Yo en Dragón Ball

¡¡Peligro!! ¡¡¿Esos son los Saiyajins?!!

La cuenta regresiva para la llegada de los Saiyajins iniciaba, Adaike entrenaba junto a Trunks en una maquina especial creada por Bulma la cuál contaba con una gravedad 5 veces mayor a la que normalmente había en la tierra*. Esto se llevó a cabo ya que con un entrenamiento normal no sería suficiente para hacer frente a los Saiyajins que se acercaban y con la ayuda del padre de Bulma podían lograr un mejor avance gracias a su destacada lente científica. Por otro lado, Bulma se encontraba en una de sus oficinas analizando el rastreador de Raditz e intentando hacerlo funcionar para localizar a Tenshinhan y a los demás.
Adaike salía de la camara de entrenamiento con un Trunks agotado en sus brazos por el entrenamiento.
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*= Esto se debe a que por los pocos recuerdos que Adaike tiene, lograba recordar que al aterrizar en la tierra la presión de la gravedad no era tan fuerte a como lo era en su planeta natal. Obviamente la mayoría de sus recuerdos se fueron borrando con el tiempo hasta que cierta parte de estos fue desbloqueada por la revelación de la llegada de Raditz a la tierra. Con esto, le dio pistas a Bulma para que construyera algo con mayor gravedad. (No encontré mejor justificación, pero sin esa gravedad no podría hacerse tan fuerte T.T)
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- Este pequeño si que es fuerte... por poco me da un golpe en el rostro.- Decía Adaike dejando a su hijo sobre un sillón.-

- ¡No presumas tanto! Por otro lado... me pregunto como estará Gohan...- La mirada de Bulma se volvía algo triste por el destino de ese niño.-

- Estará bien... ¡Confío en que Piccolo no le hará nada malo!.-

- ¡¿Como puedes saber eso?!.-

- ¡Solo intuición! ¡¿Que te parece si contratamos a Piccolo como niñero?!.-

- ¡¡Ni loca!!.-

- Bueno pero no te enojes...- Suspiraba el azabache riendo un poco.-

- ¿Crees que saldremos bien de esta...?.-

- ¡Siempre lo hacemos! ¡Nosotros le ganaremos a los Saiyajins!.-

- ¡¡Entonces dejo el mundo en tus manos!!.- Bulma sonreía más animada tomando las manos de su esposo.-

- Sabes... intentó conectar mi pasado Saiyajin con la actualidad pero siento que me falta algo... imaginó que si logró encontrar ese algo... ¡Podré hacerme más fuerte!.-

- ¿De verdad? ¡¿Y como piensas lograrlo?!.-

- Desde que vivía en el Monte Paoz... me la pasaba meditando intentando conectar todo pero desde esos momentos he sentido que me falta algo... es frustrante...-

- ¡Confío en que lo decifraras! ¡Por ahora debemos enfocarnos en lo que pasará en un año!.-

- ¡¡Cierto!! ¡Creo que deberías ir a Kame House con el Maestro Roshi y Krilin para que intenten buscar a Ten y los demás!.-

- ¿Quieres que me lleve a Trunks conmigo?.-

- ¡¡Claro!! ¿Puedes pedirle disculpas al Maestro Roshi y a los demás por no poder ir? ¡Necesito enfocarme al cien porciento en el entrenamiento!.-

- Deben comprender en la situación en la que nos encontramos... no te preocupes.-

En algún lugar lejano, Piccolo ponía los pies en la tierra con el pequeño Gohan en sus manos.

- ¡¡Hora de despertar hijo de Goku!!.-

Piccolo movía al pequeño Gohan de manera brusca y al ver que no despertaba lo tiró cerca de un pequeño charco de agua logrando que el niño despertará intentando respirar.