En Ti Tengo Todo. (omegaverse)

III

ARISTÓTELES

Mis papás salieron temprano a trabajar, bajo la puerta mamá me dió una nota diciendo que llegarían tarde ya que es su aniversario y papá la llevará a una cita luego del trabajo, como tardarían en volver decidí salir de mi habitación, desayuné un poco de cereal, me cambié y use una compresa para evitar mojar mi ropa ya que aunque mi cuerpo estaba un poco normal gracias al te de mamá aún seguía en celo, como es temprano no hay casi nadie en el edificio así que tome mi ropa y las cobijas que retire en la madrugada para ir a la azotea y lavarlas.

Algo tan simple para mí fue todo un reto ya que mi cuerpo volvía a sentirse caliente, termine de lavar mi ropa y con dificultad volví al departamento, mi cuerpo se sentía muy débil incluso creí caería en las escaleras pero por suerte logré llegar bien a casa, me quedé un rato en la sala pero los síntomas de mi celo solo iban en aumento así que me di una ducha esperando eso ayudara y me encerré en mi habitación.

🚨 CONTENIDO EXPLÍCITO 🚨

BRUNO

No había mucha tarea así que Linda y yo planeamos una tarde de películas en su departamento, cuando no hay clases o no hay mucha tarea solemos hacer esto. Llegué al edificio donde vive, en la puerta encontré a su madre y amablemente me dejó entrar, subí las escaleras hasta el piso donde vive y un muy dulce aroma me recibió, el piso estaba inundado de feromonas de un omega en celo, trataba de controlarme pero era muy difícil ese exquisito aroma estaba enloqueciendo a mi alfa, rogaba que Linda abriera la puerta pero eso no pasaba.

Mi miembro ya crecía dentro de mis pantalones al final mi alfa tomo el control y busque la fuente de ese aroma que era del departamento de enfrente, la puerta estaba ligeramente abierta así que entre cerrando tras de mi, me fue muy fácil encontrar la habitación del omega se removía muy inquieto sobre la cama, portaba únicamente unos boxers y una playera, cuando notó mi presencia se sentó en la cama, sus ojos estaban negros por lo dilatadas de sus pupilas y había un muy lindo tono azul alrededor estaba siendo totalmente controlado por su omega lo que solo logro emocionar a mi alfa.

No espere más tiempo, quite mi ropa y me acerque a el su cuerpo se sentía tibio me acerque a su cuello y el movió su cabeza dejándome aspirar su delicioso aroma a cerezas, quite la ropa que lo cubría, no era tan delgado como parecía y aún así era hermoso gracias a su naturaleza, bese cada espacio posible de su piel, lleve una mano hasta su entrada sintiendo lo húmeda que estaba, apenas lo roce y ya estaba gimiendo, es muy sensible, con la poca cordura que me quedaba introduje dos de mis dedos dilatandolo un poco o lo lastimaria, en respuesta el solo gemía.

Después de un rato fui entrando lentamente en el, por sus expresiones parecía ser su primera vez haciendo aún más feliz a mi alfa.

Su interior envolvía de la mejor manera mi miembro, comencé a mover mi cadera escuchando sus gemidos, en verdad este niño es muy sensible, sus feromonas se volvían cada vez más intensas logrando marearme un poco, su entrada estaba tan lubricada que moverme era demasiado sencillo, el húmedo sonido de las estocadas y el choque de nuestras pieles invadían la habitación, sus expresiones de placer eran una auténtica joya y sus agudos gemidos música para mis oídos, realmente no tardo mucho en llegar al orgasmo manchando su abdomen con aquel líquido transparente similar a su lubricante.

Salí de él y no tardó en quejarse, lo puse boca abajo y de una volví a entrar en el lo que lo hizo casi gritar, de nuevo comencé a moverme, el solo apretaba las sábanas bajo sus manos y mordía su almohada para inútilmente callar sus gemidos, cuando di en su punto más sensible tuvo su segundo orgasmo y yo sentía el mío muy cerca, seguí moviendo mi cadera aumentando el ritmo cada vez más, el lindo omega solo gemía, movia su cadera buscando más placer y apretaba las sábanas en sus manos, cuando llegue al orgasmo el lo hizo por tercera vez y una cuarta fue agregada a la experiencia cuando sintió mi nudo creciendo en su interior, con fuertes gemidos recibía gustoso mi escencia hasta que finalmente se quedó profundamente dormido mientras esperaba el nudo bajara.

Cuando el nudo bajó salí de su interior notando como lo hacía también el resto de mi semen, con un trozo de papel lo limpie un poco e hice lo mismo conmigo, tome mi ropa, me vesti, lo cubrí con una sábana y salí de ahí, en el camino de vuelta a mi casa me disculpé con Linda por no llegar a nuestra tarde de películas diciéndole haber tenido un compromiso.