4. Suspensión

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Pagar una renta, comprar víveres, estar al corriente con las cuentas de los servicios básicos y llenar el tanque de gasolina de su auto empezaba a ser una tarea difícil con el bajo ingreso monetario de KyungSoo, se planteaba en repetidas ocasiones del día conseguir un empleo de medio tiempo solo para pagar sus cosas, pero la idea de tener que hacer el esfuerzo de mantener un empleo que probablemente odiaría, lo estresaba.

La única solución inmediata que encontró para sus problemas era la razón principal por la que vivía solo, pero sopesando los pros, optó por regresar a vivir a la casa de su madre.

KyungSoo la había ido a visitar para darle la noticia, que regresaría a vivir con ella, por supuesto que la mujer no se lo tomó de buena manera, alegaba que si había sido lo suficientemente valiente para dejar su hogar fuera lo sufrientemente hombre para mantener su palabra.

—No lo hago porque quiera...— fue la respuesta que KyungSoo dio.

—Entonces no lo hagas— riñó su madre —Regresa a tu departamento y déjame vivir tranquila.

—Te estoy avisando que volveré la siguiente semana— repetía el chico de lacios cabellos negros.

Su madre lo observó con los ojos entrecerrados y una dura posición corporal. La señora Do era una mujer de carácter fuerte, poseía una personalidad que solía imponerse frente a otros. —Qué no te sorprenda si finjo que sigues viviendo en otra parte.

KyungSoo apretó la quijada, hizo puño una de sus manos y soltó un suspiro lleno de resignación, no quería discutir más con su madre, así que optó por dejarla tener la última palabra.

La relación de KyungSoo con su madre nunca había sido la mejor, desde muy temprana edad las asperezas comenzaron y tras el divorcio de la pareja Do, las cosas solo empeoraron. KyungSoo sentía que era el hijo menos favorito y es que las claras preferencias por sus hermanas lo orillaron a ser un chico apático y distante con su madre, la mujer tampoco hacia un esfuerzo por intentar acercársele, de hecho, rechazaba la idea de tener que mostrar afecto por su único hijo varón.

Había veces que KyungSoo pensaba que ese rechazo nacía del recuerdo que despertaba en su madre al relacionarlo con su padre, además de que la señora Do lo decía abiertamente en su cara, él lo sospechaba desde la infancia.

—¿Realmente es mejor? — se preguntaba KyungSoo mientras empacaba sus cosas en cajas de cartón. Haberse encontrado con su madre lo hacía desistir de su idea de mudarse. Pero las cuentas seguían atrasándose en su pago —Será solo un tiempo...

Pero a pesar de la mala relación, la señora Do seguía siendo la madre de KyungSoo, así que tampoco hizo mucho esfuerzo para evitar que KyungSoo regresara a su casa, de hecho, ni siquiera le pedía apoyo monetario para mantener las cuentas, incluso preparaba las porciones de comida justas para los dos. Era una extraña relación.

El joven KyungSoo había regresado a vivir con su madre y aunque las cosas al principio lucían para un terrible escenario, las cosas no resultaron tan malas al pasar de las semanas. Su madre había cumplido su palabra e ignoraba su existencia, al menos así no se la pasaban discutiendo.

Por otra parte habían pasado alrededor de tres meses desde que el agente Park había recibido la carpeta de investigación sobre el caso de los desmembramientos. Y no había sido capaz de encontrar ni una sola pista nueva.

Parecía que se había topado con uno de esos casos imposibles de solucionar.

Más que frustración por no lograr hallar un culpable, ChanYeol temía por la sociedad, una persona capaz de cometer aquellos actos y de actuar tan pulcramente como para no dejar ni un solo rastro atrás, era aterrador. Y la persona culpable seguía por en completa libertad.

CRIMINAL-MENTE [ChanSoo] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora