𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐒𝐈𝐄𝐌𝐏𝐑𝐄 | 𝘚𝘩𝘪𝘴𝘶𝘪 𝘜𝘤𝘩𝘪𝘩𝘢 [COMPLETA]

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Muerte

Raiden e Itachi decidieron dar una vuelta por la aldea intentando despejar sus mentes de muchas cosas sin embargo aprovechando que aquellas presencias que siempre los tenían rodeados no estaban por allí y también estaban lejos de su aldea un nuevo tema y problema surgio.

—¿realmente nos consideran traidores? — pregunto incrédulo Raiden, su frustración se notaba en su tono al hablar.

Al contrario de El Itachi tenía por otra cosa más que la desconfianza de los mandos hacia su propio clan, el temia a como podría reaccionar su padre, últimamente no estaba mucho en casa así que no sabía en que andaba su familia.

—Shisui hasta ahora fue el único que fue a presentar una queja, intentaron ser más precavidos, sin embargo... — antes de que termine Raiden lo interrumpió.

—¡vamos! Es Shisui, sean tan cuidadosos como sean el se dará cuenta de que lo observan, sus instintos aveces son terroríficos — simuló un dramatico escalofrío y sus palabras respondieron a los pensamientos de Itachi sabiendo a donde quería llegar.

El tiempo paso rápido entre quejas y alguna que otra risa por aquellas mujeres solteras acosadoras del poderoso y conocido Itachi Uchiha, por supuesto que no faltaban los hombres envidiosos y alguna que otra vieja chismosa que hablaban mal de su clan, y también era claro que al único que le afectaba era Raiden mientras Itachi solo le mantenía la cabeza fría.

Anochecio y volvieron directo al hotel donde descansarian al fin en su habitación, habían comprado unos onigiris para sus amigos quienes dudaban que hayan salido de la habitación debido a la condición de la fémina.

Itachi se dirigió a acomodarse directamente a la habitación que compartia con el mayor mientras el contrario iba a dejarles la comida a su hermana y a su mejor amigo, golpeo la puerta y tras cinco minutos simplemente de no contestar se impaciento y entro como niño por su casa.

La escena que entró lo tuvo otra vez entre la ternura y el enojo.

Shisui tenía una mano en los cabellos azabaches de la menor mientras uno de sus brazos recorría su cintura, mientras su pequeña hermanita descansaba en el pecho del contrario como si de un bebé se tratase.

Por primera vez en su vida había decidido no molestarlos, principalmente,

<<porque se notaba que ninguno de los dos había dormido bien la noche anterior>>

Sonrió y cerro la puerta tras el para dirigirse nuevamente con Itachi.

—¿como están? — pregunto el menor tras haber terminado de comer un onigiri y darle el último bocado.

—estaban durmiendo, cuando despierte supongo que comerán algo— se encogió de hombros e Itachi sonrió al ver que su amigo al fin estaba comenzando a ser mas comprensivo.