Capítulo 19.

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A eso de las diez de la noche decidí que era buen tiempo para ir a la casa de Jaemin, pero como buen mejor amigo no podía llegar con mis manos vacías, por lo que pasé antes por una tienda de convivencia para comprar algunas golosinas para pasar una buena noche de amigos. Ingresé al lugar, el cual no tenía más de dos personas en su interior, caminé por el pasillo de las papas sacando una bolsa amarilla de un gran tamaño, luego seguí hasta encontrar los chocolates y galletas, tomé una caja de bombones y una con galletas de chispas de chocolate, acomodé todo en mis brazos para sacar dos bebidas desde el frigorífico del fondo y me acerqué al chico que se encontraba detrás de la caja.

−Hola bienvenido.

−Hola− saludé cortésmente, me quedé mirando unos segundos al chico frente a mi porque la verdad se me hacía familiar, tenía el cabello algo largo de color rubio, sus rasgos eran muy finos pero masculinos al mismo tiempo, miré su gafete encontrando un simple Hyunjin.

−¿Desea algo más?− preguntó cuando ya estuvo todo en una bolsa listo para pagar.

−Solo eso gracias... ¿disculpa te he visto antes?− la vista del chico se posó en mí.

−Puede ser, vamos a la misma universidad...

−Ah claro, te vi en la presentación del aniversario, fuiste uno de los que bailó, lo hiciste genial por cierto, tú y tus amigos son muy buenos− los ojos del chico se abrieron y un leve sonrojo se hizo presente.

−Muchas gracias− puso una gran sonrisa− Nos esforzamos mucho, queríamos estar al nivel del resto.

−Lo hicieron genial, mi amigo Ten dijo que fueron su actuación favorita.

−¿En serio dijo eso?− el asombro en su rostro era gracioso.

−Lo dijo.

−Wow, no puedo creerlo, él es un modelo a seguir para nosotros, todos en nuestro año lo conocen por ser el mejor de la carrera.

−Mi amigo es el mejor− sonreí cuando el otro asintió enérgicamente.

−Sería genial conocerlo.

−Suena como si fuera una clase de famoso.

−Lo es para nosotros− rio suavemente.

−Ven a comer con nosotros.

−¿Qué?− su sonrisa desapareció reemplazada por incredulidad.

−Si, ven con tus amigos y compartimos un almuerzo.

−¿Estás seguro?

−Claro.

−¡Muchas gracias!− exclamó feliz.

−Ni lo menciones... ¿Cuánto te debo?

−Oh no te preocupes por eso, tómalo como un regalo.

−¿No tendrás problemas?− pregunté preocupado.

−No tranquilo, mis padres son los dueños.

−Ah muchas gracias entonces, Hyunjin, espero verte pronto.

−Igualmente, adiós.

Salí con una sonrisa en el rostro, me encaminé a la casa de mi mejor amigo, deseando que las cosas se hayan arreglado con Jeno y esperando también que el tiempo que les di fuera suficiente para un gran reencuentro. Pasé varias calles antes de llegar a la que necesitaba, miré el cielo, el cual ya estaba oscuro debido a la hora que era, tomé un largo respiro disfrutando la brisa nocturna y terminé la distancia que me separaba con la casa de Nana, saqué las llaves que el chico me había prestado y entre haciendo un ruido exagerado para denotar mi presencia.

¿Algo más cliché que una apuesta? (MarkHyuck) #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora