Alexia es la hija de uno de los mejores amigos de All Might, es hermosa e inteligente, pero su kosei es peligroso y ella no puede controlarlo, el único capaz de ayudarla es el andrajoso profesor oruga Aizawa Shota y su kosei Erasure. Pero... ¿Qué pa...
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POV Alexia. La mañana siguiente me levanté igual de mala gana, pero al recordar los planes de esta noche, inmediatamente me recuperé. Apenas llegué a la escuela busqué a mi nueva amiga. -Hola Jiro, ¿estás emocionada por esta noche? -Bastante, pero qué vamos a hacer... no tengo idea de tus planes- preguntó la peliazul. -Sorprise- susurré a la par que Mic entraba al aula para comenzar la clase de Inglés, causando instantáneamente que los ojos de Kyoka brillaran como dos estrellas. El resto del día fue más de lo mismo, no sé por qué me molestó no ver a Aizawa en todo el día; por otra parte, Bakugo no paró de actuar como mi guardaespaldas. La clase teórica con Cementos no fue tan aburrida, pero la emoción de lo que vendría después me mantenía inquieta. Al terminar cogimos un autobús hacia el complejo de tiendas de la ciudad y noté que mi amiga estaba inquieta. -¿Algún problema Jiro?- me di cuenta que no me miraba a los ojos, sino al piso, por lo que debía ser una situación embarazosa- si es por el dinero, soy millonaria y no tengo en qué gastarlo, así que de veras me gustaría regalarte una tarde de compras. Solo no se lo digas a nadie, cuando tienes dinero, la gente te trata diferente. -Gracias por todo- susurró Kyoka y nos adentramos en las tiendas. Dos horas después llevábamos al menos tres bolsas en cada mano y escogimos para Jiro un top negro, complementado por unos minishorts del mismo color y tenis. Mientras que yo llevaba un bonito vestido veraniego de color azul prusia, que dejaba mis hombros al descubierto al tener ambas mangas caídas y unos tenis del mismo color terminaban mi conjunto. Cuando entramos al bar casi todo el mundo se giró hacia nosotras y fuimos a sentarnos a la barra donde se encontraba Kenzaki. -Hola Aki, ella es Jiro Kyoka, mi amiga, ponme lo habitual, a ella también- dije tamborileando con mis uñas en la mesa. -No, yo no bebo- dijo la peliazul sonrojándose. -¡Yo tampoco tonta!, aquí lo único que vamos a probar es jugo y avellanas- sonreí divertida, cuando vi entrar a nuestros dos profesores- ahí están- señalé. -Alexia!!! Jiro!!!!!- gritó Mic haciendo que a todos nos doliese la cabeza- ¿viniste otra vez a traer la comida de tu mamá o a pasar el rato?- preguntó emocionado. -Las dos- respondí observando que el pelinegro llevaba mala cara. -Qué guapos se ven los senseis sin sus trajes de héroe- susurró Kyoka. -Sí, lo que sea, ahora tengo que hallar la forma de dejarlos solos a ustedes- respondí sin querer reconocer que Aizawa estaba jodidamente sexy- ¿Eraser, me puedes acompañar un momento? Necesito hablar algo serio contigo. -¿De qué trata?- preguntó aburrido. -Es privado, ven, vayamos a una mesa- contesté ganándome un silvido de Mic. Ya sentados en la mesa el pelinegro me miraba interrogante- ehm, así que, te debo una carta de disculpas y yo... nah, no tengo nada que decirte, solo quería dejarlos solos- afirmé señalando la barra donde ya Yamada hablaba animadamente con Jiro. POV Aizawa La jodida mocosa traía una excusa de vestido que dejaba bien poco a la imaginación, me llevó a una mesa apartada y yo solo esperaba que no estuviese tramando nada raro, pero mis esperanzas se hicieron trizas cuando señaló a Mic y Kyoka. -¿Estás loca?- espeté enojado levantándome para interceder, pero Alexia fue más rápida y me sentó nuevamente de un empujón en el pecho, causando que ella misma perdiera el equilibrio y cayera desparramada sobre mi- ¿Qué estás haciendo? -¿Deteniéndote de que jodas algo bonito entre dos personas?- respondió ella poniendo su rostro peligrosamente frente al mío. -¿Bonito? Él es su profesor Kane- contraataqué mirando su boca sin poder evitarlo- le lleva más de diez años. -¿Y qué? Si interfieres ahora nunca sabremos si hubiese valido la pena o no- susurró haciendo una mueca sexy con su labio inferior. -Qué más da si son o no la pareja ideal, las relaciones amorosas entre profesores y alumnos están estrictamente prohibidas y la UA es bastante estricta con ella- dije más molesto de lo que quería sonar y frenando mi mirada que se dirigía nuevamente a sus labios- Mic es una celebridad y un héroe profesional, si se descubriese su relación, ¿tan siquiera puedes imaginar las consecuencias que traería para ambos?- pregunté irritado. -Jiro está enamorada de él, quizás tengas razón y esto es demasiado, te juro que entiendo tu punto de vista, pero también entiendo el de mi compañera y a pesar de no estar en su misma posición, comprendo lo doloroso que puede resultar no estar con la persona que amas- me sorprendió el último comentario, después de todo la niñata sí tenía algo de madurez- déjalos hablar otros diez minutos, no te cuesta nada- rogó con sus manos sobre mi pecho, lo que me hacía difícil pensar. -No, sé que es difícil separarse de personas queridas, pero el trabajo de un héroe es sacrificarse, mejor apréndanlo desde ahora- exclamé tratando de sonar inexpresivo. -Pero... por favor, no lo hagas- pidió mirando directamente a mis ojos y sonrojándose tras descubrir la posición en que estábamos, trató de pararse y el resultado fue peor, pues, tropezó con sus propios pies, para evitar que cayera la agarré de la cintura, ocasionando que perdiera el equilibrio y terminara sentada en mi regazo, entonces se puso roja y maldijo por lo bajo- mierda... pareciera que los que estamos ligando somos tú y yo y no Jiro y Mic. -Sí, que estés sentada en mi regazo no ayuda a la curiosidad de la gente- gruñí a pesar que estaba aguantando la risa ante su coloración facial. -¿Mucha gente nos vio?- preguntó clavando sus asustados ojos en los míos. -No, todo el mundo está en lo suyo- murmuré con una sonrisa- ahora vamos levántate, que no quiero que la gente piense cosas raras. -Lo siento, pero por favor, dales una oportunidad- rogó poniendo nuevamente una de sus manos en mi pecho cuando nos pusimos de pié, agarré su mano con la mía y la miré directamente a los ojos. -Mira mocosa, Mic ya no es un niño, si me quiere escuchar, lo hará, pero si no, no me hará ningún tipo de caso, siempre ha sido así, pero es mi deber como amigo y compañero de trabajo recordarle su posición- murmuré cerca de su oído para que escuchara, lo que causó que nuevamente se sonrojara. -Está bien, sé que no puedo detenerte, pero... sensei, no te enfades con él si quiere quedarse con ella- murmuró en mi oído mientras caminábamos hacia la barra. -Oh, you return guys, ¿saben que Jiro sabe tocar más de cinco instrumentos musicales y además canta?- gritó Mic sin su quirk feliz de la vida. -Necesito hablar contigo- dije simplemente, a lo que mi amigo asintió y fuimos a una mesa libre- ¿tienes idea de los sentimientos de esa chica por ti? -¿Seriously? Wow no me lo esperaba, pero sí voy a decirte que ella es muy interesante y sexy- contestó un raramente pensativo Yamada, mientras yo me daba una palmada mental- Alexia también es sexy, tú... -Saca a Kane de la ecuación, sabes que yo no... en fin, Hizachi, ¿te estás escuchando? Es tú alumna, ¿qué pasa si tienen una relación y sale a la luz?- pregunté frunciendo el ceño. -Pues voy a tener novia y vacaciones en una isla o algo así- contestó el rubio con una sonrisa, ganándose una mirada mortal por mi parte- no te preocupes Shota, si llegase a pasar sabes que no me arrepentiría de nada. -Haz lo que quieras... me voy a casa, no quiero ver cómo termina esto- espeté y luego me marché, mientras que Mic regresó junto a las chicas que ahora conversaban con Diane. Cuando llegué a mi casa en la otra parte de la ciudad, me senté pensativo en la sala: _Qué con esa estúpida actitud de Mic, ¿él no entendía la magnitud de los problemas que podría ocasionar?_, si tuviésemos diez años menos inclusive estaría de acuerdo con él, y probablemente estuviese tirándole los tejos a la mocosa _olvida que pensaste eso infeliz_. Lo que está haciendo es demasiado irracional e ilógico como para que yo lo apoye, a diferencia de la mocosa americana, pero bueno qué se iba a esperar de ella, si todavía es una niña, jodidamente sexy, pero una niña. -Tch, no, no voy a pensar más en esto- me dije en voz baja y entré a mi cuarto. POV Alexia -Hello girls, Jiro, ¿quieres bailar conmigo?- preguntó Mic con sus ojos verdes fijos en los de ella, mientras que la chica asentía efusivamente y se retiraban a la pista de baile donde se perdieron en la multitud. -Mom, necesito reemplazar las estúpidas matas de nuevo y que Kyoka duerma en uno de los cuartos de huéspedes. -Entendido querida, mañana hago lo de tu cuarto, en cuanto a tu amiga, desde que me dijiste que nos visitaba, ella tuvo su cuarto preparado- contestó mi progenitora- ese profesor tuyo se fue con muy mala cara. -Le dije que no se enojara con Mic, y qué es lo primero que hace el infeliz, va y se enfada con su mejor amigo... maldito, ni corazón debe tener, ¿por qué no puede entender que dos personas se amen a pesar de las consecuencias?- afirmé molesta con la estúpida actitud que había adoptado Aizawa. -Generalmente el que parece más indiferente al amor, es el que más miedo tiene a que le hagan daño, quizás él teme por la seguridad de su amigo o quizás el tiene una situación parecida a la de su amigo y proyecta su enojo consigo mismo hacia su amigo- respondió sabiamente mamá, mientras comía su comida. -Debe ser por la primera, no creo que Aizawa sea un hombre que sucumba a las tentaciones- dije y mi madre alzó una ceja por el raro comentario- es que es muy amargado y frío, por eso lo digo. Alrededor de la 1:00 AM nos retiramos ya que lastimosamente mañana teníamos clases, aunque yo no pude pegar ojo hasta las 3:00 AM pensando en la conversación a solas que tuve con la oruga, es el único hombre que he conocido que no se pone nervioso estando tan cerca de mi, a diferencia de mi cuerpo que se convierte en gelatina rosa cuando él está cerca, estuve literalmente sentada en sus piernas y solo se limitó a bromear... ¿será una oruga asexual?
