Vampiro y hombre lobo, ¿imposible?

Capítulo 29

(...)
Shit, baby, shit.

POV. Samuel

Flashback

Estaba en mi cuarto en el edificio común. Mi hermano mayor era mi compañero de cuarto. Estábamos jugando a los soldados de plástico cuando se escuchó el primer grito. Era el grito de una mujer. Mi hermano puso cara de pánico y me puso en su espalda. Yo estaba feliz porque estaba haciendo de caballo mío. Reía a carcajadas mientras botaba en la espalda de mi hermano. Era muy divertido que me cogiera y me diera vueltas como cuando era pequeño y tenía cinco años.  En aquel momento tenía seis. Ya era muy mayor. Mi hermano corría y corría, cada vez más rápido. Estuvimos a punto de caernos un par de veces pero él se recuperó rapido. Siguió corriendo mientras pasaba por encima de personas que dormían todas en el suelo en posturas extrañas. Algunos estaban con los ojos abiertos mirando al vacío y otros estaban bocabajo. Le iba a preguntar a mi hermanito por qué dormían así cuando él me hizo una seña con el dedo en sus labios para que estuviese callado. Y entonces me sussurró.
- Sam, vamos a pasar por delante de unos señores malos que nos quieren hacer daño, así que quiero que cierres los ojos y no digas ninguna palabra ni hagas ningún ruido, estaremos jugando al escondite con esos señores malos y no nos pueden ver, de acuerdo?
Asentí. Se me daba genial jugar al escondite, siempre ganaba cuando jugaba con Max y Jully. Mi hermano volvió a salir corriendo y yo cerré fuerte los ojos. Escuché ruidos fuertes y gritos, por lo que abrí un poquito los ojos, y me encontré en medio de un montón de gente que corría hacia unos vampiros. Sabía que eran vampiros porque Max me dijo que tenían unos colmillos muy grandes y afilados y no necesitaban transformarse para tenerlos, como nosotros. Vi a mi madre y a mi padre atacar a uno de los vampiros los dos juntos. Sonreí y estuve a un pelo de gritarles palabras de ánimo cuando recordé que mi hermano me había dicho que estuviese callado. Cerré la boca sin articular palabra. De pronto mi mirada se cruzó con la de mi madre y esta nos miró preocupada. Sus ojos se aguaron y los míos también. No me gustaba ver llorar a mi mami. Detrás de ella vi a un vampiro, y mi papi también, por lo que él corrió hacia el vampiro, interponiéndose entre la pistola que tenía el vampiro y mi mami. Una bala salió del cañón del arma y le dió a mi papi en el pecho. Después otra que le dio en el hombro. Mi papi y mi mami gritaron de dolor y yo no lo soporté más y me bajé de la espalda de mi hermanito de un salto. Corrí hacia donde se encontraban mis padres tumbados juntos, agonizando. Corrí y corrí, y sentía a mi hermano detrás de mi, corriendo y llamándome por mi nombre completo (cosa que odio) para que volviese con él. Pero no le hice caso. Llegué al lado de mis papis y los abracé fuerte, llorando.
- Sammy, no olvides que te queremos...- Murmuró mi mami como pudo.
- No, no, no... No os vayais como la tía de Max, no por favor...
- Cachorrillo te queremos, no lo olvides, y recuérdaselo a tu hermano cuando nosotros ya no estemos...- Dijo mi papi mientras tosía fuertemente.
- No, no, no, no, no, por favor....- Sollocé fuertemente. Mis papis se dieron la mano y se sonrieron mutuamente antes de cerrar los ojos a la vez. Sus sonrisas en escasos segundos decayeron. Y supe que ya no estaban conmigo. Lloré sobre ellos hasta que una voz a mis espaldas me detuvo.
- Quita niño, quiero ver las caras de mis víctimas.
Me di la vuelta lentamente mientras mi sangre se calentaba cada vez más y tuve que cerrar mis manos en puños, clavándome las uñas en las palmas.
Terminé de darme la vuelta para encontrarme con el vampiro que había apretado el gatillo que determinó el final de mis padres. Lo miré furioso y sentí que Lionel (mi lobo) me gritaba que le dejase salir para poder destrozarlo. Tan solo me dejé llevar. Era mi primera transformación, y se suponía que la primera transformación era a los diez años. Me dolió muchísimo, era como si un tanque estuviera pasándome repetidas veces por encima. Cuando la transformación acabó me sentí con mucha energía, parecido a cuando tomaba mucho chocolate y después empezaba a saltar por encima de los sofás de nuestro cuarto haciendo reir a mi hermano. El vampiro me veía sorprendido, pero no le di tiempo a que hiciera nada, porque salté sobre él e hice lo mismo que habían echo mis papis con el otro vampiro. Le arranqué la cabeza con todas mis fuerzas. Cuando terminé me sentí algo mejor, pero sin darme tiempo a nada mi hermano me cogió en brazos estando yo aún en forma de lobo. Corrió conmigo en brazos hacia donde se encontraban David, el primo de Keira mi amiga mayor, y Mark y Abby. Me puso en brazos de David y me miró con lágrimas en los ojos. Luego miró a David y le suplicó.
- Cuídalo por favor, no dejes que le hagan daño.
David asintió. Yo no entendía nada, quién me iba a hacer daño? El vampiro que había matado? Pero Baren no se daba cuenta de que ya lo había matado? Estaba a punto de decírselo cuando escuché su voz en mi cabeza.
- Cuidate pequeño, te quiero, no lo olvides.
Gemí en los brazos de David. Éste me acarició entre las orejas con pena. Después se dio la vuelta y echó a correr conmigo revolviéndome y gruñendo y aullando. Aquella fue la última vez que vi a Baren.
Fin Flashback

Desperté agitado en una cama que compartía con Max y Lucas. Entonces recordé lo que había pasado y me eché a llorar silenciosamente. Entonces se abrió la puerta de la cabaña, mostrando a Daniel (el vampiro bueno que había ayudado a los otros a construir la cabaña) con un ciervo a sus hombros. Me sequé rápidamente las lágrimas con la manga de mi chaqueta y sorbí por la nariz. Me levanté de la cama pero mis piernas fallaron. Cerré los ojos esperando la caída pero esta no llegaba. Abrí los ojos achinándolos un poco y me encontré con el rostro divertido de Daniel. Al verlo me volví a secar rapidamente las lágrimas que se me habían vuelto a escapar con la manga de la chaqueta. Él frunció el ceño y dijo con voz divertida.

- No uses la chaqueta, busca un pañuelo.

Aquello me recordó a lo que decía mi mami y rompí a llorar de nuevo. Noté a Dani tenso. No sabía que hacer.

- Hey enano, no es tan terrible usar un pañuelo, yo lo he probado, y es más eficaz que la chaqueta...- Dijo con tono burlón. Reí, alegre. Él me dejó en el suelo con una sonrisa.

- No soy enano, ya tengo seis años y ya me he transformado.

- En serio?

Yo asentí enérgicamente antes de hablar en un susurro.- Fue doloroso, pero tenía que proteger a mis papis...

Daniel asintió de acuerdo. Entonces me miró con una sonrisa de nuevo. Lo miré ceñudo.

- He traído una cosa, quieres jugar con los soldaditos?

Yo abrí mucho los ojos para luego asentir rápidamente con una sonrisa ilusionada en el rostro. Agité la cabeza tan rápido y con tanta furrza que me mareé. Di unos pasos pareciendo un patito e hice reir a Daniel y a unos cuantos chicos mayores que andaban por allí. Sonreí y corrí a despertar a Max y Lucas para jugar.

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Babys, decirme quien narra el siguiente cap, que estoy seca de inspiracion!! Beshitosh babys de mi corashon!!