a actualizar estos días, no es por floja ni nada, pero mi perro este enfermo y para los que me conocen, saben que lo amo con todo mi corazón y es parte de mi familia, ya lo llevamos con el veterinario, pero tengo mucho miedo que le pase algo :( Es que lo amo demasiado.

Gracias por el apoyo! 💕

- Bxrbie