QUÍMICA IMPERFECTA

capitulo 17

Química Imperfecta.

Capitulo 17.

Los chicos y yo hemos llegado al lugar de entrenamiento (Leila, Kenia, Esteban y Tiam) Kenia es primera vez que viene por que la vez que veníamos no se pudo, ella dice que quiere entrenar así que hemos empezado a calentar, me eh colocado lo que necesito para entrenar al igual que los chicos, Tiam se aprovechó de la situación para enseñarle a Kenia aunque para ella va hacer un poco complicado por que apenas está empezando a practicar, Leila y yo hemos comenzado hacer  bloqueos de patadas directas (Ella me bloquea y yo la bloqueo a ella) mientras que Esteban entrena con un saco.

—¿podemos parar? estoy muy agotada—Hablo Kenia.

—Kenia apenas has dado tres patadas—Hablo Tiam.

—Es agotador —Dijo ella sentándose en el piso.

—No Kenia ponte de pie  no seas floja—dijo Tiam agarrándola de sus brazos.

Hicimos intercambios, Leila se puso a entrenar en los sacos mientras que Esteban y yo hacíamos bloqueos como anteriormente venía haciendo con Leila.

—Esteban tu eres muy vasto dale despacio—hable.

—Dramática que eres tu.

Cuando comenzamos a patear todo iba normal hasta que el mocoso de Esteban se le ocurrió agarrarme desprevenida y me tiró una patanda justo en el abdomen y aunque tenía pechera me saco el aire haciéndome caer al piso con mis brazos enrollados alrededor de mi cintura.

—Esteban tu eres muy vasto — Dijo Tiam corriendo hacia mi.

—Beith sabes que cuando estamos haciendo bloqueo no te puedes desprevenir —Hablo Esteban con preocupación.

—Si lo se, pero te avise que le dieras suave por que tú eres hombre y tienes más fuerza que yo baboso—Hable rodando mis ojos.

—Lo siento amor mío —Hablo Esteban ayudándome a levantar.

—Que pasaría si yo le diera a tu amigo —Señale con mi dedo índice su miembro.

—Ni se te ocurra —advirtió.

Después de  que me sentí mejor comencé a entrenar con el saco, luego descansamos, la pobre de Kenia dice que le duelen sus piernas y creo que mañana no va a dar para moverse así que se quedó sentada con su teléfono mientras nosotros seguimos entrenando.

Cuando terminamos de entrenar me quité algunos de los implementos y me mantuve en una de las bancas para poder normalizar mi respiración y mientras me quitaba lo demás unas manos me agarraron de la cintura por la parte de atrás y me alzaron, como alzar a cualquier muñeca.

—Quien quiera que me este alzando debería dejarlo de hacer por que estoy sudada—Hable.

—No me importa que estés sudada—esa era la voz de Sebastián.

—Sebas bájame te voy a llenar de sudor.

—Esta bien—me bajo y hizo que me volteara para darme un beso.

—¿Qué haces aquí?—dije confundida, por que yo nunca le había dicho que entrenaba aquí.

—Kenia me dio la ubicación —Hablo—Pareces una ratita mojada.

Reí por lo que dijo —Debería de irme a cambiar, vengo ahora.

—Es mentira Beith—Me jalo hacia el y dejó un beso en mi frente.

—No, pero debería de irme a cambiar.

Me fui a donde había dejado mi ropa y me duche rápido, me arregle en los vestidores de las niñas y los chicos hicieron lo mismo, luego salí y fui a donde se encontraba Sebastián; Cuando salimos de ahí fuimos a comprar Snack, Esteban y Tiam querían comprar cosas así que fuimos a comprar aquello que ellos querían.