Estaba en la casa del Marcelo, mi viejo. Hasta ahora ha sido lo mas incomodo del mundo porque se peleo con su polola y no ayuda que este en plena crisis por el Diego.
— ¿querí ayudar, Valentina? —se quejo la Martina, siendo que desde que llegue lo único que he hecho es limpiarle la caga que tienen en su departamento.
Claro, ahora que me siento a descansar se queja.
— déjame tranquila ¿querí? —me es inevitable no ser así con ella— desde que llegue te estoy ayudando, déjate de webear un rato siquiera.
a pesar de que los problemas de los viejos no se mezclan con los de los hijos me es imposible no mirarla con rabia, después de todo era la hermana de mi mamá.
Antes de que se supiera que le veían la cara de weona a mi mamá ella se metio con mi papá y lo dejaron pa' callao, pero igual se supo cuando la Martina se separo de mi tio.
No lo controlo.
— tenme respeto, soy tu... —se callo al segundo de cagarla.
— ¿tu que? ¿mi tía? —pregunte con rabia, esto mezclado con mis penas amorosas no ayudaban para nada.
A parte el Marcelo me obligo a quedarme toda la semana con el.
— la enojada aquí debería ser yo —la mire incrédula— tu papa trajo a unas cagas de hijos al mundo.
No me considero una persona violenta pero esto cada vez me superaba mas a tal punto de llegar a pegarle una cachetada, no me veía capaz de hacerlo y me arrepentía un poco.
quizás tenia razón.
Justo llego mi papá, la Martina fue corriendo donde el con la mano en su mejilla susurrándole algo que se me fue inaudible.
Igual fue una cachetada, pudo ser peor si lo ven de otro modo.
— vamos —dijo el Marcelo agarrándome de una manera bruta el brazo y llevándome a su pieza— como se te ocurre pegarle a tu tía.
— y que queriaí que hiciera —me sobe la muñeca— ¿Qué la abrazara por tratarme como las weas?
— ¡te guste o no ella es mi polola y tu tía!
— ¡nunca pero nunca va a ser algo para mí! —grité— ¡pa' mí no es nadie!
— mira, yo me voy a casar con ella y solo te pido que me entiendas, yo la amo a ella.
— ENTIENDE QUE NO PUEDO
— ¿NISIQUIERA ME VAS A FELICITAR?
— ¿QUERI QUE TE FELICITE POR METERTE CON LA HERMANA DE MI MAMA? — a este punto ya estaba llorando.
esta sensación era horrible, algo estorbaba mi garganta y se hacia cada vez más molesto.
— vas a tener que quererla como sea —tenía su mano levantada.
— ¿acaso me vaí a pegar? —susurre— ¡antes me tiro de un puente que aceptar a la mina con la que quizás cuantas veces te cagaste a mi mama!
la gota que rebalso el vaso fue lo que hice, me pego, creí que un papá no era capaz de hacerlo, que querian tanto a sus hijos como para agredirlos, pero me equivoque.
Sali rápido de ahí a la pieza donde dormía, cerré con llave después de entrar y me senté en la cama llorando.
No puedo negar la cantidad de veces que se me ocurrió tirarme por la ventana por este tipo de situaciones, porque no era la primera vez que me pegaba, quizás la tercera. Ya me daba igual.
Tomé los audífonos y me puse a escuchar a Bea Miller.
〟la violencia intrafamiliar es una mierda〞
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Baltikablu
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si ustedes lo han vivido, no le den la minima importancia, esto es un tema serio que muchas familias viven, no solo yo o ustedes. Denunciar pareciera no sirve de nada, pero sirve porque le das las fuerzas a más personas.
