Capítulo 44

2.7K 223 90
                                    

Hacía tanto tiempo que no desperaba junto a Billie, que cuando abrí los ojos aquella mañana estuve admirando y acariciando su precioso rostro hasta que mi estomago rugió.

Eran las tres de la tarde, y sentía mi cuerpo adolorido como si hubiera corrido en una maratón.
Menuda noche.

Cuando quise levantarme de la cama para preparar algo de comer, Billie se aferró a mi cintura y me atrajo de nuevo hacia ella.

—Buenos días mi amor. —susurró escondiéndose en mi cuello.

—Buenos días preciosa. —contesté con una risita.

Comenzó a dejar tiernos besitos en mi cuello, haciendo que riera mientras abrazaba su espalda desnuda.
Acabó poniéndose encima de mi y esos tiernos besos pasaron a ser puro fuego.
Cada vez que su piel entraba en contacto con la mia, era como si todo mi interior ardiera en llamas.

—Bi-Billie. —la llamé, pero seguía besando y mordiéndome el cuello. —Deja de hacer eso, me vas a ma-matar...

Suspiré por el placer y acaricié su espalda hacia bajo. Su piel era tan suave...
Tuvimos una sesión de ardientes besos hasta que el hambre pudo con nosotras.

***

Después de comer y de una buena ducha, decidí enviarle un mensaje a Charlie diciéndole que cuando no estuviera con Shawn, me llamara.
Y eso hizo, al cabo de una hora me llamó y le expliqué lo sucedido estos últimos días.

Me dijo que Shawn siempre iba a recogerlo cuando acababa de trabajar, sería el momento perfecto para aparecer por allí y darle una sorpresa.

Tenía tantas ganas de verlo...
Y Billie también, la veía muy emocionada y feliz.
Sobretodo feliz, y eso llenaba mi pecho de alegría.

—¡Charlie! —grité abriendo mis brazos y acercándome a él.

—¡Por fin! —dijo, salió de detrás de la barra y caminó a paso rápido hacia mi.

Nos fundimos en un maravilloso abrazo y luego hizo lo mismo con Billie.

—Qué fuerte que esteis aquí, las dos... Shawn no se lo va a creer. —dijo.

Tomamos un café caliente mientras Charlie acababa su turno.

—Dice que ya viene. —nos dijo sentándose en la mesa con nosotras.

Mi corazón se aceleró por las ganas de volver a ver a mi mejor amigo, y tanto Billie como yo no podíamos dejar de sonreir.

—Vamos, está esperándome fuera. —dijo al cabo de unos minutos.

Salimos del restaurante y vi un coche negro estacionado frente la acera.
Cuando Billie y yo nos acercamos tomadas de la mano, vimos a Shawn al volante.
Giró su rostro hacia nosotras, quienes estábamos fuera del coche mirándolo con una sonrisa.

—¿Qué cojones? —gritó dentro del coche.

Abrió sus ojos con sorpresa y se bajó a toda prisa.

—¡Madre mia! —gritó corriendo hacia nosotras.

Billie y yo nos soltamos la mano y también corrimos hacia él. Sus fuertes brazos nos envolvieron a las dos y nos apretujó contra él mientras no paraba de decir:
"Que fuerte, que fuerte."

Mientras abrazaba a mi mejor amigo y sentía el olor a su perfume tan familiar, mis ojos se llenaron de lágrimas y no pude contenerlas.

—Te he extrañado tanto... —dije entre sus brazos.

Cuando nos separamos y nos miramos a los ojos, me di cuenta de que él también lloraba de la emoción.
Tenía el pelo más largo y rizado, estaba guapisimo.

After you | Billie EilishDonde viven las historias. Descúbrelo ahora