Maybe it's love [Valdangelo]

Capítulo 15: Prótesis

Un mes.

Ha pasado un maldito mes desde que perdió la pierna y es simplemente insoportable.

Por más que Will le había dicho que podría acostumbrarss a esa situación... No podía, realmente lo uneta, pero el tener que depender de alguien para todo, es molesto.

Razón por la que Will lo obligó a usar las muletas, fue un suplicio, son molestas y difíciles de manejar, por eso nunca fueron su primera opción, pero al menos le solucionaron su vida estando en su cabaña.

Y cuando no queira usarla en lo más mínimo Leo esta allí para ayudarlo sin ningún problema, siempre suele animarlo con algún mal chiste, darle besitos si está de mal humor y recordarle el cuanto lo ama, ese chico simplemente es un idiota que sabe como hacerlo sentir mejor.

Esta a su lado cuando más lo necesita y está muy agradecido con ello, pero quiero hacer las cosas sin muletas, sin ayuda, sin una silla de ruedas, como solía hacerlo antes.

La puerta se abre de un color asustandolo.

—¡Sombritas! —el chico entra corriendo a su cabaña.

Nico le dirige una mirada al chico, esta dispuesto a gritar, pero esa intención desaparece al notar la caja que el hijo de Hefescto trae con él.

¿Acaso...? Tiene que confirmarlo.

—¿Qué traes allí? —pregunta el hijo de Hades con curiosidad.

—Es un regalo para ti —sonríe ampliamente.

Se acerca a él, deja la caja en el suelo y la abre, sacando de esta una prótesis, Leo la muestra con orgullo, es su creación más perfecta y le había tomado varios intentos conseguir el resultado que quería.

Nico no puede evitar sonreír, es justo lo que se había imaginado.

—Me tomo más tiempo de lo que creí —suelta un pequeño suspiro y mira al chico—. Pero tenía que asegurarme de que saliera perfecta y de que sea cómoda para ti —explica un tango ansioso.

—Gracias, Leo —Nico no puede estar más agradecido.

—No me gustaba verte así de mal, así que pensé que sería bueno hacer esto para ti, podrás volver a ser el mismo de siempre e ir a done quieras sin depender de nadie, justo como tu quie-.

Leo no puede terminar con su relato, pues Nico lo tomó de las mejillas, para así darle un beso y callar todo la sarta de palabras que estaba soltando.

Nico se aleja lentamente y mira al chico que está completamente sonrojado por esa acción.

—No tienes que dar tantas explicaciones, Leo —sonríe dulce—. Es un gesto muy lindo, en serio, gracias.

—S-si, eh, yo, tu —Leo sacude la cabeza un par de veces—. Hay que probartelo, si no se siente cómodo dímelo y lo arreglo —asegura.

—Está bien.

Leo sonríe, un poco más calmado lo ayuda a colocarse la prótesis, Nico la siente cómoda, probablemente no será fácil, pero va con seguir adaptarse a esta nueva prótesis.

Y lo hará.